Hoy volvemos a escuchar esta bonita canción que presentaron los guitarristas Micky Moody y Bernie Marsden en el primer y a la postre único disco de estudio de los Company Of Snakes, que no era más que otra denominación que este imprescindible dúo puso en marcha para seguir el sendero musical que dibujaron junto a David Coverdale en Whitesnake. Dicha canción apareció en el álbum de título Burst The Bubble, un estupendo disco lleno de un Blues Rock de ese bueno que está por encima de los manidos estandars que casi todo el mundo que no tiene ni puta idea de Blues maneja y mancilla sin rubor alguno. Con la colorida voz de fuerte regusto de Stefan Berggren, un cantante sueco que descubrieron nuestro encantador par de guitarras, se marcan una interpretación pletórica de garra y dinamismo que te engancha desde que la empiezas a escuchar. Además cuenta con el sello personal de la slide de Micky Moody en el puente tras el estribillo que hace que el tema gane más enteros de los que ya de por sí atesora. Moody tiene un toque especial de slide, personal y reconocible al instante; no en vano se tiene bien ganado el reconocimiento dentro del mundillo por su inspirada manera de tocar la guitarra con el tubo. Ya lo demostró sobradamente durante sus años dorados con Whitesnake y lo sigue haciendo en cuanto le ponen una guitarra eléctrica delante.
Tanto Micky Moody como Bernie Marsden se han pasado muchos años haciendo música juntos, concretamente desde que compartieron estancia en los mejores años de la etapa más clásica de Whitesnake. El grupo que montó David Coverdale tras la separación de Deep Purple a mediados de los años setenta pronto se engrasó con la entrada de este par de guitarristas tan sin par. Ambos fueron los principales responsables del sello musical de Blues Rock/Hard Rock que durante esos años abanderó la también conocida como Serpiente Blanca. Los dos acabaron mal con David Coverdale, pero durante los años posteriores siguieron interpretando en directo esas canciones que les hicieron famosos; normal por otro lado, son sus composiciones y tiene todo el derecho del mundo a hacer con ellas lo que estimen oportuno.
Whitesnake 78: Neil Murray, Bernie Marsden, David Coverdale, Micky Moody, Jon Lord y Dave Dowle. Grupazo. |
El caso es que durante los años noventa y principios del nuevo milenio la Moody Marsden Band han seguido presentando sobre los escenarios de medio mundo ese ramillete de temas ganadores. Lo han hecho bajo diversas denominaciones, de hecho seguir las peripecias y avatares de estos años de nuestra querida pareja de bluesmen supone un apasionante ejercicio de investigación para conseguir completar el delicioso galimatías que no tuvieron más remedio que construir forzados por los diversos acontecimientos de variada enjundia que se veían obligado a protagonizar. Una de estas formaciones respondía al nombre de The Snakes y no era más que un combo que recuperaba el espíritu musical de esos Whitesnake clásicos; sin olvidar la bandera del Blues; pero con una mayor dosis de Hard Rock. Vamos, la continuación perfecta de la línea que se amputó cuando se vieron forzados a abandonar el grupo de Coverdale a principios de los ochenta. Con este grupo publicaron un directo con repertorio completo de los Whitesnake y un disco de estudio titulado "Once Bitten". Ambos discos contaban a la voz con otro de los descubrimientos de este par de excepcionales músicos: hablamos de Jorn Lande. Como curiosidad podemos comentar que en el libreto interior del disco aparecía como Johnny Lande. El ahora conocido como Jorn a secas puso la voz a esta agrupación y asombró al mundo entero con su poderío vocal y su timbre idéntico al de David Coverdale. Moody & Marsden aprovecharon esta asombrosa circunstancia para facturar un pedazo de obra maestra en estudio con la que demostraban a todo el que les quisiese escuchar por donde deberían haber continuado los Whitesnake de entonces. Todo un puñetazo sobre la mesa que seguro no dejó indiferente a nadie que lo escuchó, estoy convencido que incluso llegó a las orejas de David Coverdale y apuesto a que no daría crédito al escuchar a la voz a un clon suyo en un estado de forma tan exuberante.
Por desgracia el disco solo se publicó en un principio en Japón, de este modo un elevado público potencial ni siquiera se enteró de que este grupo existía -ya ves, cosas de nuestro querido mercado musical-, por lo que acabaron pasando con más pena que gloria hasta que se disolvieron. Como anécdota cachonda podemos decir que el nombre del grupo estaba registrado a favor de Jorn Lande ¿?, por lo que cuando salieron tarifando nuestros queridos M&M tuvieron que montar una nueva formación con un nuevo nombre. Aquí es donde salen a escena estos Company Of Snakes de Stefan Berggren a la voz que acabaron registrando el disco sobre cuya canción versan estas letras. Esta nueva formación aprovechó una invitación del prestigioso Wacken Festival para publicar un doble disco en directo utilizando el grueso de esa actuación, de nuevo con el repertorio clásico de Whitesnake; sin problemas. Poco después se lanzaron de nuevo al ruedo con el disco de estudio "Burst The Bubble" en el que se encuentra nuestra canción protagonista. Este disco no deja de ser una nueva regrabación de las canciones del anterior "Once Biten" con el añadido de algún que otro tema nuevo y la versión de este "Run run run".
Esta canción es una revisión del tema que compuso Matt Andes y que grabó con su grupo Jo Jo Gunne a principios de los setenta, en el setenta y dos para ser más preciso. Otro gran tema que pasó en su día sin pena ni gloria y que Moody & Marsden recuperaron para su nuevo disco. La canción lleva el clásico slide de Micky Moody, un tipo que será recordado entre otras cosas por su personal, inspirado y acertado uso del tubo en el mástil a la hora de tocar la guitarra. Ni que decir tiene que la canción, pese a ser muy buena de por sí, gana muchos enteros con el uso del tubito solista marca de la casa. Todo un temazo de Hard Rock Blues de los buenos, aderezado con la profunda y elegante voz de Stefan Berggren. Lamentablemente el disco tuvo tan poca repercusión mediática como "Once Bitten" de los Snakes y, poco después, el combo se volvió a desintegrar.
Nuestros tenaces protagonistas lo siguieron intentando, inasequibles al desaliento, con otras tantas reencarnaciones del mismo proyecto. No obstante acabaron tirando la toalla definitivamente tras unos cuantos intentos nada fructíferos y, no sabemos los entresijos de lo que pasó en profundidad al final de todo, pero lo cierto es que la hasta entonces infranqueable relación entre Micky Moody y Bernie Marsden parece que se resquebrajó hasta el punto de que no se les ha vuelto a ver juntos. Incluso en el concierto homenaje al tristemente fallecido Jon Lord, pese a ser invitados y asistir ambos al eventos, no llegaron a compartir escenario; ni siquiera en un evento tan significativo como ese. En fin. Ambos han publicado sus respectivas autobiografías, de lectura obligada para todo aquel que sienta algo por el Blues Rock, pero ninguno ha abordado el tema de la ruptura. Desde luego que es una pregunta obligada si alguna vez nuestros caminos tienen la fortuna de cruzarse. Pero hasta entonces disfrutemos una vez más de su buen hacer cuando de música va el negocio. Tal vez la mejor pareja de músicos a la hora de hacer Blues Rock de ese con caña; solo tal vez.
Company Of Snakes: "Ride ride ride / Run run run".