Hace unas semanas planteábamos por aquí la necesidad de comentar unas
palabras sobre ese gran cantante que responde al nombre de Paul Shortino y qué
mejor momento ahora que todavía están recientes sus recientes actuaciones del
pasado mes de Junio en Madrid y Barcelona con King Kobra.
King Kobra.
Shortino puede que sea
uno de los cantantes más poco reconocidos dentro del circuito del Hard Rock y esto resulta bastante
injusto puesto que, pese a no ser uno de esos cantantes definitivos y más
grandes que la vida, es poseedor de una voz muy personal. Un tono grave que
modula con maestría y que rompe en unos rasgados ideales para acompañar ese
tipo de canciones que tanto nos gustan. Su tono natural resulta idóneo para
temas densos y en clave bluesy, pero
también tiene una elegancia natural para modular y llenar de matices cada línea
vocal que afronta. No es una voz de agudos, desde luego, pero cuando sube de
tono y rompe hace que la canción gane muchos enteros; sobre todo para los que
nos gustan esos temas que van creciendo en intensidad hasta que explotan en
algún momento determinado. La mezcla perfecta entre garra y sensualidad.
Paul Shortino ha puesto su
voz en distintos grupos a lo largo de todos estos años. Se dio a conocer con su
grupo de siempre, los Rough Cutt. Se
trata de una especie de grupo americano de Hard
Rock que ha adquirido la categoría de culto con el paso de los años, nunca alcanzó el éxito pero es
bien conocido por todos los amantes del género. El empujón para el grupo de Shortino vino de la mano de Ronnie James Dio; sí, nuestro añorado
vocalista y su entonces mujer/mánager/arpía Wendy les escucharon, vieron su potencial y decidieron apadrinarles
–Paul sigue mostrando su
agradecimiento y reconocimiento a la figura de Ronnie, al que llama su ídolo y amigo, acordándose de él en
conciertos como el del otro día en Madrid con King Kobra y que dice mucho de su calidad humana-.
Rough Cutt.
Paul Shortino en Los Angeles durante el Memorial por la muerte de Ronnie James Dio.
Tras la historia de Rough Cutt,
nuestro hombre pasó a formar parte de Quiet
Riot. Sustituyó al malogrado cantante Kevin
Dubrow, al que echaron sus propios compañeros hartos de su insufrible actitud
de estrella. Con ellos grabó el estupendo pero poco reconocido disco titulado “Quiet Riot”, lleno de grandes
canciones y que, en un mundo justo, les hubiera encumbrado de nuevo al
estrellato. “Stay with me tonight”,
la canción que abre el álbum, es un temazo que merece la compra del disco por
sí solo. Editaron un vídeo en directo de su gira de presentación en el que,
desgraciadamente, la voz de Shortino
no estaba en buen momento. El tema de los cantantes siempre ha sido muy
delicado, con coger un ligero resfriado ya no puedes cantar. Por otro lado, un
tipo de voz como la de Paul y su
manera de interpretar se resiente mucho si no está al cien por cien. Estos
problemas con la voz también los arrastró en el directo en solitario que sacó
años más tarde bajo el título de “Booked,
Toured And Released”. Por el contrario, las tres oportunidades que he
tenido de verle en directo me ha llamado la atención por lo bien que ha
cantado; esa voz llena de pasión, de Soul.
Quiet Riot: "Stay with me tonight". Vídeo clip oficial.
Kevin Dubrow y Paul Shortino.
También colaboró en un proyecto con Mitch Perry, el estupendo guitarrista que acompañó a Michael Schenker en el primer disco de
la McAuley Schenker Group, llamado Badd Boyz. Pese a montar un puñado de
canciones más que recomendables no lograron encontrar contrato discográfico y
abandonaron el proyecto. Los temas se acabaron publicando años después en un
disco de Mitch Perry y se volvieron
a recuperar más adelante bajo el nombre original del grupo.
Paul Shortino también ha
grabado distintos discos en solitario, de mucha calidad todos, aunque el mejor es, sin duda alguna, “Back On
Track”. Este disco lo sacó en compañía del guitarrista Jeff Northrup y lo volvió a reeditar años después con el añadido de
temas extra. El cd es de lo mejorcito que ha grabado Paul y canta que se sale. Para muestra tenemos el estupendo tema "Bye bye to love", con un final de órdago en el que Paul demuestra por qué es tan bueno.
P. Shortino feat J.Northrup: "Bye bye to love".
En la actualidad Shortino compagina su labor de vocalista en King Kobra con colaboraciones en musicales y reuniones de artistas en Norteamérica, algo que se encuentra muy de moda últimamente en Las Vegas o New York. Así mismo realiza otras colaboraciones puntuales cuando son requeridos sus servicios, hace unos años actuó en directo en España acompañando a Carmine Appice y a Javier Vargas bajo el logotipo de VBA (Vargas-Bogert-Appice) en un intento de emular el fantástico álbum que publicó en los setenta el grupo BBA (Beck-Bogert-Appice). Todo un luchador, curtido en mil y una batallas musicales.
El disco de Quiet Riot con Paul Shortino es una obra maestra, mejor que los discos clásicos con Dubrow. Una pena que la cosa no prosperase.
ResponderEliminarGinés
El primer disco de Shortino con Northrup es un ajoya. No ha vuelto a grabar nada de esa calidad.
ResponderEliminarComo canta en el single de Q.Riot: sexo puro!! Paul Shortino puede que sea uno de esos cantantes que pasa desapercibido para las masas, pero que tiene un vozarrón y un regusto cantando que te pone a mil. Es lo bueno que tiene este blog, no va con actualidades ni modas, pero de pronto te pones a bucear en él y te encuentras un artículo sobre Paul Shortino que te alegra la noche... y coincido en la otra canción con Northrup, es un cañón. Sonia
ResponderEliminarEs que Paul Shortino es uno de los buenos, un tipo de voz rasgada que mola mucho cuando rompe. También es verdad que es un tipo de voz más difícil de cuidar, porque fuerza mucho cuando mete agudos, yo creo que se mueve mejor en registros de blues (como le pasa a David Coverdale).
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