Clube de Adictos a Deep Purple

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Púrpura Chess

This blog is basically a musical site. Here we talk about the music we like, using different angles. As dear and missed Jon Lord once said: “Music is the highest kind of Art that exists”. I think the same way too.

Púrpura Chess

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miércoles, 17 de abril de 2019

Entrevista a Leonor Marchesi, presentando su nuevo proyecto: AlterBlu.

"Me gusta hacer canciones y hasta elegir lo que considero que tiene un estándar adecuado debo emplear el tiempo necesario, he de decir que soy bastante selectiva en este aspecto".

"Dentro del Rock estoy interesada en ser versátil y no repetir el mismo esquema, me gusta abarcar muchos estilos. Cada disco que tengo es diferente, no me gusta repetirme".

"Considero que todos los músicos deberían tener las mismas oportunidades para llevar esto a cabo. Si no hay promoción no existimos, sin programas de televisión que promocionen el Rock y que hagan hincapié en su valor cultural es complicado".

"Debemos aprender a usar todos estos medios para que nos favorezcan y nos conviertan en sujetos activos del proceso, no de un modo frívolo. Se trata de darle una cuota más emocional y humana  a las redes sociales, cosa que creo que se puede llegar a conseguir. De verdad pienso que la gran revolución humana va a surgir a través de las redes sociales".


Volvemos a tener la suerte de contar con Leonor Marchesi en estas páginas. La que fuese cantante de los argentinos Púrpura y de Santa, uno de las formaciones de Rock españolas que se ha convertido en grupo de culto con una trilogía de discos tan estupendos como variados y personales, ha tenido la deferencia de charlar con nosotros.
Tras su pasado proyecto llamado Onliryca y su interesante carrera como solista, en estos días nos presenta su nueva propuesta musical. Bajo el nombre de AlterBlu pone en circulación el Ep titulado “AlterBlu/Leonor Marchesi” que van a presentar en directo el próximo 25 de Abril en la madrileña sala Barracudas.
Bajo este presupuesto aprovechamos para disfrutar de una intensa charla en la que Leonor comparte con nosotros todo lo referente a esta nueva aventura musical, junto con sus ideas, opiniones y sentimientos acerca del arte en general, el Rock en particular y la situación tanto social como cultural en la que estamos inmersos en la actualidad. Con su cercanía y empatía habituales, esta Dama del Rock nos hace disfrutar de un espacio que ahora compartimos con todos vosotros.


-Nos vuelves a presentar música. El nuevo proyecto se llama AlterBlu ¿Por qué ese nombre? ¿Cuál es la propuesta de AlterBlu? ¿Se trata de Leonor Marchesi en solitario o es un grupo como tal?

“AlterBlu” es el título de uno de los temas de este nuevo disco, es un Ep compuesto por seis temas. El nombre me llamó la atención por la palabra alter, que viene a realzar la parte alternativa de este proyecto, y el término blu, que fonéticamente viene a reflejar el color azul. Es como la suma del matiz alternativo de la música bajo un color azul. De hecho se escribe AlterBlu, como suena. Esa es un poco la historia del Ep, que se llama “AlterBlu/Leonor Marchesi”. La idea es la de involucrar también en este proyecto a los demás músicos que participan.

-Hablamos del término AlterBlu, todo junto y no como dos palabras distintas.

Sí, la verdad es que quise inventar una nueva palabra que no existe. Se escribe todo junto y es una única palabra.

-Es un nombre llamativo y con mucha sonoridad.

Me encanta. Cuando hice la canción “AlterBlu”, digamos que representaba todo lo que he explicado antes del sonido alternativo y con matiz del color azul; se trata de un tema más lento y denso. 

-Han pasado unos cuantos años desde la publicación de tu último disco de estudio. ¿Por qué has esperado este tiempo? ¿Qué ha estado haciendo Leonor Marchesi musicalmente hablando desde Onliryca?

La verdad es que es cierto, soy algo así como una cantante y compositora Rock un poco fantasma, que aparece y desaparece según los momentos y situaciones, jaja. Me gusta hacer canciones y hasta elegir lo que considero que tiene un estándar adecuado debo emplear el tiempo necesario, he de decir que soy bastante selectiva en este aspecto.
Con respecto a Onliryca, tras nuestra participación en el festival Leyendas Del Rock el grupo se disuelve debido a que dos de los miembros del grupo viajaban a Argentina. Lo cierto es que posteriormente hicimos alguna que otra presentación más, pero nos fuimos distanciando. Entonces decidí embarcarme en otra aventura musical nueva, más personalizada tal vez. Coincidió que llegaba de Argentina un batería estupendo llamado Mariano López, que ha tocado con Charlie García y ha girado con gente como El Negro García López, un famoso y querido guitarra argentino. Nos encontramos en Madrid y decidimos empezar a trabajar con esta propuesta de AlterBlu. Mariano se llevó las canciones al estudio que tiene en su casa. Hicimos además los arreglos junto a Germán Núñez Bonifacino, guitarra, arreglista y productor. Entre los tres llevamos a cabo todos los arreglos y grabamos las canciones.

-Además de contar con tu presencia a la voz y Mariano López a la batería, actualmente el grupo se completa con Julio Gutiérrez Martín al bajo y Manuel Maestre Muñoz a la guitarra. ¿Cómo se produjo este cambio?

Germán se encargó de grabar guitarras y bajos en el estudio, Mariano tocó la batería y yo misma las voces. A Germán le pareció interesante nuestra propuesta, participando también en producción y arreglos. Posteriormente quiso seguir encargándose de producir. Mariano y yo entonces decidimos montar un grupo, la AlterBlu Band, contando con Manuel Maestre Muñoz a la guitarra y Julio Gutiérrez Martín al bajo; ambos músicos muy conocidos, con una gran experiencia y con una contundencia sonora envidiable. 
El grupo se formó con ayuda de Juan Huertas Sánchez que contactó con Manuel Maestre y éste a su vez con Julio Gutiérrez. En pocos días nos pusimos a trabajar las canciones con Mariano López.

-Julio también toca con Monterrey, a cuyo guitarra Manuel Arias tuvimos el placer de entrevistarle no hace mucho.

Cierto, Julio forma parte también de Monterrey, que acaban de publicar un nuevo disco. Por su parte Manuel también tiene una amplia experiencia y recorrido musical, ha tocado con grupos como Cráneo, Ratones Koloraos o Chino Banzai entre otros. Ambos tienen una amplia escuela musical y han tocado muchos estilos, como Gospel, Blues o Jazz; son muy versátiles.

                                        AlterBlu: J.Gutiérrez, M.Maestre, L.Marchesi y M.López.

-¿Te parece interesante que estén familiarizados con diferentes estilos?

Eso es algo que me encanta. Se pueden llevar bien conmigo, puesto que a mí también me gusta abarcar muchos estilos. Cada disco que tengo es diferente, no me gusta repetirme.

-Eso es cierto. Tus discos se caracterizan, entre otras cosas, por ser diferentes entre sí aunque tengan unas líneas claves que determinan y distinguen tu propio estilo; en cuanto cantas eres claramente reconocible. Mucha gente valoramos el deseo del artista por experimentar y no encasillarse.

Muchas gracias por tus palabras, la verdad es que siempre me ha gustado explorar en el terreno artístico. Dentro del Rock estoy interesada en ser versátil y no repetir el mismo esquema. Esto que dices puede ser cierto, tal vez por la propia sonoridad de la voz.

-Vamos a detenernos un  poco en vuestro nuevo Ep titulado “AlterBlu/Leonor Marchesi”¿Qué nos puedes contar de él? ¿Estás satisfecha con el resultado final a nivel de sonido?

Mucho. Lo grabamos en  Macc Estudios con la Frenesí Móvil Studios Recording, todo un componente tecnológico avanzado que nos permitió grabar en un enclave maravilloso. Estuvimos en las afueras de Madrid, en Ciudalcampo, que es donde se ubica este estudio. Disfrutamos de un ambiente de absoluta cordialidad en el que gozamos de total libertad para crear música, disfrutando de unas vistas a la sierra muy evocadoras. La verdad es que lo he pasado realmente bien.

-¿Te parece importante que los músicos se encuentren cómodos en el enclave escogido a la hora de retocar y grabar las canciones que llevan trabajadas?

Eso es algo básico y fundamental. Son fundamentales el cariño, el respeto y la paciencia a la hora de grabar. Registrar y grabar un disco el algo muy intenso que agota mental y físicamente porque lo das todo. Cuando das toda tu emoción se produce un vacío que se vuelve a llenar con el siguiente tema y así. El hecho de disfrutar de este ambiente tan cordial nos ayudó mucho en el proceso. Quiero agradecer a Max, el dueño de los estudios, por todas las facilidades prestadas y también a todos los que colaboraron en este proceso.

-Después se masterizó en La Caldera Estudio.

Una vez realizada la grabación de todas las bases musicales se llevó a Buenos Aires, a La Caldera Estudio, de la mano de Juan Bongiovi, que hizo la mezcla y el mastering. Juan es uno de los productores de vanguardia de esta generación. Siempre me ha interesado estar en contacto con artistas de diferentes generaciones y poder absorber de todos los estímulos musicales.

- “AlterBlu” además es el título de una de las canciones del Ep. ¿Tiene algún sentido específico este tema?

Es la canción diferente a todas en cuanto a tempo, que es muy lento, muy alternativo, que te pide prestar especial atención. Es como un desafío. La gente me conoce bajo el prisma del Rock, del Heavy o del Gótico, algo mucho más enérgico. Con esta canción hago un pequeño impás, como que necesitaba aire a nivel creativo; va por ese terreno. La música es lenta; la letra evoca un sentimiento profundo a nivel emocional, en cuanto a las relaciones humanas. Es algo con toque misterioso.

-Habéis estrenado ya en directo un par de temas. Me ha llamado la atención sobre todo “Migrar”. Tiene una melodía que se te mete rápidamente. ¿Qué nos puedes contar de esta canción?

Tiene un enfoque directo, más ágil y alternativo. Nos resultó una canción más dinámica y rápida, con mucha fuerza también por la letra. Migrar es un concepto con fuertes connotaciones, todo lo que evoca en cuanto a abandonar tu territorio y seguridades, los refugiados, el paso de la gente de un territorio a otro. Los músicos, al igual que el resto de artistas, solemos pensar que no debería haber fronteras; igual que lo piensa mucha más gente. El migrante representa una situación que nos conmueve y preocupa a todos. La canción está dedicada a todas estas personas que tiene que moverse de un lugar a otro sin encontrar su lugar en la vida.


-El otro es un tema más denso “Confusa”. También con una letra oscura.

Este tema surgió tocando la guitarra con un par de notas, haciendo sonido de bajo, mientras la voz empezó a improvisar una melodía muy oscura.  Mi intención era esa y el alma me llevó a ese terreno. Cuando haces canciones, las presentas a tus compañeros y se van modificando hasta alcanzar su forma definitiva. El caso es que los tres buscábamos investigar en esa dirección y el aporte quedó plasmado en ese sonido oscuro, con algún que otro matiz en la onda de PJ. Harvey; algo oscuro, que proviene de otras fronteras.

-El tema “Sociedad líquida” tiene un toque acústico y una fuerte letra, de calado y denuncia de cuestiones sociales. Sabes que tus letras me encantan, opino que trabajas este apartado con mucha profundidad, buscando un mensaje determinado. ¿Buscas concienciar a tus oyentes de la realidad que nos rodea?

Este tema surge mientras estaba leyendo a Zigmunt Bauman, que me inspìró esto. Viene a decir que en la actualidad la sociedad no tiene contundencia ni valor, está líquida. En estos últimos tiempos cuesta que la gente se encuentre, que nos miremos a los ojos; parece que nos vamos diluyendo. Si bien es algo negativo, también tiene el aspecto positivo de darse cuenta de esto e intentar revertir la situación. Esto me inspiró mucho. Incluso el título me parece que tiene mucha fuerza; de hecho la letra de la canción empieza de este modo: gente diluida, caminando por la calle. Donde desgraciadamente se mide a la gente por lo que tiene y no por lo que es, ese valor humano que cada vez se va perdiendo y que entre todos debemos recuperar.

-¿Te parece que todos los medios de comunicación y redes sociales de los que disponemos hoy en día pueden facilitarnos la posibilidad de estar más conectados, pero en el fondo nos deshumanizan más?

Exacto, coincido; de hecho de todo esto habla un poco la canción. Se trata de encontrarnos, mirarnos a los ojos, escucharnos la voz. Leer mensajes de texto sin escuchar la voz puede hacer que malinterpretemos el mensaje que se quiere comunicar. Sin la voz falta el énfasis y la emoción.
Por otro lado no se puede negar que ayuda mucho el hecho de poder contactar con gente que esté en la otra parte del mundo, sin ir más lejos en nuestra profesión puede ser algo de gran ayuda. Poder comentar con gente de otros continentes de manera inmediata me parece una forma de acercamiento fabulosa. Pienso que la cuestión importante es que debemos aprender a usar todos estos medios para que nos favorezcan y nos conviertan en sujetos activos del proceso, no de un modo frívolo. Se trata de darle una cuota más emocional y humana  a las redes sociales, cosa que creo que se puede llegar a conseguir. De verdad pienso que la gran revolución humana va a surgir a través de las redes sociales si la humanidad se pone de acuerdo en objetivos como la paz, el respeto y la lucha por unos valores adecuados.

-Estoy completamente de acuerdo con lo que dices. Se trata de aprender a usar las redes sociales de modo responsable y constructivo. Hace unos años este modo de comunicación global e inmediato era impensable, pero hemos pasado a unos extremos en los que la gente ya se extraña si la llamas por teléfono en lugar de escribirle un whatsapp.

Se pierde ese cara a cara, ese poder escuchar la voz de la persona con la que mantienes una conversación. Por otro lado también es verdad que cuando suena el teléfono, si no conoces el número, te inquietas.

-¿Se buscaron deliberadamente las composiciones y estilos o es que surgieron así?

Buenos, en este proyecto hemos colaborado todos a nivel compositivo y de arreglos. En cuanto a la composición, no se busca, se encuentra. Se trata de dejarte abrazar por la emoción del momento.


-¿Se ha recuperado para este Ep alguna idea anterior o todo está compuesto específicamente para “Alterblu”?

Todo es reciente, nuevo e inspirado en las corrientes alternativas del Rock de los años noventa y dos mil. También es algo personal, por la rítmica, por las letras; estamos viviendo un momento social  y musical nuevo y distinto. Por otro lado sigo expresándome a través de la Lírica, hay arreglos que no es que sean específicos de la Lírica, pero en los que la voz apunta en esa dirección. Un ejemplo sería el tema “Munlua”; esta canción hace hincapié en estos presupuestos, empieza muy lento, sigue in crescendo y termina con una parte muy lírica. Siempre me ha gustado.

-Nos queda en el tintero el tema “Círculo”. Háblanos un poco de esta canción.

El tema “Círculo” se llama porque es precisamente eso. Empieza en Tres por cuatro y luego se va a Cuatro por cuatro; esto genera una especie de sensación de movimiento, no es estático. Esa ambigüedad rítmica hace que la canción fluctúe con la sensación de un círculo, que avanza, termina y avanza para volver a comenzar. De ahí ese título.

-¿Piensas que el público de Rock puede entender y apreciar vuestra propuesta musical con todos sus matices?

Estoy muy feliz de la respuesta que veo cuando hemos compartido algunas de estas canciones. Por ejemplo en el festival del que hemos hablado antes presentamos dos nuevos temas y la respuesta del público me pareció muy buena. Para nosotros esto es maravilloso… y todavía quedan otras cuatro canciones para que el público escuche. Por otro lado tampoco es que me haya ido fuera del Rock a hacer otra cosa distinta; sigue siendo Rock, pero lo que ocurre es que es diferente a los demás discos que he hecho.

-¿Consideras que has tenido un  proceso evolutivo en la composición desde los días de Onlyrica?

Son dos cosas distintas. El enfoque es distinto, la emoción o el pulso son diferentes; todo es distinto. Leonor Marchesi ha sido una cantante de Rock toda su vida y eso es algo así como una señal.

-¿Piensas que el proyecto de Onliryca merecía haber tenido mayor repercusión?

Claro, todos los proyectos de los músicos merecen tener el máximo de repercusión. Esto depende de muchos factores, es importante tener en cuenta los recursos económicos de los que dispone cada grupo o las necesidades que tengan. Yo soy independiente, como la mayoría de los músicos y dependemos de muchas circunstancias para llevar adelanto un proyecto musical. Considero que todos deberían tener las mismas oportunidades para llevar esto a cabo. Si no hay promoción no existimos, sin programas de televisión que promocionen el Rock, los artistas y que hagan hincapié en su valor cultural es complicado. Pienso que este fue uno de los principales motivos por los que Onliryca no obtuvo por aquí la repercusión adecuada, piensa que somos artistas independientes y nos disponemos de esa fuerte inversión económica necesaria para la promoción. No obstante en Argentina y países limítrofes se editó obteniendo muy buenas críticas de prensa y repercusión, incluso a día de hoy me sigue preguntando la gente la manera de conseguir el disco. De hecho tenemos la intención de recuperar algún tema para la presentación de “Alterblu” que llevaremos a cabo el próximo 25 de Abril en la sala Barracudas.

-Ahí seguimos cojeando en este país.

Nos queda mucho camino por recorrer. Tú que eres profesor lo verás más claramente, la música debería estar presente en los colegios y en las casas con un peso más específico; por ejemplo en Argentina hay escuelas que abordan la Historia del Rock como materia de estudio, los chicos saben de Hendrix o Led Zeppelin y de ese modo investigan y escuchan. Fíjate que con toda la repercusión de la película “Bohemian Rhapsody” sobre la vida de Fredy Mercury y Queen consiguieron desbancar al Reggaeton de los primeros puestos musicales de las listas mundiales. La música de Queen nos representa a todos los que sentimos algo por el Rock, pero sobre todo esta película ha tenido mucho impacto en los chicos, lo veo en los alumnos de mis clases y me parece estupendo.

-Hace poco se ha recuperado una promo para el tema “Superstar” del disco “Encrucijada”. ¿Qué opinas de los vídeo clips para promocionar los discos? ¿Te has planteado la posibilidad de grabar alguno?

Me parece que lo visual constituye en 80 o 90% de la comunicación social, de este modo ayuda a que entre de manera inmediata. Acompaña a la música, que si es buena y te gusta alcanza el 100% de emoción. Me mandaron este vídeo en un mensaje privado y lo compartí con la gente de manera inmediata. Mucha gente me manda cosas como esta y me gusta compartirlo. Este vídeo hace referencia a una época concreta y es un tema legendario de finales de los sesenta de The Byrds y que luego versionó Patti Smith a finales de los setenta. Patti es uno de mis ídolos de siempre, así que Leonor Marchesi versionó este tema en los noventa, jaja.

                                                Leonor Marchesi: "Superstar". Vídeo clip.

-¿Y planes de vídeo clip para Alterblu?

Sí, lo tenemos en mente y lo vamos a hacer en poco tiempo. En cuanto acabemos de ultimar todo lo referente al Ep y a la actuación de finales de Abril lo retomaremos. Puede que incluso hagamos otra reunión para presentar dicho vídeo. Lo haremos por partes.

-Suena interesante. ¿Está pensada y escogida la canción?

Bueno, le voy a mandar a la persona que se va a encargar de su realización el material para que nos dé su opinión y valore qué tema le parece el más apropiado. Me parece importante la participación del artista en la canción que más impacte en el plano emocional.

-Me ha impactado mucho lo que he visto de la portada del Ep. ¿Qué buscas expresar con la portada de “Alter Blu”?
  
Es un trabajo de Rocío Piotti. Es una ilustradora y diseñadora muy joven, pero con una amplia experiencia. Ahora está en Madrid desarrollando su carrera artística. Este diseño que nos propuso nos pareció genial, sugerente y que pienso que tiene mucho que ver conmigo. La imagen es el dibujo de una mujer con los ojos cerrados, en actitud pensativa, también muy bohemia; es un dibujo con mucha fuerza.

-Habéis tocado en el Femme Rock Festival y presentáis el Ep el 25 de Abril en Barracudas. ¿Qué nos podemos esperar de cara a esos conciertos?

Esperamos ofrecer mucha energía y diversión. Intentamos también que la gente participe e interactúe en nuestros directos. Contaremos con la presencia como invitado de Juan Olmos para interpretar un tema y también tenemos en mente alguna colaboración más, pero hay que esperar para ver si se pueden cuadrar agendas. Va a ser un concierto muy dinámico y entretenido en el que voy a hacer un repaso de mi carrera artística desde Santa, Encrucijada, Onliryca y también interpretaremos las canciones de nuestro nuevo Ep. Esperamos que disfrutéis del show.

-En el Femme Rock erais voz, guitarra, bajo y batería. ¿Esta vez no lleva teclado Leonor Marchesi?

No lo hemos estimado necesario, tal vez como invitado en un futuro. Nos vemos los cuatro suficientes para defender en directo nuestra propuesta musical. Tanto Julio como Manuel cantan muy bien y hacen unos coros fantásticos que adornan y enriquecen las canciones.

-Además de esta presentación prevista para el 25 de Abril, ¿tenéis en mente o en negociación alguna fecha más?

Sí, probablemente en Mayo intentemos cerrar otra actuación. Estamos organizándolo porque me han contactado, pero se trata de ver los distintos tiempos y disponibilidades. Lo iremos anunciando cuando se vayan cerrando las fechas.


- A raíz de tu concierto acústico en la pasada presentación del Culebra Rock colgamos de las redes una espeluznante interpretación del clásico “Nessum Dorna” que de hecho recibió muchas visitas y comentarios por tu interpretación tan espectacular. ¿Tienes intención de volver a retomar una interpretación de estas características para el directo?

Sí, va a haber algo de eso. Bueno, es un poco una sorpresa, pero te puedo decir que seguramente algo en esa línea vais a poder presenciar, igual algún pequeño fragmento de esa canción que tanto te gustó, jaja.
Me parece increíble la repercusión que tuvo. Nunca lo pensé cuando le propuse a Luís Romero hacerlo con un par de guitarras electro acústicas, una sinfonía de Puccini para Orquesta con tanta instrumentación poder adaptarla a este formato. Quedó como muy directo usando solo las guitarras, también la parte Lírica me atrae mucho y así está presente.

-¿Qué le dirías al público que no os haya visto en directo y tenga la inquietud de asistir a un show?

Le diría que se relajen, vayan a presenciar el concierto y que disfruten. Nada de ideas preconcebidas ni prejuicios. Una cosa que está pasando últimamente con todo esto que hemos hablado sobre las redes sociales es que se genera mucha negatividad y crítica que no es para nada constructiva. Afortunadamente esto es una minoría.

-Está muy de moda esto de cebarse en la crítica destructiva, esto es algo que también ven más artistas. Lo positivo siempre es sumar. Cuando no tienes nada bueno que decir es mejor quedarse callado.

Cierto, no me refiero a los críticos que hacen una crítica porque ese es su trabajo. El problema viene cuando hay gente que a través de las redes sociales critican en tono negativo y juzgan, entrar en el terreno de los juicios es peligroso y bajo mi vista un error. Te puede gustar más o menos una cosa, pero siempre debería producirse desde unos presupuestos constructivos. Supongo que, como la mayoría de artistas, he sufrido buenas y malas críticas.

-Muchas veces en las redes sociales se pueden leer comentarios destructivos, casi con un poso de rencor, envidia o negatividad.  ¿No te parece que esto puede ser una de las duras consecuencias de la sobreexposición a las redes sociales?

Desde luego. Afortunadamente en mi caso los comentarios que leo en mis redes sociales suelen ser muy positivos, de mucho cariño y apoyo. Me siento honrada y valorada dentro de la música. Aunque es cierto que, si hablamos de los medios de comunicación y la prensa especializada,  hacer una buena crítica es una profesión y no es algo que se pueda tomar a la ligera o que pueda hacer cualquiera. Si vas a ver un concierto en directo, comentar sobre la ropa de los músicos me parece ridículo; si vas a escuchar música lo justo es que valores precisamente esa música, lo otro me parece una frivolidad.

-En estos últimos años has colaborado con grupos como Arkania, Hard Wires, Tren Loco, Natan Pride o  BajopresióN entre otros. ¿Qué le pides al grupo o a la canción para colaborar con ellos en la grabación de su disco?

Yo no le pido nada, la música vive por sí misma. Me contactan, me presentan una canción, la escucho, me integro en su estilo, intento aportar desde mi parte creativa para llevarla a mi terreno y de este modo resulta divertido para todos los implicados.

-El disco de Tren Loco, “Caballero de la oscuridad” está dedicada a Ronnie Dio. ¿Cómo fue la experiencia de grabar con ellos? Esto es un club de fans de Deep Purple y Ronnie James Dio tiene un fuerte peso específico. ¿Qué opinas de la figura, importancia y legado de Dio dentro del Rock?

Ronnie Dio ha marcado a todo el mundo. Hizo del Rock duro la parte más épica que hemos podido escuchar en la historia de este movimiento tan masivo. Con su prestancia, su delicadeza y su voz de tenor abrió un estilo que ha servido de influencia a todas las generaciones posteriores de músicos.


-También colaboraste con Natal Pride. Su vocalista, Juan Antonio Moreno, tristemente falleció no hace mucho. ¿Qué nos puedes comentar de tu colaboración y del grupo?

Recuerdo que fue una experiencia muy emocionante. Llegué a su estudio ya conociendo la canción y ellos me pusieron frente al micro diciéndome que podía hacer con ella lo que quisiera. Prácticamente improvisé todo lo que cante. Quedó así, con mi melodía que se salía un poquito de la línea original, pero conservado la armonía esencial. A ellos les encantó y así se quedó. Tuvimos varios encuentros, también grabamos un vídeo. Se desarrolló una relación e amistad que se intensificó a raíz de la triste pérdida de Juan Antonio, uno de los grandes valores del Rock de este país. Una persona muy creativa, había colaborado en grandes proyectos musicales, incluso tenía un grupo que hacía una música con aires a lo que hicieron Héroes Del Silencio, adelantándose a este estilo. Tuvo una labor importante dentro de la música.

-Lamentamos se pérdida, siempre es triste que un artista se vaya tan pronto.

Una verdadera lástima, igual que ha pasado en estos días con la triste pérdida de Jose Antonio Manzano.

-Es cierto. Además, Jose Antonio decidió hacer pública su enfermedad y fue muy impactante seguir el duro proceso. Personalmente he sentido el proceso con mucho dolor. Siempre me ha gustado su música, tanto en solitario como en los distintos proyectos en los que ha colaborado.

Ha sido desde luego algo muy doloroso. Tuve la suerte de conocerlo nada más llegué a Madrid en los ochenta. Coincidimos en los estudios de grabación de Ibiza mientras Santa estaba grabando “Templario” y ellos se encontraban trabajando en el final de un disco con el grupo Zero. Le conocí y le saludé. Lo cierto es que luego no hemos vuelto a coincidir, pero su música y su voz siempre estarán presente con Banzai, en solitario y sus otros proyectos.

- En el disco de Arkania pusiste tu voz en la canción “Mi nombre es RnR”, un homenaje al Rock Iberoamericano. ¿Cómo ves la situación actual en estos países de centro y Sudamérica, tanto a nivel musical como social?

A nivel político siempre hay muchas cosas por resolver, todas las cuestiones sociales y económicas están muy ajustadas a lo que decide Estados Unidos. En cuanto al terreno musical y creativo vemos que también hay muchos avances. Si hablamos de Rock, ahora hay un mercado fuerte que están aprovechando incluso los grupos españoles que programan giras exitosas por allí.

-También participaste en Las Chicas del Rock: “Nuestra Generación”, que me parece un tema buenísimo, un himno y que tristemente pasó algo de puntillas. ¿Qué recuerdas de esa colaboración?

Yo casi llegaba de Buenos Aires, después de haber estado un largo periodo de tiempo por allí, y fue casi como un reencuentro. Me llamó Santi Fernández, que fue el organizador del asunto, para participar en esta composición de Juan Olmos y Javier Mira. Me sentí muy cómoda volviendo a ver a todos estos músicos y el ambiente fue del todo agradable. Es una gran canción. Mucha gente comenta que se debería haber hecho una gran gira por España interpretando esa canción y otras más con las Chicas del Rock del país en ese momento. La intención fue muy importante, dando un lugar de entidad a la mujer dentro de este movimiento musical.

-¿Cómo ves el actual debate, abierto y necesario, sobre el feminismo en nuestra sociedad? Entendiendo la acepción feminismo de manera adecuada y no como paralela al machismo. Feminismo como igualdad desde la diferencia.

Exacto. Feminismo es defender el derecho de la mujer, busca encontrar esa igualdad desde la diferencia. Es un movimiento intelectual que ha ayudado al avance social, al rol y al desempeño de la mujer en la Historia. En estos últimos años se observan avances, aunque el proceso es lento y todavía queda mucho camino por recorrer. No podemos ponernos en contraposición al hombre, nosotros luchamos y nos enriquecemos mutuamente como seres humanos. No obstante la mujer necesita reivindicar su rol, su derecho a igualdad de derechos, de salarios o de oportunidades. Creo que este movimiento ayuda sobre todo a aquellos que todavía no quieren abrir los ojos.

-Incluso hasta en cuestiones de lenguaje tenemos asumido el género masculino al hablar, tenemos muchos aspectos interiorizados en los que a veces nos cuesta caer en el cuenta.

Claro. El poder y la mente del hombre y de la mujer son diferentes. Hay un lenguaje, una manera de exponer ideas, una dinámica cotidiana y una energía evidentemente diferente. Esa diferencia hay que hacerla valer, respetarla y no menospreciarla. La mujer tiene mucha fuerza y lo que aporta en el arte siempre enriquece. Tanto hombre como mujer deben buscar encontrarse para el amor y para el crecimiento conjunto.


-Sigues impartiendo clases de canto. ¿Qué tal lo compatibilizas con el grupo, la composición y los ensayos?

Conciliar la vida familiar, las clases, la música, los ensayos, las futuras actuaciones y las nuevas ilusiones es el deseo, todo esto me enriquece. Cuánto más actividad tenga mejor me siento, me encuentro y más puedo ofrecer a los demás. Me gusta estar activa, leer, investigar; incluso ya estoy pensando en el nuevo Ep, jaja.
Me siento feliz y dichosa. En cuanto a mi familia, mi hijo es músico, toca el bajo y la guitarra. En estos momentos está en un grupo llamado Bomber  97 y van a actuar un par de días después que nosotros.

-Eso son muy buenas noticias, que las nuevas generaciones sigan enganchándose a nuestra música.

Además me hace muy feliz el hecho de que a mi hijo le gusta lo que estoy haciendo en este momento, los músicos y el estilo que usamos para expresarnos. Y hay que tener en cuenta que él ahora tiene veinte años, por lo que el salto generacional me parece estupendo.

-Una última pregunta sobre AlterBlu, ¿por qué Ep y no disco completo?

La verdad es que lo valoramos en su momento, pero la realidad es que hoy en día apenas se escuchan los discos completos. De este modo decidimos presentar estos seis temas para que sean absorbidos emocionalmente para todo aquel que quiera escucharlos y luego vendrán otros seis. Así no se pierde nada en el camino. En la actualidad los discos físicos apenas se venden, salvo en las propias actuaciones. Pensamos que puede ser más inmediato presentarlo de esta manera.

-Entonces ya está funcionando la maquinaria para los próximos seis temas.

Exacto, aquí no cerramos los ojos.

-¿Cómo ves actualmente el panorama para vuestra propuesta musical y para el Rock en general en España?

Veo que hay muchísimas bandas y muchísimos conciertos, cuesta algo más que la gente su mueva de sus casas. Hoy en día veo muchos grupos, talento y músicos en las salas de ensayo; este movimiento permanente lo veo en los propios locales en los que trabajo y ensayo. Lamentablemente no tenemos la promoción y difusión necesaria, es muy digna pero solo puntual. No sé en qué quedó ese proyecto de programas musicales para la tv. Me parece que hay uno en la 2 de TVE, pero en un horario de madrugada poco accesible para la mayoría. También hay algún programa de cable y nada más.

-Es una asignatura pendiente en nuestro país casi desde siempre.

Eso ayudaría a todos a promocionar la música, a descubrir nuevos talentos, que los hay y a potenciar a los músicos.

-¿Algún grupo, nacional o extranjero, que te haya llamado últimamente la atención?

Escucho todo tipo de música. Me llama la atención las nuevas tendencias del Rock en las que mezclan las guitarras sin parecer que lo sean, como un sonido más de sampler. Me gusta el Rock tradicional, el más contundente o el de vanguardia; la verdad es que me gustan varios estilos dentro del Rock, pero no puedo decantarme por uno en concreto. Por ejemplo ahora estoy escuchando mucho a un grupo australiano llamado Karnivol y también me fascinan bandas como A Perfect Circle o Audioslave. Esos son los dos grupos que en estos momentos estoy escuchando con más intensidad. Y en cuanto al Rock nacional, intento estar informada de los nuevos lanzamientos.

-Hace poco desde Japón un seguidor ha abierto un blog dedicado a tu persona artística Leonormarchesi.seesaa.  por Yusaku Takamura. ¿Qué sensación te produce haber dejado esa impronta en un lugar tan alejado?

Una de las cosas buenas que tienen las redes sociales. Yusaku Takamura se acercó a mí mandándome un día un privado en el que me comentaba que mi música y mi voz le habían ayudado a superar una crisis emocional que tuvo.  El caso es que trabaja en cuestiones de marketing y publicidad y decidió promocionarme en Japón a través de internet, algo que realmente agradezco. Así empezó una relación de amistad, gracias al poder que tiene la música y que ambos compartimos. Usa sus redes sociales y va colgando cosas de mi música en sus redes sociales.

-¿Cuáles son los planes de futuro inmediato para Leonor Marchesi?

Voy a presentar este nuevo Ep y también voy a seguir haciendo nuevas canciones para el proyecto. Por otro lado acaba de llegar de Argentina el que va a ser nuestro personal mánager, se llama Willy Bosso y es uno de los grandes mánagers a nivel Latinoamericano que ha trabajado con grandes grupos como Bon Jovi, Soda, Stereo, Alejandra Guzmán, Aerosmith o Ángeles del Infierno entre otros muchos artistas en giras por Latinoamérica. Nos gustaría llevar a cabo algunas actuaciones por España y como proyecto empezar a viajar fuera, hacia donde nos lleva la música y las posibilidades de actuar y contactar con gente de otros países.

-Pues estaremos muy pendientes de estas evoluciones. Muchas gracias por tu tiempo, Leonor. Siempre es un placer escuchar tus opiniones, impresiones e inquietudes, que siempre son interesantes y enriquecedoras. Si hay alguna otra cuestión que nos quieras comentar para finalizar.

Encantada de charlar contigo. Quiero animaros a asistir al concierto del próximo jueves, que además es mi día preferido de la semana, la canción “Círculo” habla de esto, que hoy es jueves y mañana también, jaja. Nos lo vamos pasar muy bien en la actuación, va a ser muy participativa. También deseo que continuemos trabajando y luchando por lo que queremos, ser conscientes de que la música ayuda y que los grupos sigan con ilusión, porque lo importante en todo esto es la continuidad y la ilusión. Convivir con gente positiva y no tóxica, puesto que la toxicidad ahoga lo creativo. Muchas gracias a todos y a ti, Paulino, por la entrevista. Me siento siempre muy valorada y escuchada por vuestro medio.









miércoles, 10 de abril de 2019

Glenn Hughes y Classic Deep Purple. Historia de una reunión fallida. Concierto en Madrid: Teatro Nuevo Apolo. 2.4.19.



Hace apenas unos días Glenn Hughes volvió a visitar Madrid para subirse a un escenario a interpretar música como solo él sabe y puede hacerlo. El motivo esta vez era la presentación en directo de la gira que rememora y homenajea su estancia en la formación clásica de Deep Purple de los años setenta. Recordemos que la estancia de Hughes en el grupo púrpura abarcó desde 1973 hasta la disolución de la banda en 1976. Glenn formó parte de los llamados MARK III y MARK IV de Deep Purple. El mundialmente conocido como MARK III de la formación púrpura funcionó desde finales de 1973 hasta bien entrado 1975. En apenas un par de años el combo formado por Ritchie Blackmore, Jon Lord e Ian Paice, junto a las nuevas incorporaciones de un desconocido David Coverdale y el propio Hughes se bastaron para entrar en la Historia de la Música de la mano de himnos imperecederos como “Burn”, “Stormbringer”, “You fool no one” o “Mistreated”, por nombrar algunos. Solo publicaron dos discos de estudio, “Burn” y “Stormbringer”, pero fueron suficientes para volver a recolocar al grupo en lo más alto de las listas y de paso reinventarlo en lo que se refiere a términos musicales. El MARK IV se conformó al abandonar la nave Blackmore y ser sustituido por el genial y tristemente malogrado Tommy Bolin, uno de los músicos más finos e intuitivos que he tenido el gusto de escuchar y que desgraciadamente apenas brilló en su etapa Purple debido a sus propios demonios personales. Esta formación nos legó el interesantísimo “Come Taste The Band”, un claro ejemplo de la capacidad creativa que atesoraban estos tipos por sí mismos, libres de las directrices creativas de un Ritchie Blackmore que no deja de ser uno de esos pocos genios de los de uno entre un millón. Para todos los que apenas habíamos acabado de nacer cuando estos cinco tipos volaban las cabezas del publico con su música, para todos los que jamás tuvimos la oportunidad obvia de verlos en directo y que nos hemos pasado parte de nuestra vida devorando cuantas grabaciones piratas se han puesto en nuestro camino, esta gira que ha salido de la cabeza de Glenn no es sino una suerte de sueño hecho realidad; ver a Hughes en todo su poder interpretando un homenaje al repertorio clásico del grupo es una bendición.

                                                              Deep Purple MARK IV.

Pero el camino hasta llegar aquí no ha sido fácil, conviene ponernos en antecedentes. Todo esto parte de la idea que tuvo hace unos años el tristemente fallecido Jon Lord. El teclista original de Deep Purple, años después de abandonar la nave Purple, tenía la visión de volver a juntar a los miembros del grupo para llevar a cabo una especie de concierto homenaje por el que muchos de nosotros hubiésemos dado lo que fuera para ser testigos de semejante evento. El asunto siempre contó con el velado rechazo de Ian Gillan, autentico líder del grupo desde que Blackmore se fue y principal escollo para que esto se llevase a cabo. Es conocido y notorio que Gillan y Blackmore llevan más de cuarenta y cinco años detestándose, por lo que resultaría ridículo pensar que Ian fuese a enterrar el hacha de guerra y mucho menos estando en la posición de poder que le otorga liderar a Deep Purple. Tras esta negativa, que también en un primer momento fue compartida por un Blakmore asqueado del Rock y que se mostraba feliz en su retiro musical pseudo renacentista, el siguiente paso fue sondear una reunión del citado MARK III de Deep Purple. El asunto se puso en marcha y parece ser que los principales actores implicados mostraron un cierto interés, o al menos no lo rechazaron públicamente; desde un entusiasmado Glenn Hughes, que se mostraba dispuesto a subirse de inmediato a un escenario con sus antiguos camaradas, hasta un Blackmore que al menos parece que no dijo que no. Parecía que la visión de Jon Lord cobraba forma. El principal escollo para esto era la posición del batería Ian Paice. El único miembro presente en todas las formaciones de la banda se encontraba tocando con el grupo en activo y resultaba de todo punto complejo y difícilmente honesto alternar su puesto con la participación en esta otra encarnación del grupo; algo así como dos formaciones de Purple funcionando a la vez, pero con distintos componentes menos el batería. Realmente no sabemos la opinión del propio Paice al respecto, aunque teniendo en cuenta el carácter práctico del que siempre ha hecho gala este excepcional músico, no sería de extrañar que no le hubiese importado compaginar baquetas el ambos grupos. Imagino que fue rápidamente llamado al orden por un Ian Gillan que debió ver este movimiento como un ataque rastrero y personal hacia el grupo y hacia su propia persona. Conviene tener en cuenta que nuestro admirado Garganta de Plata siempre se ha referido a su relación con Deep Purple en términos matrimoniales, equiparando cualquier traición como si de unos cuernos de tu pareja se tratase; para que nos entendamos.

                                                           Glenn Hughes.

Lo cierto es que las negociaciones debieron existir y debieron tener un peso considerable, puesto que llegaron a lanzar a los medios de comunicación una serie de rumores que se extendieron como la pólvora a nivel mundial; como era de esperar. Parece ser que allá por el 2006 sí que llegaron a existir indicios de la viabilidad del asunto. Como era de esperar desde el campamento institucional del grupo –o campamento Gillan, como ustedes prefieran denominarlo– se apresuraron a dejar claro que era del todo inviable que esta reunión se llevase a cabo porque… el grupo ya estaba en activo con los miembros actuales, comandado por el propio Ian. Hablamos del año 2009 y todo quedó ahí. No hubo reunión del Deep Purple MARK III y la vida siguió adelante. Hughes puso en marcha junto a Bonamassa, Sherinian y Bonham el grupazo Black Country Communion, tal vez el modelo de super grupo para actuar en grandes estadios que Glenn llevaba tiempo buscando y que se hubiese materializado con la reunión MARK III. Por su parte años más tarde Coverdale sacó a la venta su “Purple Album” de Whitesnake, un homenaje a sus años en Deep Purple que probablemente mucho tuvo que ver con esta intentona fallida de reunión. Desgraciadamente poco después Jon Lord enfermó y acabó falleciendo un triste dieciséis de Julio del año dos mil doce. DEP.

                                                           Jon Lord.

Esta relación tan imposible entre Gillan y los antiguos ex miembros del grupo se ha venido detallando durante todos estos años y ha tenido momentos tan Spinal Tap como todo el affair acontecido con la nominación al Salón de la Fama por parte del grupo. Este evento tan deliciosamente amorfo y tan asquerosamente americano mostró una vez más las vergüenzas de la familia Purple de primer grado y nos proporcionó unas cuantas horas de entretenimiento tanto a sus seguidores como detractores. No me voy a extender en los detalles del asunto, puesto que ya se abordaron desde estas mismas páginas –no hay más que poner en el buscador las palabras “Hall of Fame” para poder echarle un vistazo al asunto-. Apenas hace unos años salieron a la luz nuevas declaraciones que arrojaron nuevas luces a las apasionantes relaciones entre esta entrañable familia. Fue David Coverdale el que se descolgaba con unas incendiarias declaraciones en las que reconocía que hubo conversaciones con el campamento de Ritchie Blackmore para llevar a cabo algo juntos. Por extraño que parezca, nuestro querido Man In Black se ha descolgado con unas cuantas declaraciones públicas desde que decidió volver a reactivar Rainbow –conviene recordar que si por algo se ha caracterizado Ritchie a lo largo de los años ha sido por su completo desprecio hacia la prensa musical y a sus periodistas–: que si forma Rainbow, que si no le importaría volver a subirse a un escenario con sus antiguos compañeros de Deep Purple, que si Gillan y él deberían enterrar sus diferencias por el bien de los fans, que si es necesario –esta me encanta y tiene que ver directamente con un  famoso incidente entre Gillan y él– tirarse un plato de espaguetis a la cabeza se los tira… incluso le tiró los tejos a Glenn Hughes para que formase parte de los nuevos Rainbow. Esta es especialmente cachonda y nos la ha contado hace no mucho el propio Ritchie. Parece ser que desde el campamento de Blackmore se pusieron en contacto con Glenn Hughes para invitarle a ser de la partida en la nueva reencarnación del Arcoíris. Parece ser que Glenn se dispuso a volar hasta el local de Blackmore para ensayar en el nuevo proyecto cuando fue informado de que Ritchie solo estaba interesado en él como bajista y segunda voz, contando con Ronnie Romero como vocalista principal; Blackmore en estado puro. Un correcto y educado Hughes declinó amablemente la invitación, alabó la capacidad vocal de Romero –algo imposible de negar–, se limitó a comentar que en estos momentos de su carrera solo le parecía adecuado ser el cantante principal de cualquier grupo en el que se encontrase y se apartó así del camino de Ritchie y sus nuevos Rainbow. Un día habrá que escribir sobre la gente que le ha dicho “no” a Ritchie Blackmore, seguro que la cosa tiene su miga.

                                    Ian Gillan.                                                            Ritchie Blackmore.  

Con todo este panorama lo que está claro es que millones de fans de todo el mundo perdimos la oportunidad de ver al MARK III de Purple sobre un escenario interpretando música. En fin, nos consolaremos con el pedazo de gira mundial que se está marcando un Glenn Hughes que ha decidido recrear este escenario. Nos vamos a centrar en el concierto que ofreció hace apenas unos días en la capital española. El concierto de Madrid fue algo sencillamente espectacular y único. Un abarrotado Teatro Nuevo Apolo del que apenas habían quedado una veintena de entradas por vender, servía como marco idóneo para la presentación en la capital de la nueva gira de Glenn Hughes homenajeando a los MARK III y IV de Deep Purple –o a los clásicos Deep Purple en directo, como él mismo lo definió durante la actuación.
Pasados apenas unos cinco minutos de las nueve de la noche las luces del teatro se bajaron mientras el guitarrista Soren Andersen, el teclista Jesper Bo Hansen y el batería Ash Sheehan tomaban posiciones. Poco después por la megafonía sonó la presentación del tipo al que todos habíamos ido a ver y en escasos segundos apareció por el lateral de la batería un Glenn Hughes que sin ni siquiera abrir la boca ya se salía del escenario. Apareció con su melena al viento, sus patillas setenteras, unos pantalones de campana que en cuanto pueda me voy a una tienda para comprarme otros iguales, con el bajo colgado, en una forma física envidiable a sus sesenta y siete años, bailando y haciendo gestos de agradecimiento al público del que arrancó una sonora ovación sin ni siquiera haberse acercado al micro; vamos, un puto rockstar de la cabeza a los pies… y sin apenas forzar la pose, lo que lo hace todavía más natural y auténtico. Hay gente que se lo estudia, machaca, trabaja y a otros les sale de manera innata. En fin.

                                                                Glenn Hughes.

El asunto arrancó de la mano de “Stormbringer”, desde los primeros compases era fácil observar que la banda sonaba compactada y que habían venido a divertirse con sus amigos madrileños, como el propio Hughes indicó al finalizar el tema. Llevan recorriendo el mundo presentando esta gira desde finales de 2017 y se nota el rodaje y la compenetración adquirida, esas pequeñas cositas que tanto recalcan los músicos como esenciales para que las bandas crezcan exponencialmente y que tan complicadas resultan de llevar a cabo en estos nuevos tiempos en los que apenas consiguen fraguar los nuevos grupos.
El concierto siguió con “Might just take your life”, muy bien acompañado por el teclista que le dio un rollo muy setentero a la canción. Glenn adornó las líneas vocales con ese sabor funky que tiene tan interiorizado, de hecho la propia composición explora esos matices que constituyeron en su día el germen del disgusto de Blackmore con los nuevos caminos compositivos hacia los que avanzaba Deep Purple. El final de la canción fue de órdago, nos puso a todos firmes y nos fue dando la medida del excelente acompañamiento que se había buscado Glenn para su grupo. Un Glenn Hughes bastante locuaz volvió a agradecernos nuestra espera para volver a verle en directo mientras se refería a todos nosotros como sus hermanos o hermanas y nos aseguraba lo especial que era Madrid para él; supongo que cuando vaya a Bilbao, Avilés o a Oslo también usará un discurso similar. Esta dialéctica le lleva acompañando desde que logró rehabilitarse de sus adicciones a principios de los años noventa y abrazó la Fe Cristiana. Bueno, imagino que se hizo cristiano al estilo norteamericano; en plan formar parte de un grupo de autoayuda en el que te sientes muy feliz, pero poco o nada interpelado a interpretar la realidad bajo los ojos de Jesus y posicionarte de una manera activa. Pero esto es marginal.

                                                       Glenn Hughes.

Seguimos con la actuación. Nos siguió comentando que iba a hacer todo lo posible para que aquella fuese una noche épica –y vaya si lo consiguió. Tras los agradecimientos el guitarra Soren Andersen comenzó una oscura intro que por un momento me recordó al clásico “Mistreated”, pero que me resultaba extraño que se presentase al inicio de la actuación; conviene recordar que este número suele ser uno de los momentos más intensos de sus actuaciones en directo y lo suele reservar para la parte final de las mismas. Sospechas confirmadas, el solo derivó hacia el inicio de “Sail away”, otra de las gemas oscuras del catálogo Purple MARK III y que sonó especialmente poderosa; aquí, como en todo el concierto, Hughes se entretuvo poniéndose a jugar con su voz en determinados momentos de la canción, haciendo gala de una gama de registros marca de la casa que hicieron las delicias de un público entregado al don tan espectacular del cantante.

                                                                 Glenn Hughes.

Arrancó un nuevo tema de la mano de una batería claramente reconocible para cualquier seguidor purple. El clásico cencerro de “You fool no one” se presentó ante nosotros de la mano del batería Ash Sheehan. Este músico ya me supuso en su día una grata sorpresa, puesto que su habilidad y su pegada con el instrumento acompañaban y daban cuerpo a la perfección a unos temas de instrumentación bastante compleja. Bien es sabido que una batería –no necesariamente una batería rápida o machacona es un componente esencial si hablamos de Hard Rock. También es de sobra conocido el cariño y admiración que Glenn Hughes le tiene a John Bonham, de hecho le dedicó el tema “Higher places” de su disco “Song In The Key Of Rock”; es preciso recordar que el propio Bonzo se declaró en su día admirador de Trapeze, el grupo de Glenn antes de entrar en Purple, y que incluso llegó a tocar con ellos en alguna que otra ocasión. Sheehan se marcó un inicio de “You fool no one” que no hizo más que contrastar las buenas sensaciones que provocó desde que se sentó tras las baquetas al iniciarse el show. Lo de “You fool no one” en Madrid fue asunto de enjundia, por lo que os voy a pedir licencia para detenerme en este particular. No fue hasta que pasaron los primeros tres minutos que Glenn Hughes empezó a entonar la primera estrofa del tema, por lo que ya solo el inicio del jugueteo del batería seguido por el resto del grupo casi constituye la misma duración que algunas canciones convencionales. Tras las primeras estrofas y estribillo el teclista nos llevó a su terreno con un bonito solo de teclado que, sin pretender calzarse las imposibles botas de Jon Lord, adornó la canción de una manera muy digna y demostró que era del todo capaz de emular el sonido clásico de Deep Purple sin necesidad de intentar copiar a ningún músico de la formación clásica. Un diez y todo mi reconocimiento para Jesper Bo Hansen. Le contestó Soren Andersen a la guitarra, siguiendo con un pequeño solo que derivó nada más y nada menos que el en clásico “The mule”, el corte que usaban los Purple de los setenta en directo para introducir el solo de batería de Ian Paice y que comenzaba a sonar a los seis minutos de canción. Está claro que Glenn les ha debido poner unas cuantas grabaciones piratas a los músicos de su grupo, puesto que se notaba a la perfección que dominaban el particular lenguaje del universo purple setentas. Una manera de entender cada canción en directo como algo vivo y sujeto a continuo cambio; por desgracia esto ya no se lleva hace demasiados años, por eso la mayoría de grupos suenan en directo muy predecibles y, si los has visto una vez en directo, como los vuelvas a ver otra vez en la misma gira seguro que no te van a sorprender. Dicho esto, también debo reconocer que, pese a que el teclista y el batería que acompañan a Hughes en esta gira me sorprendieron muy gratamente, el guitarra ya me dijo mucho menos. Andersen lleva colaborando con Glenn desde hace unos diez años, pero no me acaba de llegar. También hay que decir en su defensa que la guitarra fue lo que sonó más bajo en la mezcla del concierto madrileño, resultando un claro hándicap; tal vez fue el que más forzado se encontraba en su papel Blackmore. De cualquier manera, solvente aunque sin destacar. Tras arrancarse con el riff de “The mule”, el grupo paró y Andersen comenzó a interpretar las primeras notas del clásico “Blues” que Ritchie ha venido intercalando en sus actuaciones en directo; toda una delicia para nuestros oídos. Ya llevábamos ocho minutos de “You fool no one” y cuál fue mi sorpresa cuando Glenn Hughes empezó a improvisar una melodía cantada para dicho blues que duró apenas dos minutos más y en la que puso a todo el público en pie con sus ejercicios vocales. Con una naturalidad pasmosa se dedicó a mantener un sostenido en agudo, imposible para el resto de mortales, mientras jugaba con los distintos matices de su voz y la llevaba a los impensables límites que su propia improvisación le conducía. Un cantante único, tocado con el dedo divino. Tras esta demostración, que vale por sí sola el precio de la entrada y que nos tenía a todos metidos en la particular burbuja en la que se había convertido la canción, Glenn vuelve a parar y nos presenta “High ball shooter”. Este temazo de Purple, que apareció en el disco “Stormbringer” y del que el propio Glenn llegó a realizar una versión en uno de sus mejores discos en solitario y que responde al título de “Building The Machine”, fue lo siguiente en sonar. Para todos aquellos que amamos esta canción que Deep Purple jamás interpretó en vivo, escuchar el estribillo de este tema en directo mientras atruena por el equipo de sonido resulta una experiencia extrasensorial. Esta deliciosa sorpresa nos condujo de lleno al solo de batería en el que el amigo Sheehan se lució a lo largo de los nueve minutos que duró su momento. Imponente pegada que me volvió a traer a la memoria al tristemente malogrado batería de Led Zeppelin a lo largo de un solo, una vez más, de esos que se hacían en los años setenta y que ahora están en desuso. Tras el solo volvieron a recuperar el propio “You fool no one” hasta el final apoteósico que llevó dicha canción a los veinticinco minutos de duración. Un agradable espejismo que trajo a mi retina aquellos medleys en directo de Purple, Rainbow o Dio que podían alargarse sin problemas hasta los veinte o treinta minutos de duración. Otra época.

                                                              Glenn Hughes.

Bromeó Glenn Hughes después del pedazo de interpretación que se acababan de marcar reconociendo que recordaba bien los años setenta, pero no se acordaba de nada de los ochenta; otro comentario simpático que aludía con total naturalidad a sus años oscuros, superados desde principios de los noventa y jalonados con una espléndida carrera, tanto en solitario como colaborando en otros proyectos. Lo siguiente que nos presentó Glenn fue otra de las joyas del catálogo de Deep Purple. Hablamos del tema “You keep on moving” o, lo que es lo mismo, el claro ejemplo de la capacidad compositiva del grupo sin la presencia de Blackmore. Esta canción apareció en el disco “Come Taste The Band” y, según nos comentó el propio Hughes al presentarla, la compusieron Coverdale y él pensando en sus fans y en lo necesarios que éramos para ellos. La canción sonó con personalidad propia y en ella Glenn se permitió el lujo de acomodar su voz para subir la intensidad y forzarla en determinados momentos; sabedor de su portentosa capacidad, jugó más que nunca con las subidas y bajadas a lo largo de un tema que se presta a ello. Siguió con otra canción del “Come Taste The Band”, el conocido “Getting tighter” y su groove salvaje. Comenzó el tema distorsionando su bajo y liderando una de las canciones en las que más remarcado queda el toque Funk que introdujo en Purple y que tanto detestaba Blackmore. La interpretación también contó con el clásico interludio que solían tocar los Purple cuando la llevaban al directo. Al acabar el tema recordó que con esos discos los Deep Purple contribuyeron a formar parte de la historia de esa década, junto a grupos como Zeppelin, Génesis o Sabbath, y compartió con todos nosotros una reflexión bendiciendo su longevidad pudiendo actuar en vivo manteniendo un nivel elevado. Ni que decir tiene que no solo comparto sus palabras, sino que las llevo más allá del lugar en el que el propio Glenn las dejó por prudencia y humildad. No es ni siquiera discutible que el nivel y capacidad vocal que mantiene en la actualidad Glenn Hughes está a años luz del resto, independientemente de la edad. En su pequeño discurso agradeció a Dios la posibilidad de mantenerse en activo y en buena forma, sin hacer ningún tipo de alarde en sus comentarios aún siendo sabedor de su poderío vocal más propio de alguien de otro planeta.

                                                              Glenn Hughes.

Acto seguido Soren Andersen comenzó a tocar lo que esta vez sí era la introducción de “Mistreated”. Tal vez el clásico más importante del MARK III de Deep Purple y que sonó tan poderoso como el resto de la actuación que todos los allí congregados estábamos teniendo la suerte de experimentar. El concierto nos tenía a todos donde quería Glenn, se había creando una atmósfera ideal para ir desgranando uno tras otro estos pedacitos de la Historia de la Música y “Mistreated” no hizo más que ahondar en este presupuesto. Tras el solo de guitarra tan ambiental que contiene la canción -no deja de ser un Blues, salvaje y poderoso, pero un Blues-, Hughes se acordó de Blackmore mientras se iba adentrando en la parte medio/final que suele dejar para improvisar con su voz. Lo que nos ofreció entonces fue algo mágico, uno de esos momentos que solo pueden interpretar unos pocos genios y que le hace merecedor de todos mis reconocimientos. Allí nos tenía a todo el público, desarmados ante su impresionante capacidad vocal y su increíble gusto para detener la canción, volverla a recuperar y hacerla explosionar en un final de órdago. Todo el teatro en pie rendido a sus pies, aplaudiendo durante unos dos minutos y parando puesto que el propio Hughes empezó a agradecer al público quitándose importancia; igual sí es cierto que Glenn lleva Madrid en su corazón y que somos especiales para él. Bello y brutal.

                                                                  Glenn Hughes.

Ya quedaba el final, que vino de la mano del archiconocido “Smoke on the wáter”, intro de “Lazy” incluida, y en el que Glenn nos deleitó interpretando el interludio de “Georgia on my mind”, igual que en los setenta. Ya que esta crónica está hecha sin miedo a las extensiones, como los shows de Purple de los años setenta, se hace necesario detenerse en la interpretación de dicho “Georgia”. Ni que decir tiene que no me he perdido ni una sola de las actuaciones de Glenn Hughes en Madrid desde que tuvimos la fortuna de recibir su presencia en directo aquel lejano 2001 en el que presentaba el disco “Return Of Crystal Karma” y que ofreció un concierto soberbio en la sala Revólver en el que incluyó un “You kill me” salvaje que no había tocado en otros show de la gira. Por supuesto asistí al concierto que ofreció el pasado año en el auditorio de Rivas-Vaciamadrid presentando esta gira de los Deep Purple Clásicos. Allí quedé alucinado con la actuación que nos ofreció, pero me marcó de manera especial la interpretación de “Georgia on my mind”. Este clásico que inmortalizó Ray Charles sirvió de cobertura a Glenn para el interludio del “Smoke on the water” de los setenta y para el de esta gira actual. Ya en Rivas nos dejó a todos sin habla cuando afrontó esas primeras estrofas con su espectacular voz, con la emoción a flor de piel me dije que al día siguiente debía escribir sobre lo que estaba sintiendo en esos momentos. No lo hice y es ahora cuando siento la imperiosa necesidad de plasmar torpemente en palabras lo que nos hizo vivir Glenn Hughes cuando de sus labios salieron esas primeras líneas vocales de otro planeta que hacen merecida justicia a este clásico inmortal del Soul. Un Glenn pletórico de pasión entonaba esas estrofas jugando con su voz, forzando unos agudos exquisitos hasta límites inhumanos, aturdiéndonos mientras nos mostraba su alma y haciendo aflorar las lágrimas ante semejante exhibición de talento, inspiración, gusto y estilo. Con la misma majestuosidad y simpleza que había aparecido ante nosotros, esta expresión artística y vital nos abandonó, recreándose en un apoteósico final que puede que sea una de las cosas más impactantes que recuerde haber presenciado en lo que llevo de vida. Pero esto es marginal.
Otra cerrada ovación, el grupo que abandona el escenario y Glenn que se va mientras se toca el corazón con la mano. La gente quiere más, puestos en pie pedimos más Glenn Hughes esa noche. Y el grupo vuelve a salir. Tocan “Burn” a toda pastilla y cierran una actuación que hace merecida justicia a toda una época y a todo un legado musical, comandado por el que con toda seguridad sea el músico en activo en mejor estado que exista en la actualidad.

                                                              Glenn Hughes.

Lamentablemente no pudimos presenciar en directo la interpretación de canciones como “This time around” o “Holy man”. Estos dos temas los llevaban en el setlist al iniciar la gira, pero los sacaron del repertorio incomprensiblemente a las pocas actuaciones. En Rivas pudimos presenciar un show más corto, pero que contó con un soberbio “Highway star” en el que la voz de Glenn se mostró imbatible y dejó en evidencia a cualquiera que le se hubiese pasado por la cabeza la mera idea de tan siquiera toserle al lado. Respecto a “Holy man”, fue una agradable sorpresa saber de su inclusión en los primeros repertorios de la gira. Es una bonita canción que tiene su propia historia, parece ser que no le gustaba nada a Ritchie Blackmore y a regañadientes acabó aceptando que formase parte del disco “Stormbringer”; otro ladrillo más que cimentó su idea de abandonar al grupo. Recuerdo que mi querido amigo y también miembro del CADP Luis Delgado, con el que tuve el placer de compartir la actuación de Hughes en Rivas, me comentó que le hacía especial ilusión escuchar este tema en vivo cantado por Glenn. Y si hablamos de “This time around”, su caída del set también es una lástima. Es una de las canciones más personales que Glenn haya interpretado nunca, otra joya escondida de Deep Purple. En el homenaje póstumo a Jon Lord el propio Hughes rememoró una bonita historia sobre su composición junto al añorado Lord, cómo siguieron trabajando en el estudio mientras el resto del grupo se iba hasta acabar de darle forma a la idea del pianista por excelencia. Un sentido homenaje con otra interpretación en dicho concierto que sienta cátedra y eriza la piel.

                                      Glenn Hughes con el CADP y el HUSH que le lleva en la portada.



Set list Madrid. Teatro Nuevo Apolo:

“Stormbringer”  5.01
“Might just take your life”  5.23
“Sail away”  8.07
“You fool no one” (“The Mule”/”Blues”/”High ball shooter”/Batería)  24.40
“You keep on moving”  9.02
“Getting tighter”  14.21
“Mistreated”  14.20
“Smoke on the water” (“Georgia on my mind”)  12.28
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“Burn”  9.05






                       Glenn Hughes: "This time around". "Celebrating Jon Lord". Royal Albert Hall. Londres' 14.