Hace unos días se puso a la
venta el tan anunciado tributo a Dio.
El disco ha alcanzado el Top 20 en Billboard,
la lista oficial de ventas de Estados Unidos tras su primera semana, vendiendo
la nada despreciable cifra de quince mil unidades en esos siete primeros días.
Interesante dato en estos tiempos actuales que corren. Me alegro.
Este tributo está auspiciado
bajo la figura de Wendy Dio, ex pareja de nuestro añorado Ronnie.
Sí, la misma mujer que justo un mes después de la muerte de Dio vendía sus camisetas conmemorativas
en la propia web del cantante. Un mes después de su muerte. A mí, que jamás le
conocí en persona aunque ha sido y seguirá siendo esencial en mi vida, me costó
casi tres meses volver a hablar de él o escuchar su música. No podía. Es como
cuando desaparece un amigo íntimo, que ves una o dos veces al año, pero con el
que siempre has tenido esa conexión especial que hace innecesaria la simple
presencia física para sentirte íntimamente ligado a él y, de repente, un buen
día te enteras de que falta. La sensación de vacío resulta tan incómoda como
agobiante, y, desde una extraña serenidad, le deseas lo mejor con una
sinceridad interior tan gratuita que no necesita ni tan siquiera ser comentada
en público. Mientras, su ex mujer se dedica a vender ofertas de packs de
camisetas. Para rememorar… ¿qué? En fin.
Ronnie James Dio & Wendy Wendy ¿caracterizada?
Cuestiones delicadas aparte,
lo cierto es que a la labor musical que viene desarrollando Wendy no se le puede poner pega. Desde
la muerte de Ronnie James Dio ella
ha sido, por el deseo expreso del vocalista, la encargada de gestionar su
legado. Y debemos reconocer que lo está llevando a cabo con bastante
coherencia. Los pocos lanzamientos dicográficos que ha patrocinado han sido
bastante acertados y con muy buen criterio, nada de masificar el mercado con
quinientos mil recopilatorios sin sentido. Publicó los imprescindibles directos
de Donnington 1983 y, sobre todo, de
1987, con un Dio que, literalmente, se comía el escenario; documentó una época
en directo que, hasta ese momento, no tenía la discografía de nuestro cantante
preferido. También ha sacado reediciones de lujo de otros discos del pequeño
elfo, destacando la del disco conceptual “Mágica”,
con abundantes temas extras dentro de una selección muy cuidada.
"Mágica": Portada y contraportada.
Y ahora le toca el turno al
disco póstumo homenaje a Dio. El
elenco de músicos participantes tira de espaldas, sobre todo por contar con
nombres ilustres que normalmente no colaboran en ningún disco de estas
características, lo que hace aún más entrañable y respetuosa la edición del
mismo. Contar en un mismo Cd con personajes del calibre de Rob Halford, Scorpions, Metallica, Glenn Hughes, Motorhead, Biff
Bifford, Anthrax, Doro, Stryper o
Doug Aldrich no está al alcance prácticamente de ningún disco de estas
características. Debemos dar gracias de que no aparezca por aquí Ozzy intentando ladrar ninguna melodía.
Las versiones abarcan una
interesante variedad estilística, dentro del Rock duro desde luego, ofreciendo distintas perspectivas a cada uno
de los temas, cosa que se agradece; uno de los principales problemas de los
discos tributo es que calcan totalmente al original, cosa que en este caso se
ha intentado evitar, siempre con dispares resultados.
Rob Halford (Judas Priest) hablando en la gala de presentación.
Desde el inicio poderoso con
el tema “Neon Knights” interpretado
por Anthrax, siguiendo con una
interesante versión del clásico “The
Last in Line” a cargo del dúo cómico Tenacious
D, con solo de flauta incluido. Debemos recordar que estos cómicos han sido
admirados por el propio Ronnie desde
hace años y que hicieron un breve cameo en el vídeo clip que editó Dio en el año dos mil dos para su tema “Push”, por lo que resulta un bonito
detalle haber contado con su colaboración.
Otra cosa muy importante y
representativa de este disco tributo es que cuenta con colaboraciones de
artistas que han representado algo significativo en la vida y carrera musical
de Dio. Casi todos los músicos
participantes han tenido una relación directa con Ronnie, y esto es algo a agradecer puesto que en la mayoría de tributos
las colaboraciones son impersonales, estando realizados por parte de artistas
que poco a nada tienen que ver con el homenajeado y que lo único que buscan es
la pasta.
La siguiente canción es el
clásico de Sabbath “The Mob Rules”,
interpretado brutalmente por ese pedazo de grupo llamado Adrenaline Mob y sus fantásticos músicos de la mano de Russell Allen que, además de admirar a Ronnie, demuestra que tiene una banda
como una catedral.
Adrenaline Mob: "The Mob Rules". Live "The Hiro Ballroom" New York
Aceptables las versiones de
las canciones “Rainbow in the Black” y “Straight Through the Heart”, a cargo
de Corey Taylor y Halestorm. Supongo que buscando llegar
a esas nuevas generaciones inexistentes. Junto con la versión del tema “Holy Diver”, por parte del grupo Killswitch Engage, de lo más
prescindible del álbum.
Seguimos con el tema “Starstruck” de su etapa en Rainbow, interpretado nada menos que
por Motorhead - viejo compañero de
mil batallas, Lemmy - y con la voz
del cantante de Saxon, Biff Byford.
Lo cierto es que suena bastante bien. Debemos tener en cuenta que Motorhead y Biff no han participado prácticamente nunca en otros tributos, lo
que honra el hecho de querer dejar su impronta en este.
Ronnie Dio en una de sus últimas apariciones públicas.
Seguimos con dos de las joyas
del disco. La primera de ellas es el delicado tema “The Temple of the King”, una de las canciones más bonitas que haya
escuchado jamás, interpretada muy acertadamente por Scorpions, respetando su esencia original pero acercándola al
terreno musical del conocido grupo alemán. Y la otra es la revisión que hace
años hizo la cantante Doro Pesch de
la personalísima canción “Egypt (The
Chains are on)” y que han recuperado para esta nueva publicación. Aquí se
observa ese deseo de añadir al tema ese toque distinto y personal sin
desvirtuar en absoluto a la versión original. Muchos quilates.
Scorpions: "The Temple of the King"
Doro: "Egypt (The Chains are on)"
Seguimos con otro de los
puntos álgidos de este producto. La versión que se marca el pletórico cantante Glenn Hughes de la canción “Catch the Rainbow”. Lirismo puro con
el acompañamiento de Simon Wright, Craig
Goldie, Rudy Sarzo y Scott Warren
o, lo que es lo mismo, los músicos que llevaba Ronnie en su grupo Dio durante los últimos años de su carrera.
Simon Wright, Scott Warren, Craig Goldie, Ronnie Dio, Rudy Sarzo. Glenn Hughes con Ronnie Dio.
Resulta todo un acierto seleccionar distintas formaciones del grupo Dio para tratar cada uno de los temas.
Este es un mérito atribuible a Wendy
y que muchos fans valoramos en su justa medida, aquí se demuestra el cariño y
esmero puesto en la preparación del disco. Y, como guinda a la canción,
comprobamos que en el inicio del tema, el guitarra Craig Goldie interpreta unos acordes de otra preciosa canción del
disco “Mágica” titulada “As Long as it’s not about Love”.
Seminal y para paladares muy exigentes y exquisitos. Supongo que nadie se dará
cuenta de detalles como estos.
Glenn Hughes cantando "Catch the Rainbow".
Volvemos a la furia de su
etapa en Black Sabbath con la
versión de “I”, interpretada por el
cantante Oni Logan, con Jimmy Bain al bajo y con la guitarra de
Rowan Roberston, que perteneció a la
banda Dio durante la edición de su
buenísimo e infravalorado disco “Lock up
the Wolves”. Otro detallazo de clase.
Ronnie con Jimmy Bain. Ronnie con Rowan Roberston.
A este tema le sigue una muy
buena versión del clásico de Rainbow
“Man on the silver Mountain”, por parte del todopoderoso cantante de Judas Priest, nuestro querido Rob Halford, otro que no suele
participar en discos tributos… pero sí en este. Le acompañan en la sección
muscial Vinnie Appice, Doug Aldrich,
Jeff Pilson y Scott Warren;
vamos, otra de las formaciones que ayudaron a Dio a crear sus mágicas canciones.
Vinnie Appice, Tracy G, Ronnie Dio, Jeff Pilson Doug Aldrich con Ronnie Dio
Seguimos con otro de los
sentidos tributos de una de las bandas de Rock
duro más famosas de los últimos veinte años, hablamos de Metallica y su particular “Ronnie Rising Medley” que consiste, ni
más ni menos, en fragmentos de temas míticos del grupo Rainbow como “Light in the
Black”, “Tarot Woman”, “Stargazer” y “Kill
the King”. Casi ná. Lo entrañable del asunto es que estos temas
corresponden al mismo medley que interpretó el propio Dio en su repertorio cuando fue invitado especial de los Metallica en sus conciertos europeos de
los años noventa, en plena época de promoción del álbum de Dio llamado “Lock up the
Wolves”. Otro bonito guiño de un grupo que siempre se ha declarado
ferviente admirador de nuestro venerado maestro. Y es que, aunque en esos
momentos la popularidad de Dio no
tuviese nada que hacer frente a unas mega estrellas como Metallica, estos siempre le demostraron su admiración y cariño.
Ronnie Dio con James Hetfield (Metallica).
En el disco hay tres temas
extras, según el tipo de edición que te compres. Hay que ganar dinero. Dos temas más de su etapa en Black Sabbath, las canciones “Heaven & Hell” editada en su
momento por Stryper y rescatada de
nuevo para este disco, y el trallazo llamado “Buried Alive”, tema áspero y corrosivo como pocos, interpretado
por Jasta; el tercer tema es una
directa versión del clásico “Stand up
and Shout” a cargo de Dio Disciples,
grupo tributo oficial de Ronnie
formado por los propios miembros de su grupo y bendecido por la propia Wendy, con la poderosa voz de Ripper Owens.
Dio Disciples con Ripper Owens.
Cierra el disco una canción
interpretada por el propio Ronnie James
Dio. Una de las joyas más escondidas de su carrera, tal vez el tema más bonito,
delicado y doloroso que haya interpretado nunca. Hablo de “This
is your Life”, incluida en el disco maldito “Angry Machines”. Canción compuesta por Ronnie y el gran ausente en este tributo, de forma totalmente
injustificable e inmerecida, el genial e incomprendido guitarra Tracy G. Esta canción justifica por sí
sola toda una vida y una carrera dedicada a la música. Muchos grandes grupos
con fama, reputación y decenas de discos a sus espaldas jamás podrán aspirar a
componer algo de una belleza tan espiritual, única y rebuscada. Aunando lo
mejor y lo peor del ser humano, la hermosura y lo grotesco, esa continua y
eterna lucha entre el bien y el mal.
Ronnie James Dio: "This is your Life"