La canción "Loveless" de los Great White ultimamente me tiene obsesionado. Desde hace unos días no consiguo quitarme de la cabeza esa exquisita melodía. Por Dios, parece de otro planeta. Es un tema simple, que no sencillo, con una base de lo más normal, unas rítmicas muy bonitas, una guitarra solista que lo pone todo en su sitio, sin una sola virguería de sobra, y con un arreglo en el estribillo que consigue que sea literalmente incapaz de dejar de canturrearlo día y noche allá donde voy.
Además, pese a que se titula "Sin amor" no versa sobre la tan manida cursilería de "mi chica me dejó" y todo eso. La letra no es nada del otro jueves, casi ninguno de los textos del universo musical valen mucho salvo honrosas excepciones - no quiero introdurime en el submundo gris de los cantautores con sus trilladísimos cuatro recursos y sus méritos hipervalorados - pero por su sencillez resulta insultantemente efectiva. Basicamente habla de la amistad.
La verdad es que un grupo como Great White ha pasado por casi todo lo que puede pasar una banda de Rock. Batiéndose el cobre desde mediados de los setenta en pequeñas salas de conciertos, encontrando el éxito masivo con discos como "Once Bitten..." o "...Twice Shy" (curioso y real juego de palabras) con los que literalmente vendieron millones de copias, viviendo hasta el último de los clichés de las estrellas de Rock de los años ochenta, o endiosándose y cayendo en picado en cuanto a popularidad hasta acabar recorriendo todos los tugurios de América.
Se han separado y juntando varias veces. Fue en una de sus actuaciones donde ocurrió el triste accidente de la sala de conciertos The Station Night Club en Rhode Island, Febrero de 2003. Durante el concierto se produjo un incendio que ocasionó la muerte de unas cien personas, incluidos miembros del propio grupo. Hasta los informativos nacionales se hicieron eco del triste suceso y del posterior juicio. Todo este asunto sumió en una profunda depresión al vocalista Jack Russell.
Las relaciones personales de sus componentes también darían para un buen libro. Peleados entre ellos, con problemas de drogas y alcohol, rehabilitaciones y renacimientos de sus propias cenizas cual Ave Fenix.
El cantante original Jack Russell fue expulsado de la banda en 2011 por problemas de alcoholismo. El hombre tuvo desde 2009 serios problemas de salud, con una perforación intestinal y varias hernias en la espalda que derivaron en diversas intervenciones quirúrgicas y consumo de tranquilizantes para paliar sus dolores. En esos momentos se refugió en la bebida y las pastillas para mitigar el dolor. Durante un tiempo tuvo que salir a escena apoyado en un bastón y sentado en una silla debido a sus problemas con la salud y los excesos.
La situación acabó de manera bastante desagradable, el resto de la banda, con el guitarrista fundador Mark Kendall al frente, le expulsó del grupo y se sumergieron en una de esas batallas legales con las que abogados y jueces compran sus excesivas mansiones en las zonas mas pudientes del planeta. El grupo siguió fuincionando bajo el nombre de Great White mientras que Russell fundo otra banda con el nombre de Jack Russell's Great White ofreciendo un repertorio lleno de canciones del grupo. Lo más irónico es que una gran cantidad de temas están compuestos por el propio Russell, como el que nos toca ahora mismo.
Hace poco salió la sentencia que permite a Great White seguir actuando bajo ese nombre y a Russell seguir usando el apelativo Jack Russell's Great White. De este modo tenemos a dos grupos tocando las mismas canciones, y lo peor de todo es que hay más casos como este.
En fin. Quedémonos con lo importante:
Great White: "Loveless", del disco "Rising". 2009.