Encuentros HUSH.
Este es un sitio musical, no nos engañemos, pero en el que nos vamos a acercar a la música que nos gusta desde distintos ángulos, cual prisma. Como ya dijo el añorado Jon Lord: la música es la forma de arte más elevada que existe; afirmación que, pese a disfrutar de otras manifestaciones artísticas, sostengo plenamente.
Clube de Adictos a Deep Purple
Clube de Adictos a Deep Purple
Púrpura Chess
This blog is basically a musical site. Here we talk about the music we like, using different angles. As dear and missed Jon Lord once said: “Music is the highest kind of Art that exists”. I think the same way too.
Con esta sentida canción se cierra el nuevo disco de estudio que publicó Dokken el pasado Octubre. Un tema de corte acústico con una cuidada melodía que hace que se te erice la piel. Es una pieza de sencilla elaboración y con unos sobrios pero muy trabajados arreglos. La letra es autobiográfica, como el propio Don Dokken comentó en las entrevistas promocionales en su momento. Narra con una inusitada delicadeza, de manera tan directa como sencilla e inspirada, el recorrido vital del propio Don desde su juventud hasta el día de hoy; todo con una prosa acertada que rezuma un toque melancólico, triste y entrañable que te desnuda y te desarma... cualquiera de nosotros podríamos ser los protagonistas de la historia que el bueno de Don nos cuenta. La mejor letra de toda su carrera, sin duda.
Nos explica el vocalista y dueño del grupo que es una composición propia y una de las canciones que más remueve sus emociones. En este punto debemos tener en cuenta los problemas de salud y operaciones varias que ha sufrido nuestro sufrido vocalista en los últimos años. Como consecuencia parte de su mano quedó paralizada y no puede volver a tocar la guitarra; pese a ser el cantante, también toca el instrumento de las seis cuerdas y se le ha podido escuchar en muchos de sus discos y sus directos. Ya no puede hacerlo más. Nos cuenta que este tema ya lo tenía compuesto, era muy personal y es como un pequeño regalo para él que haya podido acabar incluido en el nuevo disco del grupo.
El disco, titulado "Heaven Comes Down", es un pedazo de obra que te engancha desde el primer momento. Del todo adaptado a las capacidades vocales del Don Dokken de los últimos años, pero con una caña y un sonido que te pone firme. Justo en estos días debía estar presentándolo en el festival Leyendas del Rock de Villena. Por desgracia, otra nueva lesión le impide tomar vuelos oceánicos y toda la gira europea se ha cancelado. El que esto firma ya tenía parte de sus vacaciones programadas -agendas, viajes, alojamientos y las imposibles carambolas habituales de estas cosas- para hacerle un hueco a la locura que supone ir al Leyendas y no dormir en cualquier cutre tienda de campaña; todos los asiduos al festi saben de lo que aquí hablamos. El único objetivo exclusivamente era volver a ver a Don y a su grupazo una vez más, tal vez la última vez. Sí, ya sé que no canta una mierda y bla, bla, bla... pero Dokken es una de esas formaciones que me enamoró hace ya un montón de años y, una vez sabes lo que vas a ver, puedes pasar un rato muy emotivo. Además, tampoco canta mucho menos que otros que pasean de manera exasperante su pedigrí y petulancia mientras se arrastran por los escenarios en cuanto los pisan. En fin. No Dokken, no Leyendas.
Os dejamos con la preciosista melodía de esta emotiva canción y su entrañable letra. Mientras la escuchas consigue llevarte a cualquier carretera de desierto por la que conduces tu coche en medio del asfixiante calor veraniego, atravesando las montañas; cualquiera que haya estado por allí entenderá de lo que hablo. Ideal para cruzarse en estas fechas las rutas de asfalto mientras visualizas sus parajes, llanuras y/o montañas cuál peli de esas ambientadas en cualquier desierto o similares.
I was born in LA, by the ocean with the breeze
Never saw no reason to leave
Down on Sunset Boulevard
Stay up till the morning with my friends
Then I'd sleep one hour or two
Head up to my job
It seems they never lasted too long
When I got a little older
I could see the world was changing,
Just like me
All around there's too many people everywhere
Just a crow, it's too loud
When I was traveling round the world
Always missing home
Finally realized maybe now it's time to go
Everything had changed, I felt so alone
So, I packed all my bags
Started down a very lonely road
Time to leave my home
Searching for a new place
That I could call my own
I was riding on my old horse
A bottle of whiskey to keep me company
Along the way
'Cos I knew, it would take some time to get to Santa Fe
Out into the desert someone told me there's a place
Far away, so if you're looking for me
Maybe you might find me in a place called Santa Fe
No es ningún secreto que Dokken es una de las debilidades del
que esto escribe. Un grupo tan aparentemente normal y que con total
probabilidad pocos escogerían de entre la excitante amalgama de bandas rockeras
americanas que explotaron en los dorados y excesivos años ochenta. Sin embargo Dokken
pasa por ser una agrupación que lleva en esto desde mediados de los setenta y
con una música de mucha calidad. Sus composiciones son fácilmente reconocibles,
lo que dice mucho y muy bueno de un grupo si además son brillantes. El grupo
comandado por el irreductible vocalista Don Dokken ha sufrido
innumerables vicisitudes en su dilatada trayectoria musical. Aunque un buen
número de músicos han sido de la partida al lado de Don, los seguidores
enseguida pensamos en su formación clásica que tantos buenos momentos, discos y
canciones nos reportaron. No solo el binomio Don Dokken a la voz y George
Lynch a la guitarra forman un tándem tan exquisito como peligroso; es que
su bajista clásico Jeff Pilson es de todo menos tonto: bajista,
guitarrista, teclista, cantante, arreglista, productor y compositor... casi ná.
Y el círculo lo cierra el batería Mick Brown, un tipo tan eficaz como
salvaje. No me extraña que cuando Wild Mick dejó Dokken el
elemento de Ted Nugent, que tampoco tiene nada de tonto en lo que a
música se refiere, se lo agenciase para su grupo.
Don Dokken, Jeff Pilson, Mick Brown y George Lynch.
Entre unas cosas y otras llevan cerca de cuarenta y cinco años
funcionando. Su primer single data del año 1979 y, aunque no lo parezca a
primera vista, su saga es bastante amplia. Un buen número de músicos han
aportado su impronta en cada una de las grabaciones de este grupo. Atesoran
cerca de las doscientas grabaciones. Bueno, a quién pretendo engañar. Conozco el
número exacto de obras oficiales -excluyendo recopilatorios y demás engendros
de dudosa enjundia con los que las compañías nos atosigan estos últimos años-
publicadas por esta gran familia musical: 226 discos. Justo ahora llevo un par
de semanas degustando todos y cada uno de estos discos -que están en las
estanterías de mi casa, por supuesto-, por lo que en estos momentos el universo
Dokken se ha apropiado del todo de mi saturado cerebro. Un ejercicio tan
saludable como excitante que cada año realizo por estas fechas.
La gente familiarizada con el grupo conoce sobre todo los discos
clásicos de los años ochenta, un ramillete de cuatro cds de estudio y un doble
en directo que les convirtió en platino. Por desgracia, las tensiones internas
y el choque de personalidades que siempre hubo entre Don Dokken y George
Lynch dinamitó la formación clásica por completo. Ambos siguieron
desarrollando sus carreras en solitario, se volvieron a juntar, se volvieron a
pelear y todo lo que suele ocurrir en los grupos famosos. En la actualidad Don
y George parece que han alcanzado un término medio estable en su
relación y, aunque dudo mucho de que vayan a quedar todos los viernes para
cenar con sus parejas y tomar algo, llevan un tiempo tocando juntos en dobles
carteles Dokken/Lynch Mob y/o subiendo Lynch al escenario con los
Dokken actuales para hacerse un par de temas en los bises con el grupo
madre.
Dokken 79: Steven Barry, Don Dokken y Greg Pecka.
Para justificar esta pequeña reflexión de fan irredento del universo Dokken
no nos hemos ido a ninguno de sus clásicos, que los tienen y en mayor medida
que otras bandas puede que con más reconocimiento. Una de las características
de esta saga es que para formar parte de la misma debes poseer un nivel elevado
con tu instrumento. En Dokken no toca cualquiera y uno no tiene más que revisar
las distintas formaciones para comprobar el nivel de cada uno de sus
integrantes. Les puede ir mejor o peor, pero Don y compañía parece que tienen
bastante claro el perfil de músico que buscan para hacer música cada vez que se
ven obligados a ello. Un grupo por el que, además de la formación clásica antes
citada, han pasado músicos como Reb Beach, Barry Sparks, Jon Levin, Alex de
Rosso o John Norum entre otros demuestra esta afirmación de manera
clara. Es precisamente Norum el protagonista junto al propio Don
Dokken de la canción de fondo que presenta este escrito.
Tras desmantelar el grupo a finales de los ochenta con el excelente
doble directo "Beast From The East", cada uno tiró por su
camino. Don montó un grupo para sacar un disco en solitario que en un
principio estaba pensado bajo la misma denominación de Dokken. Al final,
como Don Dokken salió a la venta "Up From The Ashes".
Un título muy apropiado con el que nuestro amigo Don buscaba renacer de
las cenizas de su extinta banda. Con John Norum como principal
lugarteniente, publicó un ramillete de canciones tan buenas como se espera de
alguien que haya formado parte de Dokken. Este "1000 Miles
away" tiene todos los ingredientes que hicieron famoso a Don:
bonitas melodías marca de la casa mezcladas de manera natural con una música
cañera y con gusto. Todo ello aderezado con la guitarra solista de John
Norum, de hecho el conocido guitarrista de Europe formaría parte de
una nueva encarnación de Dokken años después. Participó en el estupendo
disco titulado "Long Way Home" que el grupo publicó en el ya
lejano año 2002 y en su gira de presentación. Tengo una anécdota bastante
cachonda con respecto a esa gira. Por aquel entonces que Dokken se
acercase a tocar en España era poco menos que una quimera, por lo que un colega
y yours truly nos metimos en un avión para presenciar el concierto que
tenían programado en París y que suponía el final de la gira europea. Eran los
tiempos pre internet y tenía la descerebrada costumbre de no llevar reservado
ningún alojamiento cada vez que viajaba al extranjero para ver algún concierto,
siempre nos dedicábamos a encontrar un lugar donde dejar descansar nuestros
machacados huesos y alcoholizadas venas buscando por los alrededores al llegar
a la sala de turno de la actuación. Es por esto, estimados lectores, que os
podéis imaginar las calidades de los antros que acabábamos encontrando y las
esperpénticas peripecias que nos tocaba degustar. La de situaciones atómicas
que habremos vivido con ese modus operandi... que nostalgia de aquellos
años de jovencitos aventureros que acabábamos en los peores tugurios y pagando
un pastizal... aunque llenos de esa extraña excitación que te hace sentir vivo.
Don Dokken: John Norum, Don Dokken, Billy White. Mikkey Dee y Peter Baltes.
Pero prosigamos con el relato. El caso es que, tras unos cuantos
avatares de variada enjundia, al final nos encontrábamos dentro de la sala
minutos antes de comenzar la actuación. Nadie en escena, de pronto suena entre
bambalinas lo que debería ser la guitarra de John Norum.... pero que no
sonaba a John Norum. Instantes después salen a escena... y ni rastro de Norum.
En su lugar estaba un perfecto desconocido para nuestros ojos que resultó ser Alex
de Rosso. Un Don Dokken con cara de haber estado de fiesta toda la
noche anterior empieza a vacilar al respetable entre tema y tema, haciendo
estúpidas comparaciones entre las actuaciones que se realizaban en Europa
frente a las de Norteamérica. Todo con una pose arrogante entre entretenida e
insufrible. No parecía su mejor noche, desde luego. Realizaron su actuación y
al final de la misma incluso el batería destrozó parte de su kit, cosa
que casi nunca suele hacer en directo. Al final nos enteramos de que John
Norum les había dejado tras el concierto anterior y una fuerte bronca entre
los músicos. Joder, qué suerte tuvimos, me cago en mi puta vida. Nótese que
para nosotros contemplar en directo a Norum era un aliciente añadido al
show, por lo que la sorpresa y el palmo de narices que se nos quedó fue
mayúsculo. No podían haber discutido antes de comenzar la gira o tras el
concierto parisino. No, tenían que hacerlo justo antes de la actuación para la
que nos habíamos desplazado mil trescientos kilómetros. En fin, that's
Rock'n'Roll, baby. Esa noche aprendí un puñado de lecciones que me han
venido muy bien el resto de mi vida: nunca des nada por sentado hasta que de
verdad ocurra, piensa en el futuro pero vive y siente el presente, no te
desgastes demasiado cuando las cosas te vengan mal dadas y aprende a
relativizarlo todo... y, sobre todo, haber comprado un ticket para un concierto
nunca te garantizará que puedas llegar a verlo.
Don Dokken & Alex de Rosso.
Don Dokken, George Lynch, Jeff Pilson y Wild Mick Brown.
Cuatro forajidos curtidos en mil batallas que supongo jamás volverán a
recuperar esa magia de mediados de los ochenta, pero que nos han llenado de
felicidad a muchos de nosotros y lo siguen haciendo.
George Lynch, Jeff Pilson, Don Dokken & Wild Mick Brown.
Parece que estamos intentando que esto de la infecciíon del COVID 19 vaya pasando mientras que poco a poco damos pasos para retomar la vuelta a la vida. Dentro de este nuevo marco hace apenas un par de días que Dokken ha anunciado un par de conciertos en Norteamérica con la presencia en la guitarra de Reb Beach. Dentro del mismo paquete se anuncia también la actuación como invitado especial del grupo Lynch Mob, la formación clásica en solitario del guitarrista George Lynch. Las actuaciones tendrán lugar en el Dr. Peeper Park de la localidad de Roakone en el estado de Virginia y en el Timberwood Amphiteater, ubicado en Hot Springs y perteneciente al estado de Arkansas.
Debemos recordar que Lynch fue el guitarra de la formación clásica de Dokken, con el que grabaron joyas como "Tooth And Nail", "Under Lock And Key", "Back For The Attack" o "Dysfunctional", por citar unos ejemplos; la cantidad de grupos que matarían por un fondo de catálogo de semejante calibre. El asunto es que en este doble cartel primero actuará Lynch Mob y luego se subirá a las tablas el grupo del vocalista Don Dokken contando con la presencia en sus filas de Reb Beach, otro que toca que se te caen los cojones al suelo. Para cerrar la velada a modo de bis está invitado a subirse al escenario con Dokken el héroe de las seis cuerdas George Lynch en lo que volverá a ser otra nueva semireunión de esas con las que lleva jugueteando Don Dokken desde que la formación clásica se volvió a reunir al completo para una gira japonesa en el 2016 y que, entre otras cosas, dio como fruto el estupendo doble en directo "Return To The East Live". Grandes noticias para todos sus seguidores y otro de los motivos para la sana envidia de todos los que no residimos en tierras americanas.
Reb Beach. George Lynch.
Por supuesto que poder visionar una actuación de este calibre se escapa para todos los que residimos en Europa -y para los de España ni te cuento-, pero es que además con la que está cayendo por la pandemia el asunto de realizar actuaciones en durecto hace las cosas todavía más complicadas. Es por este motivo que nos alegramos de que los grupos y artistas estén intentando volver a retomar su rutina de conciertos en vivo.
Lo del anuncio de Reb Beach es como una especie de bomba inesperada. El genial guitarrista de Winger, Whitesnake y por el que cualquier grupo perdería el culo para que tocase con ellos hace aún más apetitoso este doble cartel. No especifica el anuncio si Beach actuará como único guitarra de Dokken o compartirá escenario con la formación actual del grupo. Ni que decir tiene que el nivel artístico de la actual agrupación de Dokken está fuera de toda discusión. La base rítmica formada por BJ. Zampa y Chris McCarvill suena como un cañón y Jon Levin a la guitarra nos lleva años alegrando la vida a todos los que disfrutamos de la música de Don & Cia. Por el otro lado presenciar en vivo a Lynch Mob es todo un placer y un lujo en estos tiempos tan inciertos que corren; vamos, el doble cartel perfecto. Por desgracia lo que peor está aguantando el paso de los años es la maltratada voz de Don. Un cantante que en los ochenta poseía una voz fascinante, un tono tan exquisito como elegante y una potencia que combinaba con lo anterior para conformar una de las voces más personales que nunca haya escuchado este humilde escriba. Hace años que Dokken perdió parte de este registro; no obstante ahí sigue, defendiendo en directo un legado del que sentirse orgulloso aunque muy adaptado a sus capacidades actuales.
Dokken 99: Reb Beach, Jeff Pilson, Don Dokken y Mick Brown.
Conviene recordar que Reb Beach formó parte del grupo de Don Dokken allá por 1999. Durante ese año y el siguiente facturaron un pedazo de disco en estudio titulado "Erase The Slate" y un no menos bueno directo denominado "Live From The Sun". Beach vino a sustituir al fugado George Lynch y a John Norum. No necesitó demasidas cartas de presentación, uno no tiene más que pinchar en su equipo el salvaje inicio de "Erase The Slate" para darse cuenta de que el bueno de Reb no estaba de broma en absoluto. Dios mío, la de veces que habré hecho sonar este discazo. Todo de primerísima categoría, nada de relleno y un músico que demostró la habilidad de calzarse las botas del sonido clásico de Dokken para componer un disco que conservaba su peculiar sello musical a la vez que conseguía sonar fresco y original. El hecho de no haber podido presenciar ninguna actuación en directo de esta formación es una de mis espinitas más clavadas y me parece que el asunto va a seguir así, haciendo daño, ya que no veo factible el asunto de volar a Arkansas el mes que viene -ojo, que si no hubiera pandemia allí estaba el primero-.
El día menos pensado habrá que escribir algo más detallado realacionado con ese par de años en los que Reb Beach formó parte de los Dokken. Ahora nos vamos a quedar con una de las mejores canciones de "Erase The Slate" para el que esto escribe. Como suele pasar con los grandes discos, algunas canciones pasan a formar parte del repertorio del directo y del posterior reconocimiento mientras que otras igual de buenas o más que las anteriores pasan a un incomprensible segundo plano. En el caso que nos ocupa ni siquiera la llegaron a interpretar en directo en esa gira, lo que deja claro la calidad del fondo de catálogo que posee este grupo; se pueden permitir el lujo de prencindir en sus directos de temas como este. Hablamos de "Change the world", una canción redonda e imposible de mejorar. Todo está en su sitio y en su justa medida. Un tema con marchamo de clásico, con una melodía que te vuela la cabeza 100% Dokken y una guitarra solista de otro planeta con la que Reb Beach deja claro el gran músico que es y el talento que atesora; además lleva un sonido que te atraviesa el cerebro. Un día un gran músico amigo mío me dijo que los grandes guitarristas no son necesariamente los que están en los grandes grupos, sino los que podrían tocar en todos esos grandes grupos porque todos les llamarían para que tocasen con ellos. Y sin duda Reb Beach cumple esas premisas sin discusión. Os dejamos con la lección magistral de Dokken y de Reb Beach. Y quién sabe, igual la tocan en ese par de conciertos.
Dokken es una de mis
debilidades, lo reconozco. Este grupo tan entrañablemente disfuncional me ha
venido acompañando durante toda la vida desde mi tierna adolescencia. Todavía
recuerdo el momento en el que la canción “Dream
warriors” entró por vez primera en mis oídos durante esos inolvidables años
del insti. Después llegaron “Unchain the night”, “Alone again”, “Just
got lucky”, “It’s not love” y todas las demás. El caso es que dentro de un
par de meses saldrá a la venta el disco en directo que grabaron con motivo de
la mini gira de reunión que protagonizaron hace aproximadamente un año.
Dokken. Reunión 2016.
Formar parte de una banda como Dokken
nunca fue fácil, la peculiar química que fluía entre el cantante Don Dokken, el guitarrista George Lynch, el bajista Jeff Pilson y el batería “Wild” Mick Brown nos permitió
disfrutar de grandes canciones, pese a las disputas que mantuvieron entre ellos
durante prácticamente toda su carrera. Don
y George se detestaron –y
todavía se detestan a día de hoy- desde el minuto uno; las clásicas desavenencias
entre cantante y guitarrista aquí alcanzaron su máxima expresión. Aunque el
asunto no quedaba ahí. La personalidad de un tipo con tanto talento como Jeff Pilson: bajista, cantante,
guitarrista, pianista, productor, arreglista y compositor, también chocó con la
dupla Don/George dando lugar a
momentos tan cachondos como penosos. Alcanzaron un enorme éxito comercial a
mediados de los ochenta y se acabaron separando en 1988, hartos de verse las
caras a diario en los autocares de gira, tras la exitosa gira japonesa que significó
la grabación del doble en directo “Beast
From The East”; un disco que, pese a su enmarañada producción, no podía
tapar a una banda que sonaba como un cañón.
Jeff Pilson.
Se han vuelto a juntar y a separar varias veces a lo largo de todos
estos años, como bien hemos documentado en otros momentos por aquí. En la
actualidad Don sigue con el grupo y
con la propiedad del nombre, George
marcha en solitario y poniendo su guitarra al servicio de diferentes proyectos,
Jeff está en la nómina de los
reformados Foreigner y el bueno de Mick, el que menos se ha preocupado de
discutir y más de disfrutar del estilo de vida de rockstar, ha tocado indistintamente con Don, George y Jeff; sin
problemas. Un tipo como Brown no se
complica la vida con esas menudencias. No hay más que recordarle derrapando a
toda pastilla con uno de esos cochecitos que trasladan a los jugadores de golf
de un hoyo a otro. Nuestro insigne batería, con evidentes signos de estar bajo
los efectos del alcohol, fue demandado por atravesar un campo de golf en uno de
esos coches a toda velocidad mientras iba acompañado de un par de bellas
señoritas. Todavía le recuerdo en el backstage
del Monsters of Rock de Zaragoza de
hace unos años, tocando con el grupo del facha de Ted Nugent y asiendo dos minis en ambas manos que seguro no iban
llenos de coca cola exclusivamente. El apodo de “Wild” Mick no se lo ha ganado en vano.
George Lynch, Mick Brown & Don Dokken.
Estos cordiales tipos han seguido poniéndose a parir regularmente
siempre que les han puesto un micrófono delante y han seguido tocando en
directo esas canciones que compusieron juntos y que les hicieron famosos
durante los años ochenta. Lo normal en estos casos. Milagrosamente se volvieron
a juntar; por dinero, claro. Ninguno de ellos tuvo reparos en admitirlo públicamente.
Les pusieron sobre la mesa un pastizal y aceptaron realizar una gira por Japón,
territorio donde son increíblemente famosos. A esta serie de conciertos le
añadieron uno más en pleno desierto norteamericano, imagino que gentileza de Lynch, para grabar un cd y dvd en vivo.
Reventaron de público la sala a la vez que anunciaron una nueva composición en
estudio que imaginamos acompañará a la publicación de dicho directo.
Dokken. Badlands Paw. Sioux Falls. South Dakota. 30.9.16.
El grupo sigue sonando compacto. Desgraciadamente es el cantante el
que no ha llevado nada bien el paso de los años. Ok; es cierto, negarlo sería
estúpido: la realidad es que Don Dokken
no canta una puta mierda. Pertenece a ese triste grupo de vocalistas que llevan
sin ser capaces de cantar un carajo desde hace más de veinte años sin que
parezca que pase nada; sí, la sociedad que comanda gente como Robert Plant u Ozzy Osbourne entre otros ilustres. Y es una pérdida, la voz de Don siempre me pareció una preciosidad.
Incapaz de desafinar un solo semitono y con un timbre muy especial. Imagino que
no se cuidó lo necesario y el resultado acabó siendo el que es. No obstante,
una vez asumido que nunca vas a volver a escuchar al cantante en esos tonos de
los discos de estudio, uno no puede dejar de disfrutar con la música que
penetra en tu cerebro cada vez que se enciende el botón “on” y los instrumentos,
junto a los adecuados y necesarios coros de apoyo, pasan a ser los protagonistas.
Don Dokken.
Mientras esperamos la salida de este nuevo directo uno no puede por
menos que disfrutar de las grabaciones de estos conciertos de reunión que
circulan por ahí. No solo de discos originales vive el hombre. Tienes que
cambiar el chip para poder disfrutar de una grabación que no está producida y
editada con el mejor sonido posible, hay que encender el botón de tu cerebro
que te permite disfrutar de las tripas de la música en esas circunstancias;
todo el que haya consumido grabacionesde conciertos piratas sabe de lo que hablo, pero eso es otro tema que
podremos retomar en el futuro. El asunto es que me encontraba chequeando el
show que ofreció el grupo en Sioux Falls, del que supuestamente se recogela grabación del cd en directo, y en un
determinado momento todo confluyó. Se produjeron las circunstancias
espacio/tiempo que solo se consiguen en escasos y determinados momentos
especiales, algo así como cuando todos los condicionantes se manifiestan y
superponen de la manera correcta. Esto ocurrió mientras comenzaban a sonar las
primeras notas de la versión acústica de “Heven
sent”. Este tema llevaban sin tocarlo un montón de años y creo recordar que
es la primera vez que lo interpretan en formato acústico. Hay que decir que Dokken publicaron en 1996 el disco “One Live Night”, uno de los mejores
discos acústicos en directo que he escuchado jamás.Esta álbum consistía en la grabación de un concierto en vivo que
presentaba unas canciones con unos arreglos que sencillamente herían tu piel de
lo buenos que eran, no hay más que escuchar“Unchain” o la maravillosa
versión que se marcaron del clásico “Alone
again” entre otros. No apareció en este disco la canción “Heaven sent” y ahora la han rescatado
para este nuevo directo de reunión más de veinte años después. Un tema moruno
de esos que tienen cuerpo y carácter por sí solos. Imaginaos la situación: salir
de una gasolinera en medio del desierto, del árido campo, mientras el sol de la
mañana te ciega los ojos y el polvo de la arena que dejan tus pisadas se mezcla
con el regusto del café bien cargado y humeante que te acaban de servir al
hacer un alto en tu camino hacia ningún lugar en concreto. Mágico. Igual de
mágico que la versión de esta canción que me hace contar los días, horas y minutos
que faltan hasta que dicha grabación –original, con buen sonido y producción,
eso sí– caiga en mis manos.
Don Dokken, George Lynch,
Jeff Pilson y Mick Brown han decidido
vovler a tocar juntos bajo el nombre de Dokken
una vez más. Por increíble que parezca, una de las reuniones más
complicadas va a producirse en el incomparable marco de Japón. El grupo tiene
previsto ofrecer una pequeña gira de seis conciertos por tierras niponas, entre
los que se incluye una actuación en el prestigioso festival Loud Park donde van a comparir cartel
con otros grupos tan prestigiosos como Whitesnake,
Symphony X, Nightwish, Uli Jon Roth o los mismísimos Scorpions entre otros. Tras bastante tiempo de rumores por
distintos bandos y focos, a primeros de verano Don Dokken anunció oficialmente que la formación original se iba a
reunir para realizar una serie de shows en Japón, un mercado que siempre ha
tenido a Dokken en un pedestal.
Puntualiza el bueno de Don que será
una reunión puntual, que todos los protagonistas tienen sus propios proyectos
musicales –los propios Dokken están
en activo con otra formación-, que siguen llevándose mal y que lo van a hacer
principalmente por dinero. Con dos cojones.
Es un hecho que los miembros de los Dokken clásicos nunca se llevaron bien. Durante todos estos años
siempre que han tenido ocasión han aprovechado pararealizar toda una innumerable ristra de
declaraciones descalificándose y poniéndose a parir, usando argumentos que van
desde lo ridículo y lo bochornoso hasta lo mezquino. Este grupo tan
disfuncional tal vez solo se vea superado en esta faceta por los Ratt, otros a los que hay que darles de
comer a parte. No en vano incluso Dokken
tienen un disco titulado “Dysfunctional”,
que fue precisamente el de su primera reunión.
La banda de Don Dokken es
uno de esos grupos norteamericanos que triunfaron en las listas de éxitos y se
hincharon a vender discos en la época dorada de Los Angeles durante aquellos
mágicos años ochenta llenos de pelos largos cardados, pantalones ajustados y
buen Hard Rock. Fueron los años de
mayor éxito de todas estas bandas norteamericanas como Quiet Riot, Ratt, Motley Crue, Cinderella, Posion, LA Guns, Winger y un montón de grupos más, todos comandados por Van Halen bajo la batuta de Eddie
Van Halen y del único e irrepetible maestro de ceremonias David Lee Roth. Se metieron a toda una
generación americana en su bolsillo agitando como bandera el tan conocido lema
de “sexo,
drogas y Rock n Roll”.
Cartel promocional gira japonesa reunión.
Dokken siempre fue la
idea del vocalista Don, bautizó al
grupo con su propio apellido; bueno en realidad su nombre real es Donald Maynard, adoptando el nombre
artístico de Don Dokken y llamando a
su propio grupo Dokken. El grupo
empezó a funcionar a finales de los setenta. Al principio Don era el único miembro de la formación clásica que estaba en el
grupo. En esos primeros años bastantes músicos de la escena angelina tocaron en
el grupo de Don, algunos de los
cuales acabaron triunfando posteriormente en otros grupos como Greg Leon, Gary Holland o el bajista Juan Croucier y el batería Bobby Blotzer que acabaron haciéndose
famosos en el grupo Ratt. Recuerda Blotzer unas cuantas anécdotas bastante
cachondas sobre el propio Don Dokken,
al que recuerda como un aguililla y un prenda
de cuidado en aquellos años locos. Parece ser que el bueno de Don ya iba haciendo amigos desde el
inicio, comenta The Blotz –como
cariñosa y a la vez despectivamente le apodaban sus propios compañeros de Ratt- que Dokken ya tenía un carácter altivo y fanfarrón desde los primeros
tiempos y hacía todo lo que hubiese que hacer por llevarse las chicas a la cama
y los contratos discográficos al bolsillo. Esa añorada escena angelina de los
ochenta, toda llena de cariño, confianza y fraternidad.
Dokken primera formación: Gary Holland, Greg Leon, Don Dokken, Gary Link.
Publicaron algún single y una especie de Ep titulado “Back In The Streets”, del que el
propio Don dice que no son más que
unas maquetas que les robaron y publicaron ilegalmente, antes de conseguir dar
el salto definitivo dentro de la industria discográfica. Su momento llegó al
publicar su primer Lp llamado “Breaking
The Chains”. No encontraban contrato en EEUU y, gracias a las artes de Don, se consiguió una oferta para
grabar en Alemania. De este primer disco hay publicadas nada menos que tres
versiones: el disco de las sesiones alemanas que salió en 1981 bajo el contrato
del sello europeo Carrere, ese mismo
pero publicado bajo el nombre de Don
Dokken y la versión revisada que salió en 1983 en América ya con el
contrato de la todopoderosa multinacional Elektra.
Para este momento la formación ya estaba compuesta por Don a la voz y guitarras, George
Lynch a la guitarra, Wild Mick Brown
en la batería y Juan Croucier en el
bajo. Curiosamente, pese a lograr fichar por Elektra, parece ser que ésta tenía intención de echarlos porque no
le parecía que fuesen a tener éxito. Consiguieron publicar con ellos su
siguiente álbum “Tooth And Nail” ya
con Jeff Pilson al bajo, llegó el
éxito y lo demás es historia.
"Breakin' The Chains". Carrere."Breaking The Chains". Electra.
Don Dokken: "Breakin' The Chains". Ed limitada 500 copias.
Parece ser que las relaciones internas en el seno del grupo siempre
fueron tensas. Aunque ninguno de ellos llegó a llevarse bien del todo con los
otros, parece que el principal núcleo de fricción se focalizaba entre el
cantante Don Dokken y el guitarrista
George Lynch; la historia de
siempre, la guerra cantante/guitarra. El grupo publicó cuatro grandes discos en esos
años: “Breaking The Chains”, “Tooth And
Nail”, “Under Lock And Key” y “Back
For The Attack”. Todas estas obras de
arte están repletas de canciones brillantes e imperecederas como “Paris is burning”, “Just got lucky” con ese riff de inicio
incendiario, “Into the fire”, “The
hunter”, “In my dreams”, el macarra y vacilón “It’s not love”, la hipnótica “Unchain
the night”, la preciosidad de balada “Alone
again”, la potencia de “Kiss of
death”, “So many tears”, el
single “Dream Warriors” que es un
temazo y no sé cuántas más. La mayoría
de bandas que pululan por el universo musical matarían por poseer solo un tanto
por cierto de esta producción musical. Pese a no soportarse Dokken y Lynch consiguieron dar con ese punto perfecto de equilibrio entre
la crudeza y el virtuosismo de la guitarra de George y las melodías tan características de Don. Junto a la inspiración y destreza de Pilson conformaron un sonido personal y claramente reconocible.
Dokken: "It's not love". Vídeo oficial.
Dokken: "It's not love". Versión del directo "Beast From The East".
En
el año 1988 fueron a Japón para registrar su reconocido álbum en directo “Beast From The East”, un disco que
podría haber quedado mejor producido pero que muestra a Dokken en todo su poder con un repertorio de ensueño. Para entonces
Dokken y Lynch ni se hablaban. Poco después aceptaron unirse a la macro
gira Monsters Of Rock por estadios
Norteamericanos, un tour itinerante auspiciado por Van Halen, que habían adquirido los derechos del mítico festival
británico, y en el que compartían cartel también con Metallica y Kingdom Come; lo que hubiese dado por haber asistido a
alguno de esos shows. En esa gira ya saltaron definitivamente chispas, George Lynch tocando de espaldas al
público y un Don bastante desaliñado
aguantando que su guitarrista emitiese sonidos distorsionantes cada vez que
intentaba dirigirse a la audiencia. Según cuentan Pilson y Brown, estas
tensiones estuvieron ahí prácticamente desde el principio y ellos simplemente
se dedicaban a capear el temporal y tocar.
George Lynch. Monsters Of Rock 88. Don Dokken. Monsters Of Rock 88.
El grupo se separó en 1989 y,
según al que le preguntes, encontrarás distintas motivaciones para explicar
este hecho. Don Dokken comentaba que
las tensiones personales y creativas eran tan grandes que Lynch decidió marcharse y después el resto del grupo. Por su parte George Mr
Scary Lynch recientemente ha comentado que Don Dokken tenía pensado lanzarse en solitario y que provocó la
situación para buscar la fama en solitario; conviene recordar que todavía
estábamos en los finales ochenta y aquello de las bandas americanas famosas
parecía la gallina de los huevos de oro… hasta que llegó el Grunge y lo barrió todo.
Don Dokken en solitario con su pedazo de grupo: John Norum, Mickey Dee, Billy White, Peter Blates.
George Lynch
montó su propio grupo bajo el nombre de Lynch
Mob, llevándose a Mick Brown a
sus filas, Jeff Pilson montó el
interesantísimo proyecto War & Peace
con Randy Hansen y Vinnie Appice pero no prosperó y Don lanzó un buen disco en solitario
con John Norum a la guitarra pero
que no obtuvo apenas repercusión. Todos ellos nos regalaron durante esos años
discos de gran categoría, los dos primeros de Lynch Mob son espectaculares y el siguiente que sacó como George Lynch es de lo mejorcito de toda
la discografía de la saga. Por su parte Don
Dokken, tras el fiasco comercial de su disco en solitario y con el cambio
musical que había supuesto el grunge, decidió volver a reunir a Dokken. En 1993 se reunieron los cuatro
músicos que tantos y tan buenos temas habían compuesto bajo el logo de Dokken. Grabaron un disco titulado como
el propio grupo y, pese a ser una gran obra, no obtuvieron contrato
discográfico y solo lo publicaron en Japón en 1994, donde siempre fueron
considerados como reyes. Curiosamente un año después el todopoderoso ejecutivo
y gurú musical John Kalodner, que
siempre sintió debilidad por la banda de Don
y George, les ofreció un
suculento contrato discográfico con la idea de hacerles resurgir de las cenizas
como ya hizo con otros grandes grupos como Aerosmith,
Asia o Whitesnake.
Desgraciadamente los tiempos habían cambiado y Dokken no lograron subir a esa división de honor del éxito musical.
Se remezcló el disco japonés del 94 y se publicó con otro orden de canciones y
el añadido de dos temas bajo el apropiado título de “Dysfunctional”. En esta segunda etapa de la formación clásica
sacaron también un interesante disco llamado “Shadowlife” lleno de referencias al estilo Grunge y que no acabó
de cuajar entre sus seguidores. Publicaron además un directo acústico que es
una joya en sí mismo –no hay más que escuchar la versión de “Alone again” para comprobarlo- y un
directo de la gira de “Dokken”/”Dysfunctional”
para el mercado japonés bajo el título de “One Live Night”. El público no acabó de aceptar esta nueva
propuesta musical y George Lynch
volvió a abandonar la nave de nuevo, parece ser que fue el principal instigador
de ese cambio de estilo hacia esos sonidos actuales que no acabó de cuajar; George Lynch, además de grandísimo
músico, siempre ha estado interesado por explorar las nuevas tendencias
musicales e incorporarlas a su propio estilo musical, presentando discos de
resultados dispares.
Dokken: "Alone again". Vídeo oficial 1985.
Dokken: "Alone again". Del acústico directo "One Live Night". 1996
Dokken reunión 1995-98.
Dokken
continuó con Reb Beach, otro músico
de gran categoría, de sustituto a la guitarra. Publicaron el espectacular disco
“Erase The Slate” en 1999,
recuperando ese sonido clásico tan característico del grupo. En la gira
posterior grabaron el no menos espectacular directo “Live From The Sun” en el conocido Teatro Sun de Anaheim, California. Un año después también Jeff Pilson abandonó el grupo, según Don porque no quería seguir tocando los
mismos temas todas las noches y quería hacer música nueva. Desde entonces Dokken ha seguido en activo de la mano
de Don Dokken y acompañado casi
siempre por Mick Brown, menos cuando
ha girado con otros músicos como Ted
Nugent. Curiosamente Jeff Pilson
acabó realizando en 2003 un proyecto con George
Lynch bautizado como LP,
grabando un disco de título homónimo y que está muy bien, como casi todo lo que
sale de esta saga.
Dokken 1999: Ref Beach, Jeff Pilson, Don Dokken, Mick Brown.
El camino de Dokken no estuvo lleno de rosas con los
ex miembros, como nos podemos imaginar. Don
Dokken compró y obtuvo los derechos del grupo tras la marcha de los otros
miembros, de hecho siempre fue su banda desde el inicio. Todos estos años no
han perdido la oportunidad de despotricar unos contra otros. Eso sí, el grupo
ha seguido sacando muy buena música. Tras algunos cambios entró en el grupo el
guitarrista Jon Levin, alcanzado una
estabilidad y un interesante tándem creativo Levin/Dokken, de hecho Jon
era el abogado que llevaba las finanzas del grupo. Jon había dejado la guitarra para dedicarse a su carrera
empresarial y la tocaba solo por hobbie,
hasta que un día Don le escuchó y le
ofreció el puesto en la banda. Tras el disco “Long Way Home” que sacaron en 2002 con John Norum como guitarrista, en el resto de los publicados hasta ahora
–“Heel To Pay”, “Lightning Strikes
Again” y “Broken Bones”; a cuál
mejor, claro- figura Jon Levin como
mano derecha de Dokken. Con respecto
a la gira de presentación de “Long Way
Home”, otro gran disco, tengo una anécdota muy cachonda. En esos días estaba
John Norum en la banda y hacían gira
europea –España excluida, claro-, conviene recordar que antes Dokken apenas habían pisado suelo
europeo y, ante el miedo de no poderles ver en directo, nos decidimos a viajar
hasta Paris para verles actuar en un pub; además, la presencia de Norum lo convertía en un doble
reclamo.Se trataba del último concierto
de la gira y Don salió borracho a
escena, con unos insoportables aires de grandeza y diciendo tonterías entre
tema y tema. Para colmo el guitarra… no era John Norum, parece ser que Norum
había discutido con Don y
abandonó al grupo a falta de ese último show; vamos, una suerte loca. Imagino
que John acabaría harto de las
estupideces de Don Dokken y puede
que de ahí viniese el lamentable estado que mostraba Don sobre el escenario de Le
Plan. En ese concierto tocó Alex de
Rosso y recuerdo que el bueno de Wild
Mick destrozó su batería en la última canción del repertorio. Una noche
entretenida. Desde luego que una biografía de Dokken tiene para llenar un buen puñado de páginas con
entretenimiento de primera, aunque no es menos cierto que todos estos avatares
nunca han mermado la calidad de su producción musical puesto que podemos decir
que prácticamente todos sus discos de estudio son de gran categoría e
inspiración.
Dokken 2002: Mick Brown, Barry Sparks, Don Dokken, John Norum.
A lo largo de todos estos
años los rumores de la formación clásica han ido apareciendo casi del mismo
modo que los desmentidos y las críticas de unos miembros a otros. Aunquelo cierto es que la formación clásica de Dokken se volvió a reunir sobre un escenario
por tercera vez en 2009, ya un mes antes Dokken
y Lynch Mob coincidieron en el
festival japonés Loud Park y Don invitó a Lynch a subirse a escena durante el concierto de Dokken para tocar “Tooth and nail”. En el concierto que el grupo ofreció en Anaheim
el 29 de Noviembre de 2009 actuaron los Dokken
de Don y Mick Brown, pero en el bis aparecieron George Lynch y Jeff Pilson
para tocar los temas “When heaven comes
down” e “In my dreams” en lo que
sería la primera vez que actuaban juntos desde el año 1998. Como todo lo que
ocurre en el universo Dokken la
situación fue algo bizarra. El grupo habitual terminó su set list y se retiró
al camerino, la actuación era entre semana y la gente tenía que trabajar al día
siguiente. El grupo tardó un cierto tiempo en salir de nuevo a escena, por lo
que muchos de los asistentes pensaron que el show se había acabado y se
marcharon a sus hogares pensando en las obligaciones del día siguiente. Imagino
la cara que se les quedó cuando se enteraron que, tras un largo rato, salieron
a escena de nuevo Don y Mick pero acompañados de JeffPilson y George Lynch; me
imagino a Don y a George discutiendo los minutos previos
en el camerino. Por supuesto este hecho desató toda serie de rumores sobre una
nueva vuelta de la formación clásica, de hecho parece que las conversaciones se
habían producido y todo estaba bastante encarrilado. Don Dokken y George Lynch
tenían previsto asistir al conocido programa de la VH1 That Metal Show, dirigido por el conocido locutor americano Eddie Trunk, toda una institución en el
Hard Rock clásico americano. En un
principio asistieron para hablar de la supuesta reunión de Dokken que estaba en marcha pero, según ha desvelado Don Dokken hace poco, recibió una
llamada de Jeff Pilson esa misma
mañana diciéndole que se echaba atrás para esa esperada reunión. De este modo
los entrañables Don y George fueron al programa de la manita
para decir que no sabían qué pasaría con la supuesta reunión que nunca llegó a
producirse. Parece ser que en este tinglado cada uno tiene lo suyo.
Puede ser que por estos
motivos un par de años más tarde, concretamente en 2012, saliese al mercado el
disco de un grupo llamado Tooth &
Nail con el título de “Slave To The
Empire”. Bajo esta logo estaban George
Lynch, Jeff Pilson y Mick Brown con cantantes invitados versionando temas
clásicos de Dokken más alguno nuevo.
Desde luego que muy poca gente podrá entender a estos tipos.
Don Dokken y George Lynch juntos en entrevista.
Las desavenencias entre Don y George han sido explicadas hace podo por el propio Don Dokken. Aunque aquí ya no sabes de
quién fiarte, hace poco nuestro querido angelito Don comentó que en la gira japonesa del año 95 para promocionar su
disco de vuelta lo tuvo claro. Parece ser que el problema de George Lynch tiene que ver con el hecho
de que el grupo se llame Dokken.
Durante un ensayo Don, harto de la
actitud de Lynch, le preguntó que
dónde estaba el problema ynuestro
entrañable Mr Scary se dio la vuelta
señalando el logo gigante del escenario en el que se leía el nombre del grupo. Don, con su particular y ácido sentido del
humor, le vino a decir que era cierto que se trataba de su propio nombre pero
también era el nombre del grupo, por lo que no había nada que hacer al
respecto. Así, con deportividad. Don
Dokken define al grupo como si de una propiedad inmobiliaria se tratase, Para él siempre fue una inversión, aunque hubiese una hipoteca que afrontar, al
final acabas teniendo una propiedad que tiene su valor.
George Lynch y Don Dokken.
Tomar el camino sencillo
nunca ha sido el estilo de esta pequeña familia tan descolocante. Incluso
cuando se produjo el anuncio de la reunión a principios de verano, el bueno de Don aprovechó para cargar contra sus
camaradas comentando que lo habían anunciado antes de que fuese oficial. Aunque
lo bueno viene cuando explicó los motivos de la reunión. Nuestra querida alma
solidaria comentó que se juntaban porque un promotor les había ofrecido una
cantidad de dinero lo suficientemente alta como para no negarse. Argumentó Don que hace unos años le preguntaron por
cuanto dinero reuniría a la formación clásica de Dokken, él puso una cifra con muchos ceros detrás y quince años más
tarde ha venido un promotor a ofrecérselo. Incluso los otros miembros restantes
hacen alusión a que la pasta es el motor que ha hecho que se vuelvan a juntar. Genial,
una explicación a la altura de la que ofreció Ritchie Blackmore cuando le preguntaron por los motivos de la
reunión del Mark II de Deep Purple en 1984. El entrañable
hombre de negro replicó que lo hicieron básicamente por dinero y para molestar
a la prensa. Grande Ritchie.
Incluso resulta curioso
escuchar a Mick Brown argumentando
todo el asunto del dinero y que no sabe cómo acabará todo. No hay que olvidar
que su apodo de Wild se lo ha ganado
a pulso este entrañable elemento que un día decidió robar y conducir un carro
de golf acompañado de un par de chicas estando completamente bebido, me hubiese
encantado ver al bueno de Mick
derrapando con el dichoso coche destinado a transportar a esos estirados
aprendices de golfistas de medio pelo. No puedo evitar recordar el momento en
el que le vi en los camerinos después de su actuación con Ted Nugent en el fallido festival zaragozano Metalway de 2008. Asistimos a ese concierto porque el cartel tiraba
de espaldas: Deep Purple, Thin Lizzy
(John Sykes), Saxon, Ted Nugent, Iron Maiden, Avantasia y Barón entre otros. La tarde del viernes
comenzó con los conciertos de Lizzy con Sykes –nada que ver con la actual
pantomima de Black Star Riders que
seguro enervaráa Phil Lynott allá dónde esté- y Ted
Nugent con Wild Brown a la
batería haciendo buena música y metiéndose sus ideas políticas en el taparrabos
como suele hacer el bueno de Ted
cuando no está en suelo americano, lástima que este tipo solo enarbole sus
rancias ideas cuando está frente a los suyos; curioso. El caso es que, tras la
actuación de The Nuge se desató una tormenta de dimensiones bíblicas que
hizo que se suspendiese el resto del festival. En el backstage se encontraba Steve
Morse, guitarrista de Purple,
con cara de circunstancias mientras que por allí rondaba el bueno de Mick, mini de cubata en mano, ajeno a
todo y disfrutando de la bebida gratis. Todo un crack. Pero esto es marginal.
Wild Mick Brown conduciendo ebrio un carro de golf en un club distinguido.
Volviendo a la reunión. Por
lo visto Don Dokken recibió una
oferta tan suculenta que contactó con sus ex compinches para comentárselo.
Según Don les han ofrecido un dinero
que tardarían años en ganar con sus actuales trabajos. No sabemos cuánto hay de
verdad y cuanto de espectáculo en estas afirmaciones, pero la realidad es que
la gira de reunión está en marcha. Se trata de seis conciertos en tierras japonesas
y un show de precalentamiento en EEU, concretamente en…Dakota de Sur; y grabándolo
para su posible posterior edición. Tranquilamente; no hay problema, hablamos de
Dokken.
Dokken: Cartel promocional Dakota.
Nos explica Don Dokken que han recibido un millón
de propuestas para actuar, grandes festivales como Sweden Rock, Wacken Festival o el M3 americano, pero que tiene claro que solo serán estos show japoneses
y nada más. Estima que la formación actual de Dokken, compuesta por Jon
Levin, Mick Brown, Chris McCarvil y él mismo, es la que debe seguir en
activo y la reunión solo va a ser algo puntual. No lo pongo en duda, pero no
puedo evitar que vuelvan a mi cabeza los comentarios del entrañable Bobby Blotzer sobre la fanfarronería de
la que siempre ha hecho gala Don.
Dokken formación actual: Don Dokken, Jon Levin, Mick Brown, Chris McCarvil.
Solo nos queda esperar lo que
deparará el futuro en los próximos dos meses. Hablando de Dokken todo puede dar un giro de 360 grados en cualquier momento,
con o sin contratos de por medio. En lo que a mí respecta solo puedo esperar
disfrutar de este momento, una especie de Deja
vu hasta llegar a esos especiales años de instituto en los que me grabaron
en cinta – Dios bendiga los cassettes- esa barbaridad que respondía al nombre
de “Back For The Attack” y que te
ponía los pelos de punta desde el trepidante inicio de “Kiss of death” hasta el épico final con “Dream warriors”. El principal problema al que nos enfrentamos los
que decidimos asistir a un concierto de Dokken
es el estado vocal de Don. Nuestro
querido cantante siempre tuvo un gusto especial por la melodía que se desprendía
incluso de su propio registro vocal, el problema es que ha perdido casi todos
sus registros. Imagino que fumar y beber como un cosaco no ayuda al siempre
sufrido oficio de cantante de Rock
–si hablamos de los cantautores, seguro que hasta ayuda a rebozarse en su
mediocridad-, incluso Don publicó en
los medios que se había sometido a una operación de cuerdas vocales para
mejorar su estado de voz en lo que luego resultó ser una intervención y
posterior quimio por problemas cancerígenos. Desde aquí le deseamos lo mejor a Don; el mundo necesita a Don Dokken, eso es seguro. Incluso hace
tiempo publicó un reportaje en el que se mostraba como una persona nueva y
cambiada, cansada de su status de cock
rocker y paseando tranquilamente por su jardín mientras meditaba en voz
alta sobre el sentido de la vida. Lo que desgraciadamente parece claro es que
ya no va a recuperar ese tono vocal que nos llenó de felicidad a muchos de
nosotros y que hace que pierdan muchos enteros las actuales interpretaciones en
directo de la mayoría de sus temas. En lo que a mí respecta lo tendría muy
claro, para los directos de la reunión debería dejar que Jeff Pilson hiciese las partes altas, el amigo Jeff sigue conservando una voz que, pese a no tener el toque
melódico que tenía la de Don, es
perfecta para estos menesteres. Como muestra aquí tenemos uno de los temas del
disco “Flesh & Blood” de su
grupo “War & Peace”.
War & Peace: "Kill for the love of God".
En fin, que no puedo por
menos que alegrarme de la manera tan mediática que ha utilizado esta reunión
para tomar forma y que espero ansioso las noticias que seguro irán apareciendo
en los próximos días; para bien o para mal. Y en el caso de que finalmente
suceda solo me queda cruzar los dedos para que hagan una gira europea, aunque
no toquen en España –asunto que descarto desde ya mismo con la formación
clásica-. Ver a Brown-Pilson-Lynch-Dokken
juntos encima de un escenario es un motivo perfecto para montar un viajecito a
cualquier lugar relevante.
Dokken con el entrañable Freddy Krueger. Vídeo oficial.