Una sección de nuestro colaborador "Metálico".
Los
conciertos de las fiestas.
Sobre todo en época estival, y
como atractivo fundamental de las
fiestas de las diferentes ciudades y pueblos que jalonan nuestra geografía, se
multiplican los conciertos gratuitos de grupos o solistas de mayor o menos
prestigio. Lógicamente, a mayor importancia de la localidad en cuestión suele
aumentar la relevancia del cartel.
Así pues, se juntan el
ambiente festivo, el tirón de los músicos en cuestión y sobre todo que la
entrada sea libre para acuda al evento una cantidad ingente de asistentes que
puede desbordar el recinto, mucho de los cuales apenas sí tienen costumbre de
acudir a conciertos. Además si el sonido deja bastante que desear, lo que suele
ocurrir con relativa frecuencia, y
aparece el viento empeorándolo aún más, pues lo que iba a ser una
actuación para disfrutar puede
convertirse en una auténtica odisea...
Ante esto me planteo cómo
podría evitarse estas situaciones, evidentemente programando los conciertos en
recintos amplios y adecuados con un sistema de sonido óptimo. Desde algunos sectores se cree que se podría
establecer un sistema de tickets de entradas, aunque estas fueran gratuitas o
con un precio testimonial para garantizar que los asistentes realmente estén
interesados en presenciar el evento. No sé, porque así se limitaría de alguna
forma el concepto de entrada libre, no sé. Porque lo que sí tengo
meridianamente claro es que los conciertos gratuitos como parte de unas fiestas
reportan innumerables beneficios, tanto para los grupos como para la audiencia;
por ello pueden y deben ser un espectáculo más que notable.
Metálico.