"Con el éxito de Barón Rojo sufrí mucho la inquina y envidias de algunos rockeros “oficiales”. A mucha gente le dolió que triunfara en el mejor grupo de Rock en España según muchos analistas, decían que no venía del Rock. Yo venía del mundo de la música y punto".
"Desde "Volumen Brutal" se rompió la historia. Imagínate si hubiéramos sido amigos hasta donde podríamos haber llegado. La realidad es que la visión de la vida era diametralmente opuesta entre una parte de la banda y la otra".
En plena vorágine de la gira treinta aniversario de la formación original tuve el honor y el placer de entrevistar a algunos de los componentes del grupo. Aquí os dejo la entrevista que José Luis Campuzano "Sherpa" concedió al Club de Adictos a Deep Purple HUSH y que tuve el gusto de llevar a cabo. La entrevista se perpetró el verano del 2011, aunque pienso que un par de años después sigue teniendo una inmediatez interesante. Espero que la disfrutéis.
- Cuál es tu primer recuerdo musical. En qué momento descubriste que
podías cantar y te interesó hacerlo.
La radio, con dos o tres añitos. La radio de mi casa, marca Iberia, me
atraía mucho. La música que ponían era la de la España de la postguerra, de los
primeros años cincuenta.
Los tangos que ponía mi madre en esa radio, la copla. Más adelante,
cuando empecé a ser un poco mayor me interesó la música que venía del
extranjero, de Estados Unidos o Inglaterra, el twist, Dúo Dinámico. Luego grupos como los Pequeñiques, Relámpagos, Lonestar,
Los Salvajes, Los Brincos...y cuando aparecieron los Beatles descubrí que la música era mi mundo y mi vida.
- ¿Qué gustos musicales tienes hoy en día? ¿Difieren en algo de
entonces?
Muy diversos. Lo cierto es que estoy un poco cansado de la música, no
como arte sino como negocio. Soy capaz de apreciar cualquier tipo de música
bien hecha. No me interesa para nada la música “inculta”, esa guitarrita
rumbera que, sin ánimo de ofender a nadie, me da la imagen de una España que no
quiere mirar al exterior y que se mira al ombligo. No es que la desprecie, es
que representa a una especie de cultura del no esfuerzo, del “dámelo todo hecho
porque sí”. Por supuesto que todos tenemos derechos, a una vivienda y demás. Pero los derechos no
te los da el estado porque sí, hay que trabajarlos y ganarlos. Hay que luchar
por ellos, y no necesariamente marchando a la plaza de Sol a que papa Estado te
lo de todo hecho y a armar jaleo.Opino que se debe luchar de otra manera,
interna e individual. Tienes que protestar contigo mismo, pulir tus defectos,
la revolución es contigo mismo y todo lo
que no nazca de ti y de tu propio convencimiento está abocado al fracaso, mira
la revolución rusa, la cubana,etc. Al final represión brutal y puta miseria.
- Tocas el contrabajo ¿Has cursado estudios musicales?
Estudié contrabajo tres años en el conservatorio y no me sirvió para
nada, para muy poco. El conservatorio es una de las instituciones que habría
que cerrar, que reinventar, como otras muchas cosas en España que están
obsoletas y caducas. Habría que revolucionar y adaptar su funcionamiento a los
nuevos tiempos. No puedes estar estudiando durante cinco años solfeo, porque no
es necesario. Si dentro de una clase en la que hay músicos que quieren avanzar
aparecen la señorita Paqui o Antonia, o....el señor Mariano ( para que no se
enfaden las feministas) (risas ) que van por que tienen una hora libre, o son
jubiletas, te lastran totalmente. Para esta gente debería haber otro tipo de
instituto o clase para aprender solfeo o lo que sea. Incluso creo que a día de
hoy sigue funcionando de esta manera, no se distingue del músico que quiere
dedicarse plenamente o de modo profesional, del que va en un plan más relajado.
Lo que aprendí en cinco años lo podría haber aprendido en seis meses.
Y con el contrabajo pasa igual, tuve a un profesor que era muy majo
pero como profesor era bastante inútil. En tres años solo cogió el contrabajo
una vez, me lo enseñaba todo de palabra, y porque le piqué en su amor propio,
entonces me demostró que lo tocaba muy bien. Era como un funcionario y no
estimulaba nada a los alumnos, durante los tres años que asisti a clase, jamas
se cambiaron las cuerdas al contrabajo, lo que te da una idea de la dejadez que
imperaba..
Otra de las cosas que me disgustó del conservatorio es que no había ni
un simple lutier, en una institución como está, algo increíble. Eso sí, había
ujieres por doquier, que se tocaban los bolos todo el día. En general del conservatorio tengo un recuerdo pésimo. Quitando a dos
profesores, Encarnita y Rafael, encantadores, geniales y con un
talento increíble, lo demás lo borraba del mapa.
- ¿Has usados tus estudios de
contrabajo en tu vida artística?
Me dio algo de técnica, capacidad para leer partituras. Aunque
realmente me ha servido de poco. Si esos cinco años los pudiera haber invertido
en cualquier universidad musical estadounidense Berkley, Nashville..... seguro
que lo hubiera aprovechado mucho más.
- En lo que respecta a estos primeros años sacaste hace tiempo el
disco “Los Primeros Éxitos De Un Barón
Rojo” que recopila grabaciones tuyas de los años setenta.
No, eso lo sacó un sello (Rama Lama) sin mi consentimiento oficial. A
día de hoy no me ha dado ni un puto duro, ni un simple disco de regalo. Las
grabaciones eran de GMA records, de Marfer, singles y grabaciones de aquellos
años.
- Indagando en tus comienzos aparece el grupo Top Ten.
Ese fue mi primer grupo, tenía trece años. Tocábamos en discotecas
todos los fines de semana y nos pagaban tres mil pesetas, que era una pasta
para nosotros en aquella época. Yo tocaba con una Fender Jaguar y un
amplificador Fender DeLuxe que tenía un sonido precioso nos lo prestaba un
chaval de familia rica al que su papa le habia dado el capricho de comprárselo.
Llevábamos un repertorio muy variado, canciones de los Kinks, Spencer Davis, rocanroles de Chuck Berry, Beatles, Rollings Así me sorprende cuando Rosendo (que realmente no me conoce) en
una entrevista dijo que yo no era un tío del Rock, que era como una especie de
advenedizo que iba de “ Profeta del Rock” y que nunca me creyó. Y yo pienso "ni falta que hace colega” no me quita el sueño lo que pienses de mi. Con doce
años ya estaba tocando Rock n Roll encima de un escenario. Desgraciadamente aquí hay mucho
comisario político que te da o no el carnet de “rockero autentico”
- Creo que poco a poco vamos superando lo de las etiquetas y los
prejuicios musicales. Lo que es bueno lo es venga de donde venga.
Con el éxito de Barón Rojo
sufrí mucho la inquina y envidias de algunos rockeros “oficiales” de la secta
rockera. Todo se puede convertir en una secta, el rebaño de los rockeros, el de
los punkis y yo no soy de rebaños, si quieres puedo ser una oveja suelta, una
oveja descarriada pero libre. A mucha gente le dolió que triunfara en el mejor
grupo de Rock en España según muchos analistas, decían que no venía del Rock. Yo venía del mundo de la música y punto. He estado tocando en conciertos
desde los trece años y he formado parte de todo tipo de grupos musicales, a los
que estoy totalmente agradecido. He tocado con solistas melódicos, con
orquestas, grupos de jazz, fusión rock, con Los Chorbos, un grupo gitano cojonudo, (Fundado por Manzanita ) que me quería y yo a ellos un montón, allí era un gitano mas. Todo eso te va dejando un bagaje fabuloso, todo suma. Lo otro es casi
de cerrazón mental.
-¿Cómo percibías la escena musical del Madrid de esos años sesenta?
Muy viva, la recuerdo con mucho cariño. Había mucha ilusión e
inocencia. Si a un disc jockey le gustaba una canción te la ponía sin más, no
te ponía “el cazo”. Era menos profesionalizado pero más bonito e ingenuo. Había
menos infraestructura, esto último sigue pasando hoy día. En España ha habido
siempre una infraestructura deficiente, en esto no hemos avanzado realmente. Recuerdo con cariño la virginidad de las cosas. Pegar la nariz al
escaparate de Maxi en Leganitos, o en Garrido en la calle Valverde, y se te
caía la baba viendo en su stand una Fender Telecaster o una batería Sonor. Era
como ver un tesoro.
-¿Recuerdas al oyente abierto a cualquier tipo de música?
Lo cierto es que había mucho prejuicio. Te llamaban “yeyé”, que se
puso de moda por el “yeah yeah” de los Beatles.
Luego vino el tema "La Chica Ye Yé",
que es un tema estupendo. No había tanta represión como si opresión. En los pueblos a más de uno le han
tirado al pilón. Había que ir con cuidado si tenías el pelo largo, en seguida
el guardia civil te miraba con malos ojos. También es cierto que, poco a poco,
nos estábamos abriendo a los nuevos aires que venían del extranjero.
- Con Top Ten estuviste
actuando en Madrid y en el País Vasco.
Eso fue cuando me destinaron con mi empleo en Telefónica. Yo iba
camino de ser escultor, y creo que no lo habría hecho mal. Había perdido otros
cinco años de mi vida en un campo de concentración que se llamaba Institución
Sindical Virgen De La Paloma, a las seis de la tarde te daban la libertad y te
ibas a tu casa pero hasta esa hora era un campo de concentración con un régimen
horrible. Aunque es cierto que todo lo malo tiene su parte buena. La vida es
como subir al Everest, como digo en esa canción, la vida tiene sus cosas buenas
y malas. De mi estancia en esta institución guardo malos recuerdos aunque es
verdad que me ayudó a adquirir unos conocimientos, por lo que estoy agradecido.
Me considero una persona con nivel cultural mas que aceptable, informada, con
capacidad para escribir de modo correcto (ortográfica y sintácticamente) y con
unos modales básicos. Es que en la actualidad ves que la gente escribe emails y
notas con faltas de ortografía básicas y en general hay una incultura
grandísima,
El caso es que quería hacer dibujo publicitario porque no me quería
dedicar a lo que había estudiado en La Paloma, mecánico ajustador matricero, que en su día no me
valió para nada aunque es cierto que actualmente me ha servido para hacer esculturas. Me matriculé en la Escuela De Artes Y Oficios Aplicados para
cursar dibujo y una de las asignaturas era modelado. En seguida me sentí
identificado con la escultura y descubrí mi vocación. Nuestro profesor (que
resultó ser el subdirector de Bellas Artes) en seguida me enganchó y me dijo
que al próximo curso entraba en Bellas Artes, si o si, porque lo cierto es que
se me daba realmente bien. Desgraciadamente aprobé unas oposiciones en Telefónica
y me destinaron a Beasain, pueblo que adoro, como todo el País Vasco. Esto
truncó mi carrera como escultor. Ahora la he vuelto a retomar. Acabo de exponer
en el Centro Cultural de Villaviciosa y estoy preparando otra para el año que
viene. A partir de ahora la música va a ser mi hobby y la escultura mi “profesión”
-También colaboraste con la orquesta Los Cisnes. ¿Qué nos puedes contar de esta experiencia?
Era una orquesta de Alsasua, de las mejorcitas,tocábamos éxitos de la
época, desde "Alguien Cantó" de Matt Monro o "Un Rayo De Sol" de Los
Diablos hasta temas de Chicago,
Blood Sweat and Tears o de los Pop
Tops, era un repertorio de orquesta. Ahora bien, éramos muy serios y
profesionales. La orquesta llevaba un trio de metales buenísimos ,teclados con
Chema, José Mari, que era un músico
y un tío cojonudo, el líder de la banda, yo tocaba el bajo, José Luís Olaizola tocaba la guitarra y
cantaba fenomenal, y en la batería José
Cruz, un chico de diecisiete años que tocaba de la hostia. Un gran grupo,
yo aprendí y disfruté un montón. Hicimos todo un verano por la ribera de
Navarra y me divertí como en mi vida. Tenía diecinueve años y estoy muy
agradecido a aquella época.
-Después vino tu paso por Los
Módulos. ¿Qué recuerdas de aquello?
Módulos fue un grupo
en el que tuve la suerte de caer sustituyendo a un amigo. Tocaba el bajo. Ahí
aprendí mucho del Rock Sinfónico y lo que es tocar con un equipo de gran grupo
para conciertos y festivales. Ya llevábamos nuestros roadies y éramos un grupo
profesional.
Actuamos mucho por Andalucía, Galicia. Aprendí muchísimo, es bagaje
que te vas quedando y que hace que puedas aportar en las diferentes bandas
posteriores.
-¿Qué tal la grabación del disco que hiciste con Los Módulos?
La grabación fue genial pero la gestión para editarlo en disco
nefasta. De ese disco al final se aprovechó quién no debía hacerlo, nosotros no
vimos un duro. Es un disco precioso que salió en serie barata, nos lo quitaron
de las manos. Es curioso, algunos de los que se aprovecharon de esto murieron
violentamente, en accidentes de tráfico. Es extraño y siempre me ha estremecido
pensar en ello.
-No era tu primera experiencia en un estudio de grabación ¿Cómo fue tu
primera vez en un estudio?
En unos estudios por la calle
Cartagena. Ver un estudio de ocho pistas me pareció acojonante, poder grabar y
mezclar pistas de diferentes instrumentos era una experiencia preciosa y llena
de inocencia.
-¿Por qué dejaste Los Módulos?
El caso es que la ilusión se fue apagando. Nos desmoralizó mucho que
ese disco no saliera a la venta en condiciones. Las compañías decían que el
grupo estaba acabado, aunque también decían que el disco era muy bueno. Otra
vez los prejuicios de siempre. Aun seguimos siendo muy buenos amigos.
-En alguna de tus canciones ya hablas de esto, pero dinos ¿Por qué ese
apelativo de “Sherpa”?
Por curioso que te parezca, esto es algo que no he contestado nunca.
Bueno, yo hacía montañismo, soy montañero de corazón. Me puse este nombre
porque me impactó la epopeya del Sherpa
Tenzing Norgay y Sir Edmund Percival
Hillary cuando llegó a la cima del Everest. Tengo el libro La Montaña de Maurice Herzog, uno de los santones del alpinismo francés. Para mí
la montaña es mi símbolo, la luz y la liberación.
Sherpa significa el
hombre o los hombres que vienen del
este. Era un pueblo que huía de la opresión de los mongoles y se asentaron en
sitios altos y de difícil acceso. Lo cierto es que el punto cardinal Este tiene
mucho significado para mí, yo nací en un barrio que era la Carretera del Este,
cerca del cementerio de La Almudena.
Sin embargo, si hoy tuviera que volver a ponerme un nombre, no
escogería éste. Los nombres te marcan para siempre. El sherpa es un servidor,
un guia un tipo del que se valen los
ricos para subir a la cumbre. A mí esto me ha marcado, sobre mis espaldas se ha
subido mucha gente para llegar a según qué cumbres y luego no me han agradecido
nada, he sido siempre como el que arrima el hombro. Ahora me pondría Dios, como Dio pero con más fuerza todavía, para ser el más de todo, toma ya
(risas).
-Antes de hablar de Barón Rojo
debo decirte que nos sentimos agradecidos y privilegiados al poderte
entrevistar para nuestra revista Hush.
Déjame decirte que la palabra Hush la escuché en Beasain, en un disco
de una sinfonola que había en los billares, era el título de una canción que me
encantaba y ahí descubrí a un grupo llamado Deep Purple. Para mí Deep
Purple es el grupo. Sé que ha habido grandes bandas como Zeppelin, Allman u otras acojonantes,
pero si me preguntas por un grupo de Rock, o incluso heavy, yo siempre diría Deep Purple. Para mi son los Beatles
del Rock duro.
-¿Cómo se formó Barón Rojo?
¿Cómo se fraguó el disco "Larga Vida Al Rock n
Roll"?
A grandes rasgos. En el Conservatorio yo era compañero de pupitre de Armando, Carlos se fue en el segundo
año porque no hacía más que discutir con nuestra profesora Encarnita. Armando y yo seguimos hasta quinto curso. El caso es que
yo tenía muchas ganas de tocar en un grupo de rock, aunque la verdad es que no
he sido nunca de salir por la noche, ir a clubs a relacionarte y todo eso, era
más de estar en casa. Yo le dije a Armando
que si necesitaban a un bajista para hacer este estilo de música me llamaran.
Ellos tuvieron sus líos con Coz y me
llamaron para hacer un verano de conciertos como Coz, buscamos a Hermes a
la batería e hicimos las galas. Me lo pasé muy bien, no había más interés que
el de cobrar nuestras actuaciones y quedamos como amigos y bien. Cuando llegó
la hora de separarnos dije (además recuerdo que fui yo el que lo hizo) en el
local que era una pena que nos separásemos con la buena química que teníamos.
Los demás pensaban lo mismo, por lo que pensamos en la posibilidad de montar
una nueva banda, no se podía usar el nombre de Coz por derechos legales y eso.
Yo tenía el tema "El Pobre" escrito en Beasain nueve años antes, se lo puse a los hermanos, que en eso tengo que decir que siempre han sido muy agradecidos cuando escuchaban algo que podía valer y te animaban, y fue la primera canción que montamos. Luego vino Armando con el riff de "Con Botas Sucias", entre Carlos y yo hicimos la melodía, luego Armando trajo la letra. Apareció por ahí Vicente Romero, nos metió en Chapa, grabamos el disco y… pelotazo. Diseñé el logotipo del que luego se apropió Zafiro sin pagarme, aunque lo tengo registrado en la propiedad intelectual. Lo cierto es que Zafiro se adueñó de todo. De ahí salió "Barón Rojo", hicimos disco de oro, de platino. El pelotazo.
Yo tenía el tema "El Pobre" escrito en Beasain nueve años antes, se lo puse a los hermanos, que en eso tengo que decir que siempre han sido muy agradecidos cuando escuchaban algo que podía valer y te animaban, y fue la primera canción que montamos. Luego vino Armando con el riff de "Con Botas Sucias", entre Carlos y yo hicimos la melodía, luego Armando trajo la letra. Apareció por ahí Vicente Romero, nos metió en Chapa, grabamos el disco y… pelotazo. Diseñé el logotipo del que luego se apropió Zafiro sin pagarme, aunque lo tengo registrado en la propiedad intelectual. Lo cierto es que Zafiro se adueñó de todo. De ahí salió "Barón Rojo", hicimos disco de oro, de platino. El pelotazo.
-¿A quién se la ocurrió este nombre para el grupo?
Hicimos una lista muy larga, con nombres buenos y de lo más peregrino.
Siempre lo digo, que me perdonen Paco
y Fortu, pero uno de los nombres que
propuse era Obús. Soy muy guerrero y
me atraían nombres como Tanque, Obús,
incluso puse Cañón. Otro nombre era Cuatro Marchas, o La Gallina De Hojalata… Te digo una cosa, creo que si Barón hubiéramos salido como Gallina De Hojalata tocando lo que
tocábamos, hoy sería un nombre acojonante.
Otro error que cometimos fue ponernos el nombre de un muerto, de un
mito. Porque al final somos héroes muertos, tenemos una aureola y tal pero Barón Rojo es un grupo que está muerto.
Y aunque el enemigo lance salvas en tu honor estamos enterrados, queramos o no
queramos.
-La banda no ha funcionado como debiera.
Se ha desacreditado mucho. Ahora, el legado está ahí. Pero también
está el legado del Barón Von Richthofen,
héroe de la aviación, caballero del aire y el hombre se dedicaba a matar como a
conejos a los otros. Es verdad que, dentro de que era un guerrero, admiro su
parte legendaria, un avión contra otro y ya está. Incluso tenían un punto
romántico de caballerosidad, si tu ametralladora se atascaba, tu contrario te
daba la opción de volver a prepararla para defenderte.
Este aviador es un mito muerto y Barón
Rojo es exactamente igual, otro mito muerto. Bueno, como mito está vivo pero
como grupo está muerto.
-En las composiciones el binomio José
Luis Campuzano – Carolina Cortés nos ha dado las mejores letras que he
escuchado en este país.
Carolina tiene un
talento extraordinario como escritora y actriz, mucha gente no sabe que es actriz
diplomada, es la persona que dice el verso del teatro clásico español mejor que
nadie. Dado que era mi compañera y mi mujer aproveché su talento para escribir
letras. La mayoría ideas mías pero pasadas por su tamiz y talento literario.
Esto conlleva un doble talento, ya que una cosa es que ella haga sus propias
letras (que las tiene y muy bonitas) y otra es que yo le diga sobre lo que
quiero que hable y que introduzca en el verso tal o cual palabra, y ella pueda
hacerlo. Conjugar adecuadamente palabra y fonética en una letra es muy difícil
y ella podía con todo eso y más. Esto
fue un extra para la banda.
-Pienso que más que un extra fue algo básico para la banda. Barón Rojo puede mirar letristicamente
a cualquiera o superarlo.
Más quisieran muchos grupos extranjeros tener nuestras canciones.
Cualquier grupo americano de esta onda que sacara nuestras canciones en inglés
estoy seguro de que obtendría una gran aceptación y un resultado óptimo.
-Luego llega "Volumen Brutal",
algo así como la piedra angular. ¿Mientras lo hacíais erais conscientes de lo
que estabais creando? ¿Qué sentimientos tienes con este disco?
En absoluto éramos conscientes de su futura trascendencia.
Desgraciadamente tengo recuerdos malos porque entonces fue cuando nos peleamos
y realmente ahí se murió Barón. El
grupo se fue arrastrando hasta que me acabé marchando del grupo. Ahí afloraron
los malos sentimientos, los celos artísticos, los problemas económicos y los
derechos de autor. Desde ese momento se declaró la hostilidad entre las partes
del grupo. Desde ahí fue como un “a cara de perro” hasta el final.
-Lo grabasteis en Londres, en Kingsway Recorders, propiedad de Ian Gillan. ¿Coincidisteis con él en
las grabaciones?
No, él estaba de retiro por Escocia, estaba deprimido porque tenía
muchos problemas de garganta. Estaba su mánager, que fue el que lo gestionó
todo. La letra de "Resistiré" la
hicimos Carol y yo en el despacho de
Gillan una hora antes de grabarla. A
veces la inspiración llega de la manera más extraña.
-¿Crees que la música de Purple
o Rainbow pudo influir de alguna
manera en vosotros?
Por supuesto, eran una influencia para nosotros. Incluso dentro del
disco, la canción "Concierto para Ellos"
cuenta con un teclado maravilloso
interpretado por Colin Towns, que
era el teclista por entonces de la banda de Gillan.
-Colin Towns, magnífico
teclista, hoy tocando música jazz con enjundia ¿Cómo surgió esa colaboración?
Basicamente le contratamos, se colocó el teclado encima de una silla,
le dijimos los acordes, escuchó un poco la cinta con la canción y metió en un
momento su parte. Una introducción muy bonita, muestra de su clase y buen
hacer.
-También tocó en ese disco Mel
Collins.
Con Mel Collins un día, en
una borrachera en Galicia, me dijo que estaba bebido y que los borrachos siempre dicen la verdad.
Estábamos de fiesta y al caso es que me comentó que había tocado con Rolling, con Clapton, con King Crimson,
pero que con quien mejor se lo había pasado tocando fue con Barón Rojo.
-Con este disco tocasteis en el extranjero, en festivales como el de
Reading. Conocisteis a gente como Bruce
Dickinson. ¿Qué nos puedes contar de esa gira?
Conocí a Lemmy, con él tuve
bastante amistad, muy buen rollo. Esa gira estuvo bien. Los ingleses son muy
profesionales pero algo cutres, trabajamos con los pipas de los barrios bajos
londinenses, que no veas como eran. Grandes bebedores pero unos profesionales
del copón, puntuales y estrictos con todo lo relacionado con la logística de la
actuación.
-También has tenido relación con Michael Schenker. Estás acreditado en la canción "Red Sky" de su disco "Built To Destroy".
Ahí me ningunearon. Schenker
me dijo que me estuvieron buscando para incluirme en la sociedad inglesa de
autores, al final pusieron algo así como José,
y la canción realmente era de Schenker y
mía, aunque luego resulta que la firmaron todos. De todos modos lo di por bien
empleado, haber tocado durante nueve horas con Schenker en su piso para mí fue una experiencia inolvidable.
-Tiene fama de carácter muy variable.
En realidad es muy infantil, una persona inmadura, lo que no quita
para que sea un artista excepcional. Para mí es uno de los mejores guitarras
que he escuchado. Es, junto con Clapton y
Gilmour, mi guitarra preferido.
-¿Mantenéis el contacto?
No, fui a verle cuando tocó en Madrid, en la sala Aqualung. Le propuse
hacer un solo en el disco que por entonces estaba grabando y lo cierto es que
no se mostró muy interesado, me dijo que hablara con su mánager que estaba en
Arizona, vamos, un despropósito. El mismo Schenker
al que Hermes y yo hacíamos compañía
en Londres y le invitábamos a cenar cuando estaba más solo que la una. Y, ya
ves, luego viene aquí y que llame a su mánager. Cuando la verdad es que tenía
intención de pagarle por la colaboración, no busqué un rollo desinteresado. Así
qué olvidé la idea
-"Volumen Bruta" lo
grabasteis en inglés ¿A qué se debió esa decisión?
Fichamos con Kamaflage Records, una compañía pequeña pero que tenía
como estrella a Elton John, con eso
te lo digo todo. A su vez licenció con RCA Victor japonesa y allí metimos un
buen pelotazo, de hecho mandaron a unos periodistas japoneses al Hammersmith a
entrevistarnos cuando tocamos allí. Pudimos haber actuado en el Budokan, como
todos los grandes, pero nuestra empresa Zafiro, en una nueva muestra de su pésima
gestión, no quiso invertir para que esto se hiciera.
-¿Estás satisfecho con la versión en inglés, su traducción y
grabación?
La traducción fue la mejor que se podía hacer, por la mejor traductora
que hay y que es Carolina Cortés, su
nivel de conocimiento de la lengua inglesa hablada y escrita es excepcional. Bruce Dickinson admiraba mucho a Carol, no se creía que fuera española,
por su perfecta pronunciación y discurso inglés. Llegó a decir que nuestras
letras parecían Shakespeare y que
ojala Iron Maiden tuvieran letras
como esas. En nuestras letras había un componente político que los ingleses
admiraban, ellos hablaban mucho del amor, el sexo, el diablo… pero no de
política y, como no habían sufrido una represión como la de nuestra dictadura,
les sonaba como muy revolucionario y rebelde. Los disc jockeys que nos
entrevistaban en Manchester alababan canciones como "Termites" porque nos atrevíamos a cuestionar al ayuntamiento.
-Las letras de Barón Rojo
siempre han sido esplendidas, profundas y variadas. A nivel político dabais palos con mucha
ironía. Además, daba la sensación de que podíais meteros en la cabeza de la
persona hacia la que iba dirigida la letra.
Eso es porque son letras muy sinceras y que hablan de sentimientos. Si
expresas tus sentimientos de manera honrada y sincera, eso no pude fallar. Y
eso cala y llega. Tienen ese punto autobiográfico, como "El Pobre" o "Se Escapa El
Tiempo" de mi vida. Yo he hecho mucho autostop toda mi vida, en la mili lo
hacía porque seguía viviendo en Beasain. Hay una anécdota muy cachonda, estaba
vestido de militar del ejército de aire y me había dejado un coche a la entrada
de Burgos, pero llevaba tiempo y no paraba nadie más, hasta que apareció creo
que un Land Rover en el que, según se iba acercando, me di cuenta de que iban
conduciendo Víctor Manuel y Ana Belén. Yo digo, genial, estos me
paran, que son del pueblo, concienciados y todo eso…y ni me miraron siquiera (
risas ). Sin embargo un camionero igual te para y te invita a comer o a dormir
en la litera. En fin.
-Luego vino "Metalmorfosis".
Disco que se publicó sin dos grandes canciones de Barón, como eran "Herencia
Letal" e "Invulnerable". ¿Por qué no
se publicaron en el disco?
Hubo muy mal rollo. Por entonces pasábamos temporadas enteras sin
hablarnos. Por medio de un “traductor” nos decíamos lo que opinábamos de las
canciones, en plan constructivo, pero sin dirigirnos la palabra. Una situación
muy triste.
-Nueva gira europea. Compartisteis escenario con Gary Moore en el Festival de Brujas ¿Qué pasó en ese concierto?
La verdad es que nunca me ha caído bien Gary Moore, me pareció un macarra irlandés, un macarra que tocaba
como Dios, pero macarra y maleducado
a fin de cuentas. Nos miraba por encima del hombro. En este festival se lo montaron muy mal. Llevaba lloviendo once horas
sin parar, el estadio de Brujas estaba inundado, eso era un lodazal de gente
animando sin desfallecer a grupos como Anvil,
Motorhead y otros. La organización era mala, el escenario estaba mal
montado, se colaba el agua por todos lados, se cayeron focos, nos daban
descargas al cantar, a mí me daba un viaje cada vez que me arrimaba al micro
pero había que cantar, ya sabes. Carlos
cantó a dos metros del micro y yo le decía “Hombre, arrímate y canta”. Cuando Gary Moore se dio cuenta de todo esto,
y era el que cerraba el concierto, decidió salir en ese instante. Así que allí
nos tienes con el organizador llorándonos en el camerino pidiendo que dejáramos
que Gary saliera antes que nosotros.
Dijimos que no, aunque al final cedimos. Pero te digo una cosa, si hubiera
venido Gary Moore y nos lo hubiera
pedido como Dios manda, o con
cualquier excusa pero como un caballero, hubiéramos accedido sin problema. Sin
embargo tienes todo el rollo del "aquí mando yo y los españolitos de mierda" que
apesta.
El tema es que salió a tocar. Llevaba a Don Airey en su banda, que empezó con una intro de teclado muy
bonita en medio de la lluvia. A las dos canciones explotaron unos focos y Gary Moore dijo que se acabó y que se
largaba del escenario. La gente pitando y lanzando de todo. Cuando se iban
estábamos para salir en el camerino justo detrás del escenario y resulta que Airey se había dejado con las prisas un
pedal del teclado. Mandé a un pipa para que se lo devolviera corriendo, pero el
tráiler ya había salido y no pudo ser, con lo que me quedé con el Pedal de Don Airey, marca Pearl.
También repetimos movida en la Casa De Campo en las fiestas. Igual,
que nos echaban del escenario, que tenían que ensayar ellos. Teníamos uno de
seguridad, que no veas como repartía el amigo, y que estuvo a punto de llegar a
las manos con el personal de seguridad de Gary
Moore. En esta ocasión no nos
respaldó la organización, nos tuvimos que bajar
los pantalones ante el guiri prepotente
de turno. El caso es que el concierto no les salió bien. Tocaron de
teloneros los Shy, que se
comportaron como una panda de impresentables; en fin, un desastre.
-Esta pregunta es de un buen amigo mío, periodista, que quiso venir a
la entrevista pero no pudo ser. ¿Es cierto que existió la posibilidad de hacer
una gira de teloneros por Estados Unidos con AC/DC?
Completamente cierto. No quiso Zafiro. Había que poner siete millones
de pesetas y no quiso invertirlos. El gran problema es que nosotros no nos
llevábamos bien, si hubiéramos estado unidos en el grupo lo hubiéramos puesto
de nuestro bolsillo y adelante. Era la ocasión de nuestra vida. Cuarenta
conciertos, todas las entradas vendidas, la última actuación en el Madison
Square Garden. Nos permitían vender nuestro merchandising y nuestros discos.
Pero no pudo ser. Primero por culpa de Zafiro, que no quiso invertir; con la de
millones que han ganado con nosotros estos impresentables, no nos han dado
nada, de hecho aún nos deben cuatro o cinco discos de oro a cada uno que nos
prometieron porque oficialmente están concedidos por la AFIVE. Pero los grandes
culpables fuimos nosotros porque de haber tenido un poco de visión lo
hubiéramos puesto entre nosotros y seguro que nos lo llevamos de calle. Esto
fue en la época del "For Those About To
Rock".
También les dijimos que no a Whitesnake,
pero esta vez lo decidimos nosotros porque nos coincidía con la grabación creo
que de "Metalmorfosis" y no pudo ser.
El caso es que nos buscaron ellos, Cozy
Powell y Coverdale estaban de
acuerdo en que fuésemos sus teloneros. Una lástima.
-¿Algún otro tren que piensa que debíais haber tomado? Es que estabais
en la posición el momento y el lugar adecuado.
La posible gira de Japón, el concierto en el Budokan, donde han tocado
todos los grandes. Camilo Sesto, que
por entonces estaba en lo más alto, le dijo a nuestro mánager Jesús que Barón Rojo estaba en todos los escaparates de las tiendas de discos
niponas.
-¿Os planteasteis grabar "Metalmorfosis"
en inglés?
Sí, lo intentamos pero ya estábamos algo desilusionados. Quisimos
grabarlo en Audiofilm, un estudio madrileño. Empezamos a grabar pero yo estaba
acatarrado y decidimos dejarlo un par de semanas, luego la cosa se enfrió.
Zafiro tampoco puso mucho entusiasmo y "Metalmorfosis"
se quedó sin su versión inglesa. No obstante tengo todas las letras traducidas
por Carolina.
-También tuvisteis una oferta de EMI ¿Qué pasó?
Aquí Zafiro nos asesinó. Otra oportunidad de oro, merecedora del
rencor eterno a cuatro pringaos de la compañía. No nos dejaron marchar, se
agarraron a un contrato leonino que teníamos y que hoy día es inconstitucional.
Nos obligaron a estar cinco años más con ellos. Hicieron una cláusula de
retracto y tanteo. Además dimos con un abogado que, lejos de defender nuestros
interese, nos timó bien timados. Se nos puso todo en contra, fue como abrir la
fosa y enterrar allí al cadáver.
-En medio de todo esto está la grabación del directo "Barón Al Rojo Vivo". ¿Qué recuerdos
tienes de esta grabación?
Malos, el Pabellón tenía una acústica muy mala, aquello sonaba fatal.
Fue muy difícil para mí cantar en aquellas condiciones, sufrí mucho cantando
porque oía rebotes por todos lados. Era complicado ecualizarse de la manera
correcta.
-Está editado en dos discos: "Barón
Al Rojo Vivo" y "Siempre Estáis Allí".
¿Por qué se editó así? ¿Editar un triple disco?
Pues porque no cabía en un solo disco. ¿Hacer un triple? No sé. Lo
cierto es que la ventas de este álbum fueron muy buenas, fue doble disco de
platino. Con este disco ganó mucho dinero esta compañía que luego no nos quiso
dar ni un duro.
-¿Se llegó a grabar en vídeo?
Si, se grabó un vídeo. Lo gestionó Alfonso Arteseros, una persona majísima, se ocupó de la grabación
llevando cinco cámaras y a la hora de la verdad Zafiro no quiso asumir los
gastos y se paró el proyecto. Así que tenemos un material que se ha echado a
perder, en el sentido literal de la palabra. Las cintas las tenía Alfonso y, muy a su pesar, se han
deteriorado todas. Soy muy amigo de Alfonso y si lo dice es que es así. Solo se
salvaron cuatro vídeo clips que hizo y nada más.
Ponerte Barón Rojo es que
te salgan las cosas mal. Nos teníamos que haber llamado Gafón Rojo.
-Por entonces hicisteis vuestra primera gira por Sudamérica ¿Qué tal
fue esa gira?
Tocamos en Argentina,Venezuela, Colombia. De ahí sí tengo recuerdos
muy bonitos. A México no fuimos porque unos días antes de ir el gobierno lo
prohibió, parece ser que en otro concierto de rock habían muerto cinco personas
y la cosa se fue enfriando. Pienso que también nos hubiera ido muy bien. A
quien si le vino bien esto fue a Ángeles
Del Infierno que son los amos allí. El caso es que en México las compañías simplemente fusilaban nuestros
discos, con portada y todo, los vendían como piratas y ya está. Tengo buenos recuerdos por conocer esos países y a la buenísima gente
que hay allí, ver lo que sufre la gente en Colombia y sin embargo lo vitalistas
y hospitalarios que son. Me encontré gente maravillosa.
-"En Un Lugar De La Marcha"
también es un gran disco. Me sorprende y entristece que vuestra relación
personal se deteriorara desde tan pronto. ¿Problemas de ego? ¿De ver la vida de
manera distinta?
Desde "Volumen Brutal" se
rompió la historia. Imagínate si hubiéramos sido amigos hasta donde podríamos
haber llegado. La realidad es que la visión de la vida era diametralmente opuesta
entre una parte de la banda y la otra. El caso es que es así, el destino es lo
que es. Es una prueba para los guerreros. Para mí la prueba fue saborear las
mieles del éxito y que me quitaran el caramelo de la boca. El caso es que me
han quitado muchos caramelos de la boca en mi vida y esa es mi prueba como
guerrero. A veces lo llevó bien y otras mal
pero es de aquí de donde tengo que aprender. Lo triste es que si
hubiéramos sido amigos, pero amigos de verdad, este grupo habría sido imparable.
Había una gran capacidad creativa.
-Además de gran grupo, prolífico. Disco-gira por año durante nueve
años y con una calidad envidiable.
"Volumen Brutal" lo compusimos
en un mes y lo grabamos en catorce días, en versión inglesa y española. Mira
hasta donde podríamos haber llegado. También te digo que teníamos una ética de
trabajo dura y profesional, ensayábamos cada día unas diez horas.
-Quería tu opinión de dos canciones del disco "En Un Lugar De La Marcha", concretamente "Chicos
Del Rock" e "Hijos De Caín". ¿Qué
nos puedes decir de ellas? ¿Estás satisfecho?
Grandes canciones, muy bonitas. Claro que me siento satisfecho de
ellas, es como si me preguntas por un hijo, que te voy a decir, que le quiero
mucho. Estoy muy contento y orgulloso de todas las canciones que he compuesto.
-¿Cómo se os ocurrió la portada del disco?
Se me ocurrió a mí. La mayoría de las portadas de Barón eran ideas mías, incluso algunas las hice yo, la de "Larga Vida Al Rock n Roll" era mía, mucho mejor
que la que nos puso Zafiro para el disco y que me parece realmente mala. Tengo
el original en mi casa. La de "Un Lugar
De La Marcha" fue pintada por Ángel Ortiz,
era como un Don Quijote en el
espacio, basada en un boceto mío con la nave espacial, la lanza y todo eso
-¿Cómo eran los directos de Barón
Rojo en esa época? ¿Le dabais importancia a la infraestructura, al
escenario o la imagen?
El sonido era malo. A nivel de infraestructura sufrimos mucho siempre,
tengo los oídos tocados por el volumen que se usaba, los equipos chungos, los
acoples. Ahora los equipos han mejorado bastante y con el pinganillo a la hora
de cantar te salva mucho la voz, pero antes la sensación era un poco caótica.
Nunca le dimos importancia a la imagen. Pudimos pecar de demasiado
dejados. Lo que pasa es que nos encontrábamos arropados y “sobrados” con
nuestra música. Es como el tipo que es muy guapo y entonces va un poco
desarreglado cuando lo cierto es que si eres guapo y además te afeitas y te
duchas estarás mucho más guapo.
-Después vinieron "Tierra De
Nadie", "No Va Más" y "Obstinato".
¿Cómo definirías los años finales de Barón
Rojo?
Muy Tristes, para llorar. Sin comunicación. Acabamos grabando dos
discos con muy bajo presupuesto, No Va
Más y Obstinato, y se acabó.
-¿Cuándo os separasteis fue definitivo o se quería que fuera temporal?
Lo más sensato me parece que hubiera sido dejar dormir al grupo
durante unos años, para luego haberlo retomado con nuevas energías, cuando
vinieran tiempos mejores. Lo cierto es que ya había mucha crisis y todo eso.
Pero ellos no lo vieron así y quisieron exprimir la teta de la vaca hasta que
ya no la quedó leche.
-En Guerrero En El Desierto
vuelves con unas letras muy acertadas. Siendo un disco heterogéneo, siempre en
el Rock, tienes unas composiciones variadas desde "Flor De Invernadero" y su crítica inteligente y mordaz o "Guerrero En El Desierto" que es como una
declaración de principios. ¿Estás de acuerdo con esto?
Es como lo has dicho, lo que soy y hacia donde quiero ir. Sin embargo
del disco "El Rock Me Mata" no guardo un buen
recuerdo, hay canciones que están muy bien pero no quedé del todo contento con
su grabación o con la del directo. Algunas cosas no se debieron hacer como se
hicieron. Tampoco volveré a poner una calavera en una de mis portadas, no soy
de calaveras ni de esqueletos, mi espíritu va hacia la luz no hacia la tumba.
-Canciones como "Mi Everest" son
muy personales o "Con Pies de Plomo"
que tiene un poso como de desengaño.
"Con Pies De Plomo" refleja
alguien que ha recibido muchos palos. Me quedan pocos amigos. Eso no quita para
que sea una persona muy positiva, que lo soy. Soy una persona esperanzada y muy
optimista, lo que pasa es que, al mismo tiempo, acuso mucho los golpes y las
decepciones, supongo que como todos. Pero esa es mi prueba, hay que aprender de
todo esto. Yo sigo subiendo el Everest. La montaña es mi símbolo, la digo en
la canción "Mi Everest", la
vida es una montaña y la iluminación está arriba; la cumbre, la liberación.
-Algún otro proyecto en el que estés trabajando y del que nos quieras
adelantar algo.
Estoy preparando una exposición y a la vez un disco. Disco doble, de
unas veinte o veinticinco canciones, algo así como mi testamento o legado
musical. Igual puede ser el último disco que haga. Estoy interesado en hacerlo,
voy pasando al ordenador muchas ideas que tenía, maquetas. Vamos a ver cómo
queda.
- De hecho, cuando diste el concierto acústico en la sala Barracudas
avanzaste algo al respecto.
Hay canciones de todo tipo, desde un tema Country, un Bolero, algo Heavy metal total... hasta una Nana. Hay de todo, quiero hacer un disco muy
variado y ecléctico. Va a ser algo así
como el álbum blanco de los Beatles
pero de Sherpa.
-Esta nueva gira de reunión de Barón
Rojo. ¿Cómo surgió la idea? ¿Qué sentimientos te produce? Los conciertos
han estado muy espaciados en el tiempo. Hemos echado en falta una gira con el
grupo al cien por cien.
Nada. Muy decepcionante para mí. Aunque tampoco me esperaba demasiado.
La cosa podría haber salido bien si hubiéramos sido amigos. Si hubiésemos
olvidado viejas querellas e historias. Teníamos que haber ido a resucitar este
cadáver, porque se podía haber hecho, pero la realidad es que no se ha querido
resucitar.
Lo cierto es que está pendiente la grabación de un concierto en
directo, que espero que salga muy bien, pero es algo así como dejarte llevar
por la corriente.
No hemos podido tomar decisiones entre ambas partes, ha sido algo así
como trabajar de empleado, no puedes decidir. El caso es que era así o no era,
y lo cierto es que a mí, para que te voy a engañar, no me venía mal, pero lo
cierto es que albergaba la esperanza de poder resucitar esta historia. Ahora,
que cuando vi el panorama comprendí que no era posible.
Sin embargo no nos confundamos, cada vez que he salido al escenario he
ido a darlo todo, al cien por cien. Me he entregado al público, a la gente.
-Si lo hubieran dejado todo en tus manos ¿Cómo habrías hecho la
reunión de Barón Rojo?
Por lo pronto sacar todo el mal rollo que tenemos, ponerlo encima de
la mesa con buena voluntad y pedirnos perdón de manera sincera y honrada, para
poder llevar a cabo un proyecto que puede ser maravilloso para todos. Empezar
de cero.
Lo que sacáramos de las tres primeras galas invertirlo en un montaje
como jamás se hubiera visto en España. El montaje que nos merecemos como banda.
La realidad sin embargo es que solo hablamos entre nosotros de cosas
técnicas o banalidades, hasta ahí todo bien. Pero para hablar de otro tipo de
cosas de más enjundia sobre Barón no
lo hacemos con los hermanos sino con su mánager, somos algo así como sus
empleados.
-Muchas gracias por tu tiempo y tu colaboración. Se me quedan en el
tintero cuestiones sobre los Hobbies y
Sargento Pepe. Nos quieres decir
alguna cosa sobre el futuro inmediato de Sherpa.
Bueno, lo dejamos para otra entrevista. De mi futuro inmediato lo que
sé es que ahora me voy a mi taller a trabajar en una escultura que tengo, con
la que estoy muy ilusionado. Y que el próximo veintidós de octubre espero que
salga todo de puta madre, si es la última, que por lo menos esté bien dada y la
gente se quede con un grato recuerdo de Barón
Rojo.