En 1994 los tristemente desaparecidos Jack Bruce y Ginger Baker pusieron en marcha este grupo junto al también tristemente malogrado guitarrista Gary Moore. Dios, qué duro resulta que los tres nos hayan dejado ya. BBM no era otra cosa que las iniciales de los apellidos de estos tres ilustres músicos. La primavera de ese año vio la luz del sol esa pequeña y delicada maravilla que lleva por título "Around The Next Dream". Un disco de esos que en cuanto los escuchas no puedes evitar etiquetarlos dentro de tu cabeza como obra maestra. En este texto nos significamos con el tema "Glory days", pero podríamos haber escogido cualquiera del disco, ya que todos son una delicia. Todo el rollo del buen Blues Rock a formato trío que abanderaron a finales de los sesenta los Cream de un Eric Clapton que todavía sentía algo cuando sonaba una guitarra eléctrica con distorsión mezclado con el guante rockero, electrizante y melódico de Gary Moore. Si a esto le sumas la particular voz y talento a las melodías de Jack Bruce el resultado solo puede ser brillante. Los ramalazos Blues de Gary están presentes por todo el disco, como no podía ser de otro modo. No obstante, aunque este es uno de los temas que comanda a la voz el propio Moore, aquí nos presentan una inspiradísima canción de esas que van subiendo en intensidad hasta que explotan en el estribillo. Pura poesía mezclada con el dinamismo que imprime en todo momento el tempo del tema. Es una de esas composiciones que destila positividad y buen rollo por todos sus poros, no tienen más que sonar sus primeros compases y ya te arreglan cualquier día torcido. Ni recuerdo la de veces que la he escuchado y todavía consigue hacer que se erice el vello de mi piel, es lo que tienen las buenas canciones.
Las carreras de Jack Bruce y Ginger Baker quedaron marcadas por el éxito de Cream, como no podía ser de otro modo. El trío que redefinió el concepto de Rock en su concepción primaria guitarra/bajo/batería ha dejado escrito su nombre en letras doradas para la posteridad por derecho propio. Aunque Clapton ha logrado un éxito todavía mayor con su carrera posterior -que no superar la calidad del famoso trío en opinión de este humilde escriba, aunque eso sea otro tema-, tanto Bruce como Baker han permanecido siempre a la sombra de esta gran banda. Jack Bruce se ha pasado prácticamente el resto de su carrera musical buscando rememorar esa mítica formación, buscando guitarristas que se calzasen las botas de Eric Clapton. El propio Uli Jon Roth nos desveló en exclusiva que le ofrecieron el puesto a mediados/finales de los ochenta en un proyecto que Bruce puso en marcha con el también malogrado Cozy Powell a las baquetas. Circulan por ahí unas maquetas de este proyecto con versiones de Cream y algún tema nuevo. Lo que no está claro es que sea Roth el guitarra, ya que ésta suena bajísima en la mezcla final y no te permite emitir un juicio con claridad; de hecho ni siquiera en los créditos de dicha grabación aclaran el nombre del guitarrista que toca con ellos. El caso es que debió ser poco después de estas grabaciones que contactaron con Gary Moore, un tipo capaz de tocar en cualquier grupo del universo y hacerlo de fábula. Se calzó sin problemas las botas de Clapton añadiendo su propia impronta, como todo en lo que tocaba el bueno de Gary, y nos ofreció pura magia a todos nosotros en uno de esos discos que te desborda en cuanto lo escuchas.
BBM: Gary Moore, Jack Bruce y Ginger Baker. |
Uli Jon Roth, Cozy Powell y Jack Bruce. Dibujo cortesía de Paul Simon. |
Durante ese verano lo presentaron en directo programando una selecta y exclusiva ronda de conciertos en varios recintos de gran aforo que tuvieron la suerte de contratarlos para deleite del respetable. La gira recaló en España, ofreciendo en la capital un show que seguro debió ser memorable, y lo digo así porque durante ese verano trabajaba y residía fuera del amado/odiado Madrid. Recuerdo muy bien esos días de Junio en los que debido a no tocar en fin de semana me encontré con el ridículo e irritante inconveniente de encontrarme a más de trescientos kilómetros del Palacio de Deportes en el que por una sola y única vez Moore, Baker y Bruce decidieron reunirse para tocar en directo los temas de su disco y unos cuantos clásicos imperecederos de Cream. Una sola vez. Yo, en mi supina estupidez, decidí que era un tostón meterse la kilometrada y, ya ves, me quedé sin esa única oportunidad de presenciar eso en directo. Uno de esos trenes que pasan por tu puerta una vez en la vida y, si dudas, lo pierdes puede que para siempre. Tomé buena nota de cara al futuro. En fin, siempre podemos darle al "play" de cualquiera de nuestros reproductores y volver a escuchar esta preciosidad de canción.
Esta obra es lo más cercano a los grandiosos Cream que uno pueda escuchar, y la aportación de Gary Moore demuestra que era un genio, irrepetible. Fran
ResponderEliminarLa canción se sale. Tengo este disco desde que salió en aquel año, en vinilo y esto me ha traído muy gratos recuerdos de esa época. Quien sabe hasta donde podrían haber llegado si esto hubira tenido continuidad, pero Gary Moore no estaría por la labor. Darío Pacheco
ResponderEliminarCómo se echa de menos a Gary Moore, cualquier cosa a la que le ponía su guitarra la mejoraba
ResponderEliminarHas dado en el clavo otra vez. Este tema es mi favorito de ese disco, y es una obra maestra, tiene el toque de los Cream pero a la vez suena original. Es un single potencial y que podría sonar en cualquier radio del mundo. Y el solo de Gary Moore es demencial.
ResponderEliminarY conecto también con lo que sientes al no haberlos podido ver en directo. Yo por mi edad tampoco pude (a no ser hubiese ido con once años, jaja), y esa espina se queda ya clavada ahí, como tantas cosas a las que en su día renuncias o no pueden ser pasando al cajón de cosas pendientes para siempre.
Un placer leerte, como siempre. Susana
La carrera de Gary Moore fue muy irregular a partir de finales de los noventa (que no digo que no fuese bueno) pero los BBM fue una sorpresa agradable. Lo suyo habría sido que le hubiesen dado continuidad. El disco que sacaron fue inmejorable. KiKe
ResponderEliminarSolo hubo unos Cream: Clapton, Bruce y Baker. Lo demás copias baratas. Y este invento con Gary Moore no es más que otra copia, seguro que Eric Clapton se estaría descojonando cuando salió... si es que lo llegó a oir. Politician
ResponderEliminarNo estoy de acuerdo. Cream fueron muy grandes, pero a Gary Moore no había que enseñarle nada. Él viene más de Peter Green y desde luego si le comparas con Clapton es que no hay ni color.
EliminarLo que dices es una estupidez. Cream fueron muy buenos, pero todo lo que ha hecho sobre todo Jack Bruce es tan bueno o más, y como ejemplo este disco de BBM. No reconocer la calidad que tiene este disco es de idiotas. Y ojo, que Cream me encantan, lo que pasa es que no es blanco o negro. Mi opinión. Gabi
ResponderEliminarGrandes y entretenidos vuestros comentarios, como siempre. Aunque también creo que Cream han sido de los más grandes, no puedo estar más en desacuerdo con Politician y coincido con Gabi, KiKe, Fran y Susana, BBM fueron un grupazo y nos legaron una obra maestra.
ResponderEliminar¿Qué habría pasado si hubiesen seguido juntos? Fácil. En lo que a mi respecta está muy claro: habrían grabado más obras maestras, una detrás de otra. Gary Moore era sin duda un tipo que vino de otra galaxia en la que todos tocan la guitarra que te cagas y crean música imperecedera. El listón que puso a lo largo de su difícil y compleja vida así lo atestigua. No he podido disfrutar más con el refrito este nuevo que han sacado titulado "How Blue Can You Get" y solo espero que sigan sacando TODO lo que los productores de turno consiguieran grabar de la guitarra del añorado Gary durante los años que pasó por nuestro mundo.
Gary Moore es como dios, estoy de acuerdo con que lo que hubiese grabado con Bruce & Baker habría sido tan bueno a más que este ATND.Cómo se le echa de menos. XXX
ResponderEliminar