Clube de Adictos a Deep Purple

Clube de Adictos a Deep Purple
Clube de Adictos a Deep Purple

Púrpura Chess

This blog is basically a musical site. Here we talk about the music we like, using different angles. As dear and missed Jon Lord once said: “Music is the highest kind of Art that exists”. I think the same way too.

Púrpura Chess

Púrpura Chess

viernes, 8 de abril de 2022

Cozy Powell. Un músico que nos dejó muy pronto. Las últimas horas de su vida.

Hoy hace veinticuatro años y tres días que nos dejó para siempre Cozy Powell. Que el insigne y tristemente malogrado batería Colin Trevor "Cozy" Powell -24 de Diciembre de 1947/5 de Abril de 1998- ha sido y es uno de los músicos más reconocidos y carismáticos que ha dado nuestro querido universo del Rock n' Roll es algo que no se le escapa a nadie. Un excelente batería, poseedor de un sonido único que te permitía identificarlo en cuanto le escuchabas y que fue capaz de traspasar el muro de sus tambores para alcanzar una notoriedad propia de cantantes y guitarristas desde aquellos añorados años setenta hasta la actualidad. No es que fuera mejor ni peor a la hora de ejecutar con su batería, no se trata de eso aunque realmente fuese muy bueno tocando su instrumento, sino que consiguió alcanzar unas cotas de notoriedad y reconocimiento que generalmente estaban copadas por cantantes como Ian Gillan, Robert Plant, Steven Tyler, Rod Stewart o Paul Rodgers, por citar un puñado de los básicos de toda la vida, o guitarristas como Jeff Beck, Eric Clapton, Jimmy Page o Ritchie Blackmore; de hecho el siempre temible Man in Black llegó a asegurar públicamente una vez que el músico con el que sentía que debía haber hecho más esfuerzo por mantener en sus Rainbow siempre fue el bueno de Cozy... y eso es mucho decir si viene de alguien tan arisco como Blackmore; el Blackmore de los setenta/ochenta, claro.

A lo largo de su intensa vida Cozy Powell ha tocado con la flor y nata del Rock duro mundial, puso sus baquetas al servicio de grandes nombres como Jeff Beck, Black Sabbath, Rainbow, Whitesnake, EL&P, Peter Green, Gary Moore, Brian May, Robert Plant, Michael Schenker, Jan Akkerman, Graham Bonnet, Glenn Tipton... y así podríamos seguir hasta quedarnos sin papel. Todo esto sin contar la gente para la que grabó sin aparecer en su día en los créditos como músico de sesión y entre las que nos encontramos a grupos y artistas del calibre de Jack Bruce, Cinderella y un largo etcétera. Tanto antes como hoy en día resulta bastante habitual que los buenos músicos sean reclamados para grabar en el estudio las partes de otros artistas famosos, pero que no deben de ser tan buenos intérpretes como su fama les precede. Lo hacen desde el anonimato mientras reciben su cheque por los servicios prestados y por mantener su boca cerrada. Uno de los músicos que seguro debe tener unos cuantos contratos firmados de semejante calibre debe ser nuestro entrañable Cozy. Ya ves, un palmarés que solo alcanzan ese puñado de escogidos por el dedo divino de la música.

Cozy Powell fue de los pocos baterías que en sus primeros años consiguió meter canciones publicadas bajo su propio nombre en las listas de éxitos; no se conformó nuestro hombre con tocar con los más grandes, también tuvo tiempo para poner en marcha su propio grupo y grabar un puñado de singles y discos en solitario, algunos de ellos alcanzando puestos importantes de las listas inglesas de éxitos. Famoso y conocido por todo el que sienta algo por el Hard Rock es su solo de batería, el que interpretaba en todas sus actuaciones de directo -bueno, menos con EL&P-. Este solo, que se estructuraba a partir de la clásica pieza de Pyotr Ilyich Tchaikovsky titulada “1812 Overture”, es sin duda otra de las marcas de la casa de nuestro querido aporreador. Apareció en su primer disco en solitario de estudio titulado “Over The Top”, siendo el propio tema título. Más tarde le añadió también un fragmento del tema “633 Squadron”, versión del tema original de Ron Goodwin y que el propio Cozy publicó en su tercer disco en solitario “Octopuss”. Se trataba de una interpretación electrizante en la que se sumaba la épica de la Música Clásica y la potencia de su batería en un compendio que iba subiendo en intensidad hasta que explotaba ante los atónitos ojos del espectador, uno de los puntos culminantes de cualquiera de las actuaciones de los grupos de turno en los que militaba Powell.

Su personalidad debió ser también bastante interesante. Bromista empedernido, capaz de rivalizar con el mismísimo Ritchie Blackmore en esto de tocar los cojones con esas bromitas pesadas que le arruinan el día al que las sufre, para sorna y regocijo del resto de observadores. Era un tipo que vivió rápido y sin darle demasiadas vueltas a las cosas. Le gustaba conducir coches de alta gama a toda velocidad, de hecho eso fue lo que acabó con su vida de manera tan abrupta. Cuenta Graham Bonnet -un tipo con el que llegó a hacer muy buenas migas, por otro lado normal por la forma de ser de ambos- que si querías ir en coche a un lugar y llegar antes que nadie debías montarte en el vehículo de Cozy

La unión de estos tipos en los años dorados de Rainbow está trufada de situaciones tan atómicas como inverosímiles, propias de la imposible convivencia de tipos tan creativos y extremos como Blackmore, Dio & Co. El famoso featuring: Blackmore, Dio & Powell, un triunvirato que nos ha llenado de felicidad y de música de esa de caviar ruso a los millones de seguidores de la formación clásica de Rainbow que nos repartimos por el mundo y que consideramos que lo que consiguieron crear estos tres tipos no ha podido ser superado jamás. Pero esto es marginal. Curiosamente parece ser que la relacción Ronnie Dio/Cozy Powell siempre fue bastante tensa hasta llegar al extremo de que cuando Dio volvió con Black Sabbath a principios de los noventa iba a ser con Cozy Powell, pero un accidente de este le imposibilitó grabar con ellos en los tiempos previstos. Hablamos del gran pero infravalorado disco "Dehumanizer" de los Sabbath. Por lo visto, ante la imposibilidad de tocar de Cozy por haberse caído de un caballo -qué demonios hacía Powell a lomos de un equino es algo que solo debía de saber él mismo- hizo que se trastocasen los planes de grabación, siendo el propio Ronnie el que propuso no esperar a Cozy y llamar a Vinnie Appice; sí, el mismo Vinnie que años más tarde traicionaría cochambrosamente al propio Dio que tantas veces se acordó de él. También por una gira de reunión de Black Sabbath, esta vez con Ozzy Osbourne y que documentamos en este otro artículo.

El caso es que varios años después Ritchie y Cozy coincidieron en un festival en la localidad sueca de Esbjerg, hablamos de 1997 al final de la gira de reunión de Rainbow con Doogie White al micro. Powell acompañaba en la batería a Peter Green y por lo visto se toparon en el backstage los tres: Blackmore, White y Powell; se tomaron algo, charlaron y parece ser que trataron el tema de LA REUNIÓN. Lamentablemente se vio truncada para siempre por el fatal accidente automovilístico que sufrió nuestro batería favorito. Conocemos estos datos cortesía de Doogie White, un tipo íntegro que sufrió en sus carnes el injustificado escarnio del entorno Blackmore's Night protagonizado por unas declaraciones tan hirientes e innecesarias como fuera de contexto que realizó la vocalista y mujer de Ritchie, Candice Night, y que comentamos en esta otra entrada.

Rainbow 77: Tony Carey, Ronnie Dio, Ritchie Blackmore, Cozy Powell y Jimmy Bain. Magia pura.

En ese año 1998 parece que Cozy Powell se estaba viendo con una mujer casada, imagino que tanto a Cozy como a otro buen número de hombres que andan sueltos por el mundo poco les importa ese pequeño detalle para entablar una relación más estrecha con la fémina de turno. Una lluviosa y desapacible tarde Cozy recibió una llamada de la señora en cuestión, por lo visto pidiéndole que acudiese con ella por cualquiera que fuese el motivo de su situación con el que por entonces era su marido. Powell, como el caballero que siempre fue, se sentó raudo en su Saab 9000 para estar al lado de nuestra intrigante mujer en su momento de desazón. Todos hemos conducido alguna vez bajo las inclemencias del tiempo, frío, lluvia, nieve o niebla, a cuál peor. En estos casos el asunto de reducir la velocidad de crucero es algo casi inherente al hecho de ponerse al volante de un vehículo. Nada más alejado de la realidad de la lógica vital de un tipo como Cozy Powell. Por supuesto puso su coche a mil, como de costumbre, mientras hablaba por teléfono con su adúltera acompañante. Las inclemencias meteorológicas, la excesiva velocidad de su vehículo y ese destino cruel que a veces buscamos sin remedio hicieron el resto. En el momento en el que Cozy Powell se estrelló contra una de las medianas de la autopista M4, cerca de Bristol, iba hablando por teléfono mientras conducía a unas cien millas por hora. Recibió un impacto brutal que acabó con su vida.

Sharon Reeve, la dama con la que Cozy mantenía el affair sentimental, nos cuenta que llamó a nuestro batería favorito para pedirle que fuese en su búsqueda. Llamó a Powell esa tarde a su teléfono móvil, solicitando su inmediata presencia imaginamos por problemas conyugales. Le pidió a este que acudiese con ella lo más rápidamente posible. Las residencias de ambos se encontraban a unas 35 millas -unos 56 kms-. Cozy, que había estado consumiendo alcohol durante esa misma tarde, se subió a su coche sin dilación. Se puso al volante de su vehículo con la intención de recorrer la distancia que separaba su casa en Woodlands St Mary, cerca de Hungerford, Berkshire, del domicilio en el que su dama se encontraba en ese momento en la localidad de Cardiff. Esa lluviosa tarde del cinco de Abril de 1998 el Saab 9000 hizo honor a su capacidad de correr en manos del músico que en más de alguna ocasión había comentado públicamente que conducía igual que tocaba: fuera de control. 

La dichosa señora Reeve llamó de nuevo al móvil de Powell a las ocho y media de la tarde para ver en qué parte del camino se encontraba, consiguiendo hablar con él mientras conducía pese a que había ciertas interferencias en la línea. Pudo entender que Cozy estaba teniendo algunos problemas con la caja de cambios del vehículo, le comentaba Powell que estaba conduciendo a unas 104 millas por hora -167 km hora- y esperaba que el motor no se atascase. De pronto Cozy dejó de explicarse para decir súbitamente: “oh, mierda”, sonaron a través del teléfono algo así como unos ruidos violentos y acto seguido unos segundos de preocupante silencio. Desesperada, volvió a intentar llamar al batería, pero ya no volvió a escuchar la voz de Cozy Powell al otro lado de la línea. En ese momento se dio cuenta de que Cozy habría sufrido un accidente y telefoneó a la policía para ponerla al tanto de la desesperada situación. Powell impactó contra una mediana de la carretera cerca de Bristol, debido al exceso de velocidad, a las condiciones meteorológicas e imaginamos que a su estado tras la ingesta de alcohol. El coche hizo un trompo mientras chocaba con la mediana. Powell salió disparado del habitáculo del conductor cuando este dio una vuelta de campana cayendo sobre el techo encima del propio Cozy, que falleció en el acto. En el análisis que le realizaron posteriormente reflejaba una tasa de alcohol en la sangre ligeramente superior a la permitida. Fue declarado muerto en el hospital de Frenchay, en la localidad de Bristol unas horas después.

El oficial de policía Ian Carter casualmente conducía frente a Powell cuando este perdió el control del vehículo. Circulaba por el otro sentido de la autopista en la que tuvo el fatal accidente Cozy. Se encontraba adelantando por el tercer carril cuando de pronto escuchó un fuerte ruido sordo. Declaró que paró su coche en cuanto vio el accidente y fue a ver tanto el estado del Saab 9000 como lo que les podría haber pasado a sus ocupantes. Carter, que se encontraba fuera de servicio en esos momentos, pensó en un primer momento que el coche podría haber colisionado desde el otro lado de la autopista. Al acercarse el motor todavía estaba encendido y salía humo del capó. Debajo se encontraba el cuerpo de un hombre, estando todavía visibles su brazo y pierna izquierdos. Carter le intentó tomar el pulso, pero el corazón de Cozy Powell había dejado de latir. Robert Nicholls, comisario de policía que estuvo en el incidente, confirmó que Cozy Powell iba conduciendo a gran velocidad, hablando por el teléfono y sin el cinturón de seguridad abrochado. A la tasa de alcohol superior a la permitida se le pudo sumar el problema que se detectó a posteriori en uno de los neumáticos del coche, ya que parecía haber sufrido un pinchazo en los momentos previos al accidente. Este enrevesado cúmulo de circunstancias tuvieron el fatal desenlace que todos conocemos. La Sra Reeve, que estaba atravesando un proceso de separación de su marido y había conocido a Cozy en uno de sus conciertos, no quiso realizar declaraciones en ese momento.

En esos momentos Cozy Powell se encontraba trabajando en unas grabaciones del guitarrista Peter Green, con el que estaba actuando en directo por entonces. A la vez acababa de parar los ensayos para la gira que iba a realizar con el guitarra sueco Ingwie Malmsteen debido a un accidente que había sufrido con una moto. La fatalidad, los excesos y la imprudencia hicieron el resto. Además de la música, la otra pasión de Cozy Powell eran los coches y la velocidad. Había llegado a pilotar coches de competición en los años setenta e incluso por un tiempo abandonó la música para convertirse en piloto de Formula 3.

Si la señora Reeve no hubiese urgido la presencia inmediata de Cozy, que había estado bebiendo y no se pensó dos veces el hecho de montarse a los mandos de su vehículo, si el coche no hubiese sufrido un pinchazo, si no hubiera hecho tan mal tiempo, si no... En fin. Que nos quedamos sin Cozy Powell y ya está. Cincuenta años. Joven, muy joven, y con mucho recorrido por delante que se truncó irremediablemente aquella asquerosa tarde de Abril.

Se rompió de manera definitiva el featuring: Blackmore, Dio & Powell.

Siempre recordado. Colin Trevor “Cozy” Powell, Descanse en Paz.

 

                                                     Rainbow: Munich 77. Cozy drum solo "1812 Overture".
 

 

                                       Whitesnake: Ludwigshafen 83. Drum solo "633 Squadron"7 "1812 Overture".  



9 comentarios:

  1. Excelente artículo, Cozy fue uno de los más grandes, y se fue muy pronto. No sabía los detalles de su accidente y he pasado un gran rato leyéndolo todo. Enhorabuena y saludos de Carlos.

    ResponderEliminar
  2. Ha pasado a la historia como uno de los mejores sino el mejor batería. Muy pocos pueden presumir de haber tocado con LOS MAS GRANDES. Salud por Cozy RIP Andres

    ResponderEliminar
  3. Cozy nos dejo grandes momentos a los tambores como "Stargazer" con Rainbow,"Here i go again" del Slide it in de Whitesnake,donde combinaba el lado baladistico con el rock en los estribillos sin
    olvidar "The blister" de su album "Tilt",con Gary Moore a la guitarra...ah por cierto,la chica de la foto es Janine Andrews,otra novia de Cozy y ex-chica Bond en "Octopussy".Saludos. Paul

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias por el apunte Paul. La verdad es que me ha sido imposible encontrar ninguna foto de la dichosa señora Reeve. Curiosa relación entre el film de James Bond "Octopussy" y el tercer disco en solitario de Cozy titulado "Octopuss", ambos publicados en 1983.

      Eliminar
  4. Su solo de batería es un clásico marca de la casa, no solo con lo mezclar el tema de Tchaikovsky, sino por todo el espectáculo técnico de luces, explosiones, vamos, que era un espectáculo.

    ResponderEliminar
  5. Lo que hizo con Brian May también es la leche. Back to the light es un clásico, y el directo todavía es mejor. Una de las canciones del disco de May ya la grabó en su último disco en solitario The Drums are back. RIP Cozy. Jorge

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo lo vi en directo con las banda de Brian May y fue impresionante,uff,vaya sonidazo.El solo de batería pudo ser uno de los momentos culminantes del espectáculo.

      Fer.

      Eliminar
  6. Pocos baterías han alcanzado la notoriedad de Cozy, y por algo será. Se merece todos los reconocimientos que tiene. Todos han querido tocar con él, y los que no lo han hecho es porque no han podido. BED

    ResponderEliminar
  7. Fue el mejor batería que nunca tuvo Blackmore y de los mejores que han existido nunca. Puta lluvia y cúmulo de circunstancias fatales. XXX

    ResponderEliminar