Esta tarde noche lluviosa, bucólica, plomiza, melancólica y sugerente es un momento tan perfecto como cualquier otro para zambullirte en el nuevo disco de Phil Mogg. Bajo el epígrafe de MOGGS MOTEL, el cantante de UFO volvía el pasado otoño al ruedo musical con un nuevo álbum bajo los brazos. Tras sufrir un infarto que le obligó a cerrar el capítulo de UFO -su grupo de toda la vida- y de paso toda actividad musical, nos volvió a sorprender hace apenas unos meses con un nuevo proyecto y nueva música. Mucha calidad, como nos tiene acostumbrados este vocalista tan personal... y rezumando el sonido UFO, con esas melodías "marca registrada" que le hacen tan reconocible y especial, por supuesto.
No sé por qué todavía no había hablado de la música de este disco en estas páginas virtuales, considerando que no he parado de escucharlo desde que llegó a mis manos y que me tiene obsesionado por completo. Bueno, lo cierto es que ya comentamos a principios del pasado año los rumores sobre este nuevo proyecto. Puedes leerlo aquí. Acertamos de pleno, cosas que pasan cuando la pasión sincera y la intuición toman el mando. Lo curioso del asunto es que por aquel entonces nadie de la querida "prensa musical especializada" de nuestro bendito país se había hecho eco de los rumores. Otra más. Lo de siempre: si no pagas, no sales. Incluso ni siquiera en las páginas internacionales más potentes de estas músicas que tanto nos gustan a millones de nosotros se contaba nada de nada al respecto. Lo de siempre: si no pagas, no sales.
Pero estoy seguro de que a estas alturas de película a un tipo que ha vivido tanto, tan intensamente y tan al borde del precipicio a todos los niveles como Phil Mogg no le importa una mierda lo que pueda decir la prensa de él y de su música. Buscó como fiel escudero al multinstrumentista Neil Carter, un tipo que ya formó parte de UFO durante dos etapas de la banda, y compusieron un puñado de canciones en plena pandemia. Acabaron de dar forma a dichos temas después, de la mano del guitarra Tommy Gentry, el batería Joe Lazarus, y el bajista Tony Newton. El propio Newton se hizo cargo de las labores de producción dando forma a una obra de Hard Rock clásico, cruda y melódica a la vez, delicada y potente, con canciones válidas tanto para escuchar a oscuras en la intimidad de tu guarida o en un concierto abarrotado de público; sensaciones muy difíciles de plasmar y que Mogg & Co lo han logrado con creces. Material de primera categoría, pintado de un modo sobrio, inspirado, con mucho estilo y dotado de la elegancia clásica que tiene la impronta de la voz de Phil. Sonido a batería/bajo/guitarra/voz, con unos toques de teclados que remarcan un aire denso y siniestro con el que adornan el conjunto global de la obra. Me trae recuerdos en forma de pinceladas a discos como "No Place To Run" o "The Wild The Willing And The Innocent" de los añorados UFO. Todo ello acompañado de una portada impactante y muy lograda. Un hotel con gasolinera en medio de ningún lugar en el que perderte con tu vehículo y tus cosas amparado en la intimidad de cualquier anochecer ante la delicada mirada de la luna. Imposible hacerlo mejor.
Os dejamos una muestra de lo bonito y personal de este disco, de la mano del tema "Other people's lives". Una cuidada y sinuosa canción seguro solo apta para paladares exigentes. Para tu coche, tómate esa bebida que tanto te gusta y pasa una noche en el Moggs Motel.
Es un gran cd, como si fuera el nuevo de UFO. Son buenas noticias que Phil Mogg vuelva a la música después de lo del infarto, y si es con esta calidad mejor. Javi
ResponderEliminarEs muy bueno, también me alegro mucho de que se recuperase y haya vuelto a la música. Es una pena que UFO se haya disuelto, eran una apuesta segura para el directo. Fran
ResponderEliminarOjalá salga a tocar en directo,que parece que no tiene pensado hacerlo.Estarí muy bien CC
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