Una sección de nuestro colaborador "Acid
Ni3".
Damos la bienvenida a un nuevo colaborador en este pequeño universo de amantes de la música y de otras manifestaciones artísticas en forma blog. Dejamos que sea él mismo quien nos comente alguna pincelada básica sobre esta nueva sección que no busca más que el entretenimiento musical de la mano de nuestra querida palabra, un bien muy preciado en estos tiempos que corren. Os dejamos en sus manos:
La idea de esta sección es la de jugar, divertirse, provocar, sin más pretensiones, utilizando material real y ficticio, poner la verdad y lo imaginado juntos, lo que podría ser y no fue, lo que es posible que sucediera y no sucedió o tal vez sí, para que caminen de la mano lo absurdo y lo evidente. Que el lector interesado compruebe la veracidad de las fuentes o que simplemente disfrute sin más, o se aburra, o enfade –no es esta mi intención, pero tampoco entra dentro de mis posibilidades evitarlo; ya me gustaría-. Este artículo, con cierta sorna, nace de mi incomprensión hacia ciertos críticos, de su uso exagerado del inglés; de su excelso dominio del lenguaje, que admiro por un lado, pero por otro, a veces y solo a veces, a uno le gustaría saber si el disco es bueno, malo o regular…
Los Experimentos con la Prosa.
Esta es la historia de mi vida, del Rock and Roll suicida, que nace para correr, que corre, corre, corre, que es cerrado como la leche, da patadas adolescentes, que es siempre joven, que va en cohete a Rusia, llamando a Londres, en las calles de Madrid y en el muro de Berlín, de vuelta a la Unión Soviética, en el Blues de la lápida, desde mi atalaya, estaba fumando en el agua, cuando una odisea en el espacio, trajo un bebé al gueto, donde a su manera, se convirtió en luchador callejero y cayó en la heroína y la aguja y el daño hecho… ¡Quillo, aquí estoy de nuevo! Listo para el Country, llamando a las puertas del cielo, con mi hermana morfina, con la mística chica, con sus satánicas majestades y el álbum de navidades de Phil Spector, ¿y no sería maravilloso? Pero la gente no es buena, el hombre que vendió al mundo (en un mercado de Wuhan), es un síntoma del Universo. No habrá rendición y mira que lo intento, pero, por más que busco, no encuentro: la satisfacción.
Lou Reed no es heavy, ni nada por el estilo, pero es uno de los mejores letristas que ha habido nunca, a años luz del resto. Merecido homenaje a una parte de la música que no suele ser la protagonista, y que tambien tiene su peso y su importancia.Pedro
ResponderEliminarLo más cerca que estuvo es con rock and roll animal, es curioso que su último disco fuera Lulu con Metallica como acompañantes y que Bowie dijera que como el Metal Machine Music iba a ser un disco de culto, los dos fueron masacrados por la crítica en su lanzamiento, el tiempo dirá...
ResponderEliminarNunca me gustó la colaboración con Metallica, ni la entendí tampoco. No sería que ambos músicos buscaban solo ampliar posibles mercados y de paso obtener un poco de promoción?
ResponderEliminarEs posible, porque lo más decepcionante es que no se fusionaran sus estilos, pero tampoco conviven bien cada uno por su lado, es como un matrimonio concertado en el que ninguno parece estar agusto, pero se ponen de acuerdo para dar el si quiero... Por seguir elucubrando supongo que juntar los públicos potenciales de los dos grupos en momentos de poca inspiración en el otoño o invierno de sus días era un caramelo muy apetecible para Reed y envenenado para Metallica. Por cierto Lulu es el título de una ópera de Alban Berg, pero también el mote que pusieron a Lou Reed en la Factory por su manera de cantar, algo afeminada en Sunday Morning, casualmente la primera canción del Banana Album. Su primera referencia discográfica, cuadratura del círculo?...
EliminarHa muerto Phil Spector por coronavirus. Adiós al creador del Wall Of Sound.
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