Una sección de nuestro colaborador "Metálico".
¿La
música en soporte físico o virtual?
La forma
en la que consumimos música está variando notablemente de un tiempo a esta
parte. Cada vez más los soportes físicos son menos utilizados, algunos
prácticamente han caído en desuso como las antes populares cassettes, otros se
mantienen a duras penas como los vinilos, mientras que el reinado de los CDs y
DVDs se ha visto superado por la música virtual, que se escucha on line en plataformas como spotify o similares.
Las ventajas de la música así escuchada son
evidentes pues no requieren de ningún lugar físico para almacenarse (atrás
quedaron aquellas estanterías repletas de discos). Permiten una gran comodidad,
porque con un simple smartphone con
conexión a internet y unos cascos se puede escuchar casi cualquier canción. Y
ese es otro motivo, seguramente el principal: la posibilidad de acceder a un
sinfín de artistas o grupos, a cualquier lp, a esa canción que se quiere
escuchar ya con solo un toque de la yema del dedo.
Ante este despliegue, el soporte físico apela a
otros tipos de valores a la hora de consumir música, permite un mayor
acercamiento al trabajo del grupo: la portada, la contraportada, las fotos
interiores o cualquier comentario del autor, posibilita disfrutar del valor
añadido de la música que ha querido compartir el autor. Y, claro está, facilita
el coleccionismo, algo que en mayor o menor medida ha intentado cualquier
amante de la música que ya tenga canas, alguna o muchas.
Además, también hay otro tipo de ‘soportes’, que son
los que permiten almacenar la música que se descarga: discos duros y otros
dispositivos de memoria que apenas necesitan espacio físico para guardarse.
De todas modos, estas formas de escuchar música no
son incompatibles, sino todo lo contrario.
¿A
vosotros qué os parece?
Metálico.
El formato físico ya solo queda para románticos/carrozas en general, y es una pena (será que yo soy uno de ellos, jejeje). No creo que a ningún chaval de menos de veinte años hoy en día le interese acumular cds en su habitación de la casa de sus viejos, prefieren escuchar cada canción de moda por separado desde sus iphones. Un saludo a todos de Javi
ResponderEliminarEs que incluso actualmente es complicadísimo comprar un cd o un dvd, o son cosas muy famosos o tienes que comprarlos por internet. Si te vas a sitios como FNAC no esperes encontrar más que novedades de Maiden, Judas o Metallica, que como busques algo un poco menos conocido no lo tienen. Son los tiempos que nos tocan. Fran
ResponderEliminarEs que ya casi ni quedan tiendas físicas de discos. la pescadilla que se muerde la cola: no se compran discos - desaparecen las tiendas - nos quejamos de que no se pueden adquirir facilmente.
ResponderEliminarTengo claro que la era de los discos y cd físicos está tocando a su fin, y en cuanto esos que peinamos canas nos vayamos la gente se olvidará de los vinilos.
Para mí lo mejor es aprovecharte de ambos mundos. No concibo ni mucho menos un mundo sin discos físicos, sin poder manosear las portadas, ver las fotos y leer los créditos mientras escuchas la música. Aunque es verdad que las nuevas tecnologías me permiten llevar en mi bolsillo y con el ipod cientos de álbumes que serían del todo imposible de llevar de otro modo. En los ochenta me montaba en un autocar y me llevaba una bolsa con una selección de un puñado de cassettes cuidadosamente escogidos para la ocasión, ahora con el ipod todo el universo de posibilidades es inmenso.
ResponderEliminarLo mejor es usar, como diría Van Halen: "The best of both worlds". Saludos.
De todos modos, tampoco es necesario que seamos tan pesimistas en cuanto al soporte fijo. Hace algunas décadas cuando apareció y se anfianzó el CD, casi acaba con los vinilos. Sin embargo, estos no terminaron de desaparecer y con el tiempo encontraron su sitio, su mercado; si bien es cierto que bastante minoritario. Lo mismo puede ocurrir con los soportes físicos, porque como adecuadamente reflexiona Paulino tiene una serie de ventajas y de añadidos que garantizan su perdurabilidad aunque sea minoritaria. Y es verdad, hay que coger lo mejor de ambos mundos.
ResponderEliminarMetálico
Para mí ahora mismo Spotify y Youtube son la vida, puesto que con ellos puedo acceder de una manera u otra al 95 por ciento de la música que me interesa por un precio irrisorio.
ResponderEliminarGracias a ello se mantiene vivo mi interés por los conciertos, por conocer nuevos grupos con facilidad y por evitar un almacenaje excesivo de material.
Lo que no quita para que cuando un disco me gusta especialmente no me lo compre en CD.