Una
sección de nuestro colaborador “Metálico”.
De
fiesta por garitos heavys o no.
A
la hora de salir de fiesta al amante del Rock
duro o Heavy se le presenta la
disyuntiva de ir a locales donde pinchen la música que más le gusta o por el
contrario dejarse llevar por la corriente mayoritaria de pubs y discotecas en
los que se escucha otro tipo de sonidos. Es evidente que no son opciones
excluyentes y la noche da para alternar garitos de ambos tipos, esto es posible
porque la prohibición de entrada a determinados lugares por razones de estética
o vestimenta suele ser algo del pasado que ya prácticamente se ha superado
(hace muchos años en un pub del Barrio del Pilar en Madrid un cartel avisaba
que se impedía el paso con pintas heavys).
Es
evidente que el tipo de salida viene condicionado por los acompañantes, si
tienen parecidos gustos musicales sí existe la alternativa de una noche
rockera. De lo contrario, se quiera o no, la única opción suele ser ir a estos
locales mayoritarios.
He
de reconocer que estas dos posibilidades suponen dos noches bastante dispares;
pues, aparte de la música, los ambientes y la gente son diferentes. En
principio, ni mejores ni peores pero sí distintos y para gustos...
Eso sí, siempre ha habido un sector de público que prefiere tomársela en garitos rockeros. Hablando de Madrid, ya ha alcanzado el nivel de mítica la sala Canciller, a la que siguieron el Canci II, la Sukursal, Estudio Rock, Excálibur, We Rock, etc. Zonas como Argüelles o Vallecas se poblaban de amantes de esta música los fines de semana. Y no puedo olvidar los diferentes pubs rockeros de cada barrio.
Metálico.
Eso sí, siempre ha habido un sector de público que prefiere tomársela en garitos rockeros. Hablando de Madrid, ya ha alcanzado el nivel de mítica la sala Canciller, a la que siguieron el Canci II, la Sukursal, Estudio Rock, Excálibur, We Rock, etc. Zonas como Argüelles o Vallecas se poblaban de amantes de esta música los fines de semana. Y no puedo olvidar los diferentes pubs rockeros de cada barrio.
Metálico.
Qué recuerdos de esas noches del Canci de Ventas, aquellos fueron los años dorados del Heavy Metal en España. Ahora está todo mucho más calmado, pero hubo unos años en los que era de veras agobiante ir a según qué garitos; que si no te dejaban entrar por las pintas y todo eso. Ahora está todo mucho más mezclado. Y eso es bueno
ResponderEliminarBueno, eso sigue siendo así en bastantes sitios... otra cosa es que decidas no ir a ellos. Aunque el dueño tiene reservado el derecho de admisión y pueden dejar pasar al que quiera. Eso también hay que tenerlo en cuenta. Jorge
ResponderEliminarSí, pero aunque la ley te pueda amparar, no es de recibo que dejen pasar a unos sí y a otros no por temas como las pintas (otra cosa es que faltes al respeto o cosas así).
ResponderEliminarY desde luego, el rollo del Canci fue la mejor época para nuestra música (sin desmerecer a lo actual).
Javi
Bueno, bueno, que los años del Excálibur tampoco estuvieron nada mal, no? Era un sitio ideal, estaba abierto hasta el amanecer, entraba todo el que quería (pintas heavys o no) y buena música. Bueno, te ponían garrafón y eso, pero ¿ en que otro garito nocturno no lo hacen? Salud. XXX
EliminarEl ideal de garito para mi gusto es el que conjugue la posibilidad de tomarte algo en la barra con la gente adecuada y charlar de música mientras suena esa misma música o similares.
ResponderEliminarNo puedo negar que la sala madrileña Excálibur nos ha proporcionado a muchos de nosotros grandes momentos que guardar en la retina. Aunque en estos últimos años la irrupción de la sala We Rock en pleno centro de Madrid y su nuevo emplazamiento por la zona de Canal permiten mantener viva la llama del ocio para la gente que disfruta escuchando Rock duro. A todos estos sitios la principal pega que les pongo es que la propuesta musical, pese a ser Hard Rock/Heavy..., no suele ser variada ni multiforme; vamos, que muchas veces acaban sonando las mismas canciones que todos conocemos. Sigue habiendo mucha música y de mucha enjundia para poner siempre el mismo ramillete de temas "conocidos de los de toda la vida".
Y también son importantes esos otros bares y pubs que tienen más vocación de garito de barrio, pero que siguen resultando un lugar idóneo para juntarse a pasar un rato agradable con la música de fondo adecuada.
Los mejores son esos pequeños bares de los barrios en los que te puedes hasta llevar bien con los dueños. Te ponen buena música, buena bebida (nada de garrafón ni cosas de esas) y te permiten pasar buenos ratos con tu gente. Paco
ResponderEliminarYa te digo, afortunadamente de esos todavía quedan, y son los mejores jeje. Incluso te puedes sorprender si viajas y en el lugar más recóndito de pronto te encuentras con un garito local que pincha rock.
ResponderEliminarRoberto
Por descontado, que los garitos de barrio tienen su encanto. Pero referido ahora a los locales de mayor tamaño, imagino que en función de la edad pueden preferirse unos u otros. Para mí el Canciller de Ventas es mítico, fui allí muy joven y fue como un mundo que se abrió a mis pies. Sin embargo, querría destacar el Excalibur de Vallecas, que si en alguna barra daban garrafón, que si su música no estuviera receptiva a novedades, que si era un lugar incomodo con tantas escaleras. De acuerdo, pero pese a ello era AUTÉNTICO, en el sentido más amplio de las palabra. Allí se pasaron noches memorables y larguísimas disfrutando de la música que se quería escuchar. Era un ambiente heavy-heavy que en ocasiones recordaba ser de algunos años atrás. Y lo más importante es que no dejaba de ser un garito de barrio, de Vallecas, de uno de lo0s barrios más rockeros de toda España.
ResponderEliminarMetálico