ROCK’N’ROLL FICTION.

Tenemos nueva sección en nuestro pequeño rinconcito musical. Bajo un título tan sugerente y adecuado dejamos que sea su propio autor, nuestro amigo Paul Martín Simón, el que nos explique la razón de ser de la misma:

   Rock’n’Roll Fiction surge como una colaboración en el fanzine musical orientado al Rock Progresivo “El Chamberlín”, dirigido por Carlos de la Fuente. Intenta rescatar aquellas bandas o proyectos musicales que por diversas razones no llegaron a fructificar, no quedando en muchos casos ningún testimonio sonoro o gráfico e intentando suplir esto último por una interpretación a dibujo de esas mismas bandas o reuniones de músicos que pudieron ser, pero nunca fueron. Así mismo también tienen aquí cabida imágenes de conciertos que no quedaron capturadas en foto y que, por el motivo que fuera, resultaron especiales, entrañables y únicas.

Un pequeño divertimento para soñar e imaginar cómo pudo suceder aquello que nunca pasó. Os animo a coger lápiz y papel y dibujar aquello que os gustaría ver. Espero que disfrutéis de Rock’n’Roll Fiction.

Paul Martín Simón.

Deep Purple y Roger Glover en Vigo.

Aún me quedaban unos días de vacaciones de aquel caluroso verano del 2000 y decidí ir a Vigo para visitar las Islas Cíes. Cuál fue mi sorpresa cuando, al llegar a la ciudad, un cartel anuncia un concierto de Deep Purple para el día siguiente. Consigo una entrada sin dificultad y me dirijo al lugar el día señalado. Compruebo que la mayoría del público ve el concierto gratuitamente desde los altos del Parque Castrelos. Allí veo a los teloneros, Mago de Oz. Para Purple hago uso de mi entrada y me coloco en primera fila, tras las vallas. A mi izquierda, a menos de un metro, un orgulloso padre rockero lleva a hombros a su hija.

Cuando salen Purple a escena, su bajista Roger Glover desde el principio se coloca frente a la niña, tocando con sus poses más rockeras casi exclusivamente para ella. La niña flipa en colores mientras su padre se emociona por esta atención. Todos alrededor nos sentimos generacionalmente padres de la criatura y aplaudimos la actitud de un Glover que, al final del concierto, regala su púa a la niña.

Desde aquel día Roger Glover, además de ser uno de mis bajistas preferidos, se convirtió en un ser entrañable y cercano.

Long Live Rock n’ Roll.

Paul Martín Simón.